Patek Philippe y sus Repeticiones de Minutos:
Reportaje en primicia: el gran concierto de la Alta Relojería

Lo prometido es deuda. Hace ya meses que en diversos artículos mencionábamos la futura publicación de un artículo muy especial, más aún, una primicia hasta ahora nunca realizada. Pues bien, aquí lo tenéis: una comparativa entre 12, sí, habéis leído bien, nada menos que 12 relojes Patek Philippe repetición de minutos.

Hablar de sonerías, concretamente de repetición de minutos, es hablar de la gran complicación por excelencia de la Alta Relojería, de la más apreciada y soñada por los amantes del arte mecánico relojero. Hablar de Patek Philippe es hablar de la firma dominante de la Alta Relojería desde hace más de un siglo. Hablar de una repetición de minutos de Patek Philippe es hablar del sueño inalcanzable para la inmensa mayoría de aficionados y coleccionistas. Pocas personas han tenido la oportunidad de ver en vivo uno de estos relojes, ya que las listas de espera son tan exclusivas que jamás pasa uno de ellos por el escaparate de una relojería. Menos aún han podido escucharlos. Ver, tocar, escuchar y grabar 12 de ellos dudo que se haya realizado antes.

La prehistoria del proyecto

Fue a principios de año, durante una de las siempre interesantes conversaciones con John Vergotti, Director General de Patek Philippe en España. No recuerdo bien el motivo, pero surgió el tema de las repeticiones de minutos. Comentaba lo interesante que sería realizar un artículo sobre esta temática, pero también las dificultades que entrañaba. El principal problema residía en que lo que distingue cualitativamente a dos relojes con repetición de minutos es la calidad de su sonido, y este, además de relativamente subjetivo, es imposible de transmitir con palabras. Dicho de otro modo, la música no se lee, se escucha.

Y ahí, surgió de repente la idea, como suele suceder siempre, sin premeditación y de pura casualidad. El problema de un artículo con esa temática era de imposible solución para un medio escrito convencional, pero no para una web como Watch-Test, ya que el medio permite la inclusión de cualquier archivo digital, tanto visual como sonoro. La idea gustó a John, que prometió estudiarlo. Pero tengo que reconocer que aunque tengo claro que cuando el Sr. Vergotti promete algo siempre se cumple, me parecía realmente difícil que se pudiera llevar a cabo la idea por las dificultades de todo tipo que implica.

La sorpresa se produjo cuando semanas más tarde, Patek Philippe me confirmó que todo se había arreglado para que pudiéramos grabar un repetición de minutos y que para ello aprovecharíamos el viaje que ya teníamos programado en mayo a las diversas manufacturas de la firma ginebrina. Sorpresa, pero también entusiasmo, y porqué no decirlo, cierta preocupación por no «meter la pata» durante la grabación. Evidentemente lo excepcional de la oportunidad que nos brindaba Patek Philippe no permitía fallos ni pretensiones de repetir la experiencia por un fallo técnico en la grabación.

La audición y grabación se realizó en una pequeña sala abierta de los Salones Patek Philippe de Ginebra. Con el mismo fin de obtener la máxima fidelidad a las condiciones reales, no se utilizó ningún soporte especial para los relojes, simplemente se depositaron en la mesa que podéis ver en las imágenes. En lo que si tuvimos sumo cuidado es en poner siempre los relojes en el mismo sitio y en ubicar los micrófonos exactamente a la misma distancia. Evidentemente, todos los ajustes de la grabadora son idénticos para todas las grabaciones.

Finalmente y sin aviso previo, lo que inicialmente tenía que ser la grabación de un repetición de minutos, se convirtió para nuestro asombro en una comparativa. No imaginaba ni en el mejor de mis sueños que Patek Philippe nos permitiría oir y grabar nada menos que 12 de sus relojes con repetición de minutos, prácticamente todos los que constan en su catálogo. No tengo ni idea de como consiguieron reunir semejante arsenal, pero estoy seguro que John Vergotti y su equipo tuvieron que realizar maravillas para conseguirlo. Por tanto, nuestro mayor agradecimiento a ellos, agradecimiento que extiendo al Sr. Stern, Presidente de Patek Philippe, pues con toda seguridad fue quien dio el visto bueno final a una propuesta de esta envergadura.

La intrahistoria: el como se hizo

Ya sabíamos que podríamos realizar el reportaje, pero dado que comportaba mayores dificultades técnicas que la escritura o la imagen, había que pensar el «como». Para dar con la respuesta adecuada un buen método es volver al «porqué». El génesis de esta idea era transmitir a nuestros lectores la experiencia de audicionar una repetición de minutos con la máxima fidelidad posible y en consecuencia debía ser una escucha realista.

Como de antemano ya se nos comunicó que la grabación se realizaría en los Salones Patek Philippe de Ginebra, quedaba descartada la idea de un entorno aislado acústicamente, lo que por otra parte beneficiaba la idea de buscar la máxima fidelidad, pues el poseedor de un reloj con sonería lo escuchará en ambientes convencionales, con todo el ruido ambiental que ello comporta.

