Como cada año por estas fechas, IWC nos presenta la edición especial Saint Exupéry de de un reloj Pilot, o en su denominación más original: Flieger. En esta ocasión se trata de una edición limitada a 500 ejemplares y la variante elegida es su más reciente Pilot cronógrafo manufactura con función flyback.
Esta es la sexta edición de una serie limitada dedicada al célebre aviador y escritor Antoine de Saint-Exupéry. La saga, iniciada en el 2006 con el homenaje a su novela “vuelo nocturno”, siempre se ha relacionado con alguna obra del escritor relacionada con la aviación. En esta edición 2012 el motivo de la dedicatoria es algo menos concreto y en el fondo del reloj encontramos el gravado del último avión que pilotó Saint Exupáry, el Lightning P-38, con el que emprendió un vuelo de reconocimiento sobre la Francia ocupada el día 31 de julio de 1944, del que nunca más regresó.
Saliéndose de lo habitual, esta edición especial no se limita a una variación estética de un reloj ya existente, sino que mezcla características de relojes pertenecientes a diferentes colecciones de su catálogo. Como base estética para su caja y esfera podemos tomar tanto el Cronógrafo Spitfire como el Top Gun que ya os presentamos en sus correspondientes artículos. Por su parte, la mecánica del cronógrafo es la que utilizan el Portuguese Yacht Club o el Big Ingenieur Chronograph.
Este Chronograph Saint Exupéry, presentado en caja de oro rojo, sigue los códigos estéticos de las ediciones anteriores. Así, encontramos la ya característica esfera en color tabaco y los pespuntes de la correa en color crema. En esta ocasión, también se implanta una variación, que si bien sigue siendo estética, implica algo más que un cambio de color. Me refiero a la ventanilla de su fechador, que al contrario que los modelos mencionados, donde la encontrábamos a las 3 horas en forma de amplio segmento, se presenta en una ventanilla convencional ubicada dentro del pequeño segundero situado a las 6 horas.
La caja, con 43 milímetros de diámetro y 15,5 de grosor, alberga el calibre de cronógrafo automático 89361. La gran peculiaridad de este mecanismo, manufacturado totalmente por IWC, es la forma de contar las horas y minutos de su función de cronógrafo. Así, en lugar de la típica configuración tri-compax con un totalizador de 12 horas y otro de 30 minutos, encontramos un solo sub-dial en el que, emulando la indicación de la hora convencional, dos agujas nos indican las horas y los minutos transcurridos en la medición. Como siempre, los segundos los cuenta la aguja trotadora central.