Se ha iniciado una nueva batalla relojera: la de los TOPGUN entre IWC y Breitling. Primero fue IWC con sus diversos modelos dedicados a esta escuadrilla y ahora Breitling con este nuevo Chronomat.
Esta duplicidad mediática resulta ciertamente sorprendente. En el 2011 IWC incrementó su colección Pilot’s con los TOPGUN y este año, en el SIHH, ha remodelado totalmente esta gama de relojes. Por si fuera poco, toda la espectacular decoración del stand de IWC en el SIHH estaba protagonizado por un simulador a tamaño real de uno de los cazas de combate de esta famosa unidad de la US Navy.
Ahora, parece que Breitling reclama la legitimidad de esta asociación, ya que su nota de prensa reza textualmente: Breitling está asociado desde hace largo tiempo a los más grandes profesionales y formaciones del planeta, entre ellos la prestigiosa escuela de pilotaje TOPGUN, los «instructores de los instructores» de la US Navy. Reunidos en su base de Fallon, Nevada, los miembros de los TOPGUN han decido por unanimidad concretar su aproximación exclusiva a Breitling para la creación de una edición limitada en la que aparezca su emblema.
Desde el punto de vista relojero esta dualidad carece de importancia, pero para el posible comprador “fan” de los TOPGUN esta situación puede resultar cuanto menos confusa. Personalmente me da igual cual de las dos marcas tenga más legitimidad moral o legal, pero esta coincidencia reafirma, o más bien pone en duda la avalancha de relojes de casi todas las marcas que basan su “excepcionalidad” en estar dedicados a celebridades, eventos y demás…
Desde el punto de vista relojero esta dualidad carece de importancia, pero para el posible comprador “fan” de los TOPGUN esta situación puede resultar cuanto menos confusa. Personalmente me da igual cual de las dos marcas tenga más legitimidad moral o legal, pero esta coincidencia reafirma, o más bien pone en duda la avalancha de relojes de casi todas las marcas que basan su “excepcionalidad” en estar dedicados a celebridades, eventos y demás…
Centrándonos en el reloj en sí, poco hay que añadir a lo que ya conocéis del Chronomat 44 “normal”. Unicamente se diferencia de él en el pequeño segundero, situado a las 9 horas, que en este caso está decorado con los colores de la «United States Navy Fighter Weapons School» y que lleva este título impreso en su contorno. El fondo de la caja reproduce nuevamente este emblema y lleva gravado el número de producción individual del reloj. La base de la esfera es la misma que la del Chronomat de producción regular en su variante “azul Balckeye”. El resto del reloj, tanto caja como mecanismo son idénticos.
Como no podía ser de otro modo, se trata de una “Edición Especial” limitada a 500 ejemplares y que según anuncia Breitling “Una parte de los beneficios de este instrumento de excepción serán donados a una obra caritativa elegida por los TOPGUN”