Siguiendo con la misma idea de fidelidad, la grabación se realizó con una grabadora profesional, pero no con un equipo de grabación de estudio ya que este está pensado para otro tipo de ambiente. Dado que la grabadora permite numerosos ajustes, previamente al viaje realizamos numerosas pruebas para encontrar la configuración adecuada, que consiguiese captar las sutilidades de un sonido tan peculiar como es el que emite un reloj con repetición de minutos, pero sin añadir artificios.

El sonido que transmite un repetición de minutos es muy bajo en cuanto a decibelios, por ello, y con el fin de no perder ningún matiz musical, debimos ajustar el nivel de sensibilidad de grabación a un nivel relativamente alto. Ello implica que, a pesar de orientar los micrófonos de forma muy direccional, también se produce un inevitable ruido de fondo. En el postproceso de los archivos de audio hemos suavizado dicho ruido de forma muy sutil ya que eliminarlo totalmente implica alterar de forma artificiosa todas las características tímbricas del sonido que emite el reloj.

Consejos de audición

Es sumamente importante seguir una serie de normas para que la experiencia auditiva sea la correcta. Vamos a enumerar las más importantes, partiendo de la base que el medio que reproducirá el sonido será vuestro ordenador o tablet.

1. Dado que cada ordenador es un mundo, resulta imposible aconsejar unos ajustes de volumen con un valor numérico concreto. Lo ideal es que ajustéis el volumen a un nivel en el que prácticamente desaparece el ruido de fondo antes mencionado, pero en el que se perciben claramente las pisadas e incluso conversaciones que se producían en el entorno durante alguna de las grabaciones. A dicho nivel, podréis percibir todos los matices de los timbres del reloj, aunque a un nivel sonoro relativamente bajo, que equivale al que percibiríais en una escucha real.
2. Es aconsejable realizar las audiciones mediante auriculares y no a través de los altavoces externos del ordenador o tablet, ya que estos suelen ser de muy mala calidad. Además, con auriculares se elimina el ruido ambiental de vuestro entorno, que sumado al de la grabación resultaría artificioso.
3. Con el fin de conseguir la máxima calidad de grabación, esta se ha realizado a una frecuencia de muestreo de 96.000 kHz, muy superior a los 41.000 típicos de un CD y aún más que los de una grabación mp3. Por ello es importante que ajustéis los valores de salida de vuestro ordenador a dicha frecuencia exacta, ni mayor ni menor. A no ser que se trate de un aparato muy antiguo, seguro que permite dicha frecuencia.
4. Sobra mencionar que utilicéis los mejores auriculares de los que dispongáis. Son totalmente desaconsejables auriculares estilo Beats, ya que a pesar de su gran popularidad son la antítesis de la fidelidad, pues colorean enormemente y de forma artificiosa el sonido. Si disponéis de un DAC externo (tipo USB) sería lo ideal, pues su calidad, aunque sea un modelo básico, será mucho mayor que el DAC interno del ordenador.
5. Los archivos de audio e una frecuencia de 96.000 kHz son muy pesados, entre 5 y 8 Mb cada uno. Por ello, dada su extensión y lo que se tardaría en cargar la página, los hemos configurado para que no se descarguen automáticamente cuando se abre el artículo. Se cargarán individualmente cada vez que pulséis el «play» de la barra de sonido de cada reloj, lo que puede originar cierto retraso (depende de la velocidad de vuestra conexión) en empezar la reproducción. Es normal, paciencia.

Veréis que hay relojes que hemos grabado en dos versiones de metal de caja y probablemente os asombrará lo distinto que suenan. El material de la caja es solo uno de los factores que influyen en el sonido que emitirá el reloj. El volumen de aire que contiene dicha caja, su geometría interna, el material y longitud de los timbres, la forma y material de los martillos, la velocidad de impacto… son solo algunos de los otros innumerables factores que influyen en los matices del sonido de un reloj con sonería.

El porqué un reloj produce unas notas más frías o más cálidas, el porqué una nota decae lentamente o lo hace de forma seca, es algo sobre lo que existen teorías irreprochables desde el punto de vista técnico y científico, pero que la realidad desmonta con mucha frecuencia. Nadie sabe más ni tiene más experiencia sobre los relojes con sonería que Patek Philippe, pero incluso ellos admiten que hay ocasiones en los que no tienen ni idea del porqué un reloj determinado emite el sonido «perfecto» (algo muy subjetivo) y tan distinto a otro de características similares. Simplemente son demasiados y demasiado sutiles los factores que influyen en ello.

Una vez finalizada la larguísima, pero necesaria, introducción, os dejo con las audiciones. Las hemos agrupados en tres grupos (más la sorpresa final) y en el mismo orden lógico que realizamos las grabaciones. En cada reloj encontraréis su imagen frontal, la referencia, su descripción técnica y un gráfico con su análisis espectral de decibelios y frecuencias. No voy a entrar en complejas explicaciones del gráfico, pero solo su visualización ya vislumbra las diferencias de sonido entre uno y otro reloj. Finalmente, por supuesto, la barra de sonido que activa la emisión del sonido pulsando el símbolo de «play»

 

Grupo 1 – Timbre tradicional sin complicación modular adicional

Es el sistema convencional de producir sonido en un repetición de minutos. Consiste en dos martillos que percuten sobre dos timbres que recorren la circunferencia interna de la caja. Uno de ellos produce el sonido grave de las horas, mientras el otro produce el sonido agudo de los minutos. Para los cuartos se alternan ambos martillos.

