Si hay un concepto que englobe de manera inequívoca el espíritu de Girard-Perregaux este es, sin duda alguna, el que se materializa en la legendaria e icónica construcción del tourbillon bajo tres puentes de oro. Es por este motivo que cualquier referencia que se añada a esta serie de guardatiempos de la élite de la Alta Relojería debe ser considerada como una obra maestra más y, sin pero alguno, otorgarle sin reservas la importancia que merece. En este 2013, la manufactura de La Chaux-de-Fonds únicamente había incorporado nuevas referencias a esta construcción en el apartado de relojes femeninos, referencias sobre las cuales os informamos a su debido tiempo en este artículo.
Este mes de octubre ha sido el elegido por Girard-Perregaux para dar a luz a dos nuevas piezas dedicadas al genero opuesto. Dos piezas que representan dos nuevas referencias que divergen la una de la otra únicamente en el material de base para la manufactura de la caja, del tipo 1966 con un diámetro de 41 mm, y en consecuencia y consonancia con este, con el material de ciertos componentes del calibre albergado. De este modo, ambas referencias coinciden prácticamente en todos sus dígitos excepto, claro está, en los dos que sirven para identificar al material de la caja.
99193-52-002-BA6A para la versión en oro rosa y 99193-53-002-BA6A para la correspondiente al oro blanco albergan, respectivamente, los calibres de remonte automático y 13 3/4»’ GP09600-0022 para el primer caso y GP09600-24 para el segundo que, con características constructivas y mecánicas idénticas, se diferencian entre ellos por el material utilizado en la confección de cada uno de los tres puentes y que coincide con el material de la caja. También las correas se mantienen idénticas en ambos guardatiempos y responden a una confección en piel de aligátor de color negro con cierre desplegable en oro rosa o blanco según corresponda.
El dial de estos guardatiempos, como es habitual en todos los que integran esta colección, se caracteriza por dejar a la vista la espectacular construcción del calibre. En este caso, la platina posee un acabado arenado que contrasta de manera exquisita con el pulido a espejo aplicado a cada uno de los tres puentes del movimiento, cuneados y en forma de flecha. Ni decir tiene, que todos los ángulos y achaflanados, así como sus pulidos, se han realizado completamente a mano. A las 12 y soportado por el puente superior aparece el barrilete, esqueletizado y grabado a mano, que proporciona una reserva de marcha de 48 horas mientras que, en el extremo opuesto, a las 6, se implementa el tourbillon de 60 segundos integrado por un total de 80 componentes con un peso de tan sólo 0,3 gramos y sus jaulas, superior e inferior, achaflanadas y pulidas a mano.
De hecho, y no sin antes haberlo confirmado consultando los archivos, los nuevos modelos representan una variación sobre una de las piezas existentes en el catálogo de Girard-Perregaux que respondía a la referencia 99193-52-001-BA6A. Si comparamos el nuevo código con el anterior es fácil observar que divergen en los tres dígitos que la manufactura destina en sus referencias a la identificación del dial y que del 001 anterior pasa al 002. Por los elementos que quedan a la vista en las imágenes de las que disponemos de ambas versiones, las diferencias entre ambos diales se basan en dos aspectos. En primer lugar en el acabado de la platina arenado en el nuevo modelo en tanto que en el ya existente presentaba un grabado de delgados anillos concéntricos. La segunda diferencia radica en la tapa del barrilete que en esta nueva versión es del tipo esqueletizado y grabada a mano. Ambos guardatiempos tienen un precio de venta recomendado de 166.000 €.
La segunda parte de este artículo versa sobre el compromiso que la manufactura inició el pasado 2012 con el anuncio de que se convertía en Cronometrador Exclusivo y Miembro Corporativo del Museo del Cine de la Academia que tiene prevista la apertura de sus puertas en Los Ángeles en el año 2016. Si hace tan sólo unos días os presentábamos las dos Ediciones Especiales Hollywoodland del Chrono Hawk, esta vez Girard-Perregaux rinde tributo a Quentin Tarantino – quien portaba un 1966 Calendario Anual y Ecuación del Tiempo – durante la celebración del Festival Lumière, patrocinado por la manufactura y fundado en 2009, y celebrado en Lyon entre los días 14 y 20 de octubre y durante los cuales el director de cine fue galardonado con el Premio Lumière en esta su quinta edición y después de que en las anteriores lo hubieran recibido Clint Eastwood, Milos Forman, Gérard Depardieu y Ken Loach.