En este grupo de relojes incluimos a los que no comportan ninguna complicación adicional a la indicación del tiempo. Entre ellos también se encuentra un reloj con la complicación de tourbillon, que por su poca incidencia en el volumen del movimiento, en teoría, no debe alterar el sonido final.

 

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          5078R

 

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           5078P

 

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          7000R

 

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           5539G

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Grupo 2 – Timbre tradicional con Calendario Perpetuo

Seguimos con el tipo de timbre del grupo anterior, pero ahora con relojes que incluyen grandes complicaciones adicionales, como es el calendario perpetuo en diversas de sus configuraciones. En teoría, todas las piezas adicionales que por ello se añaden al anverso del calibre, debería producir una cierta alteración del sonido debido al menor volumen de aire disponible en la caja y al rebote de las vibraciones en ellas, aunque no tiene porque ser un efecto negativo.

Si Patek denota que se producen alteraciones no deseables por las complicaciones añadidas, procede a alterar factores, como puede ser la geometría interna de la caja, para compensarlo/optimizarlo.

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          5213G

 

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          5304R

 

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           5216P

 

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          5207P

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Grupo 3 – Timbre Catedral con Calendario Perpetuo

El timbre mas puro Catedral es considerado por la mayoría como el mejor y más «musical» ya que extiende la duración de cada nota. Para ello, los dos timbres son de una longitud casi el doble de los timbres convencionales y en consecuencia dan casi dos vueltas al interior de la caja. Ello conlleva una gran dificultad técnica, especialmente en un reloj de pulsera, cuyo volumen es limitado, ya que se debe evitar que rocen entre sí cuando vibran tras el golpeo de los martillos.

En este pequeño grupo encontramos dos relojes que comparten la misma referencia y que solo difieren entre ellos por el material de la caja. Ambos añaden también la complicación de Calendario Perpetuo.

 

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           5074P

 

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           5074R

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El colofón: Lo impensable

Finalizada la audición y grabación de los dos 5074 y finalizada la sesión. Eso es evidentemente lo que pensamos Jordi y yo. Ya no quedan más repeticiones de minutos. Pero no, tras una pequeña espera vemos aparecer lo impensable, tan impensable que ya ni lo teníamos en cuenta para este proyecto: el 6002, o lo que es lo mismo, el reloj de pulsera más complicado creado jamás por Patek Philippe.

Había visto el «Sky Moon Tourbillon» 6002, sucesor del 5002, con motivo de su presentación en Ginebra el 29 de mayo del 2013, durante un espectacular evento de la firma ginebrina. He dicho visto, porque estaba debidamente pertrechado en su vitrina y ninguno de los afortunados asistentes lo pudo tocar. Impensable es por tanto que Patek nos permitiera tenerlo en nuestras manos y grabar el sonido de sus timbres Catedral. Pero para nuestro asombro así fue.

Nunca es aconsejable decir, ni siquiera pensar, que uno lo ha visto o hecho todo en un ámbito determinado, pero esta es la ocasión en la que estado más tentado de hacerlo. Y después de esto ¿que?. Deleitaos pues con el impresionante sonido de este 6002, la pieza cumbre de la Alta Relojería de pulsera, por lo menos de momento…

 

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          6002G

 

Bien, aquí termina este largo artículo. Muchos pensaréis, y con razón, que hubiera sido pertinente incluir en él una explicación de lo que es la sonería y particularmente la repetición de minutos. Su origen, su historia y su técnica. Así lo había pensado yo también, pero en vista del espacio necesario para ello y de la extensión de este artículo, creo que hubiese sido excesivo. Por poner un ejemplo, la propia Patek ha editado recientemente un libro, únicamente dedicado a la repetición de minutos, que cuenta con nada menos que 170 páginas. La temática es tan apasionante y compleja y la documentación existente tan amplia, que merece un artículo dedicado en profundidad, que prometo elaborar en un futuro no muy lejano.

De todos modos, aquí no termina la temática de la repetición de minutos ni la de las grabaciones. Fue la propia Patek que nos animó a repetir la misma experiencia con otras marcas de prestigio. Así lo hemos hecho y el próximo será Vacheron Constantin.

Tampoco queda aquí la temática de excepción con Patek Philippe de protagonista. El próximo lunes, solo de aquí a 4 días, tendremos el privilegio de asistir al exclusivo evento que Patek ofrecerá en Ginebra con motivo de su 175 aniversario. Ya está anunciado que en el se presentará toda una colección de relojes conmemorativa, e intuyo, aunque no deja de ser una mera especulación, que dentro de ella veremos algún reloj de auténtica excepción. De ahí la frase de «por lo menos de momento…»  con la que he finalizado la presentación del 6002. A la vuelta os daremos debida cuenta de lo que allí acontezca y se presente.

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