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Corría el año 2006 cuando Glashütte Original iniciaba la saga de sus relojes de observación creando la, a partir de entonces, colección conocida como Senator Navigator. Los dos primeros modelos que vieron la luz en ese año fueron, en primer lugar el Senator Navigator Automatic y, en segundo lugar y el objeto de este test, el Senator Navigator Panorama Date.

No hablaremos pues de un guardatiempos de nueva aparición, pero sí de un modelo que el próximo mes de marzo cumplirá seis años en la colección de relojes de la manufactura germana. En mi opinión ninguno de los modelos de esta colección ha perdido ni una pequeña parte de su atractivo a pesar de su relativa antigüedad. Es más y en mi caso particular, este guardatiempos en concreto fue un serio aspirante hace tan sólo un año cuando decidí aumentar mi colección.
El dial del Senator Navigator Panorama Date se mantiene fiel a la razón de ser y al origen de los relojes de observación: la legibilidad. Sencillez y altamente diáfano en sus indicaciones son sus características principales. El color negro mate de la esfera facilita un elevado contraste con los índices en superluminova. Éstos tienen un grosor considerable en las posiciones de cinco minutos, con los dígitos correspondientes a las horas, mientras que el resto son más delgados y ligeramente más cortos. En la posición de las 12 encontramos el triángulo con los dos puntos a cada uno de sus lados, típico de los relojes de observación.

 

Las agujas de horas y minutos son proporcionadas pero de un tamaño lo suficientemente grande como para que la consulta de la información proporcionada sea rápida y precisa. Ayuda considerablemente, a parte del bello contraste estético que ofrece, que los bordes de ambas sean de un color azul cobalto con la zona interior en blanco.
La segundera es de color blanco, delgada y con una longitud que abarca hasta prácticamente el perímetro del dial. Esta morfología unida a la de los ya comentados índices hace que la lectura de los segundos resulte de igual facilidad y precisión que la de las horas y minutos.

La nitidez del dial tan sólo se ve alterada por la única indicación adicional que este proporciona: la fecha implementada en el formato panorámico que caracteriza a la manufactura. La corrección de la fecha, cuando es necesario, se realiza a través del accionamiento ubicado en la carrura de la caja a la altura de las 2. En este punto es donde deseo comentar dos aspectos al respecto de este guardatiempos.

El primero de ellos es totalmente objetivo y hace referencia a la impecable ejecución de la indicación de la fecha panorámica. Las dimensiones de los dígitos son perfectas y, más importante aún, los dos discos que llevan de manera respectiva las decenas y las unidades quedan exactamente en el mismo plano. No se aprecia desnivel alguno entre ambos.
El segundo aspecto es totalmente subjetivo y hace referencia a la ubicación de esta indicación en el dial. Personalmente me molesta el hecho de que la ventana destinada a mostrar la fecha recorte el número 4 y quede tan cercana a la parte superior del 5. Obviamente esta ubicación ha venido condicionada por el calibre que monta el Panorama Date y cambiarla a una nueva posición hubiera exigido el modificar el calibre o incluso desarrollar uno de nuevo.

 

Hablando precisamente del calibre que alberga este reloj, se trata del movimiento de remonte automático manufactura 100 en su versión 03, es decir, el 100-03. La frecuencia de oscilación del volante es de 28.800 alternancias por hora (4 Hz) y su reserva de marcha de unas 55 horas, lo que supone algo más de dos días.

De este calibre hemos comentado las indicaciones que ofrece, pero queda por comentar una función que no se ve reflejada en el dial y que, personalmente, considero de suma importancia y utilidad: la vuelta a cero de la segundera del movimiento base. Os habréis fijado que en la carrura de la caja, a la altura de las 8, hay un pulsador. Cada vez que lo accionamos la aguja indicadora de los segundos salta de manera instantánea a la posición de cero. Esta función permite sincronizar el reloj con una facilidad asombrosa (a la vez que, no lo voy a negar, produce un verdadero placer el activarlo dada la suma suavidad de su accionamiento). Para ello extraemos la corona, la giramos para poner en su sitio las agujas de horas y minutos e, inmediatamente después, activamos el pulsador de puesta a cero. Reloj sincronizado.

La caja que contiene la totalidad de los componentes descritos está fabricada en acero con acabado cepillado y tiene unas dimensiones de 44 mm de diámetro con un espesor, o altura, de 13,9 mm. Obviamente estas dimensiones no las podemos considerar como contenidas, pero en realidad tampoco tendría sentido que lo fueran dada la naturaleza del reloj. La hermeticidad es de 5 bar (50 metros), suficiente para la finalidad original de estos relojes pero quizás algo escasa si pretendemos realizar algún tipo de actividad acuática.

El Senator Navigator Panorama Date está disponible en dos versiones que se distinguen una de la otra tan sólo por el fondo de la caja que puede ser bien ciego, en acero, o bien en cristal de zafiro.
A los dos modelos que he mencionado en este artículo y dentro de la colección Senator Navigator de Glashütte Original, le siguieron tres más: el Senator Navigator Chronograph, el Senator Navigator Perpetual Calender (uno de los calendarios perpetuos con mejor calidad precio del mercado, en mi opinión) y, por último, aparecido el pasado año 2011, el Senator Navigator WorldView, un horas mundiales sobre el que ya os hablé en uno de los primeros artículos de este blog.

Watch-Test es una página web especializada en análisis y comparativas de relojes mecánicos de pulsera de alta gama y de lujo. Todos los artículos de Watch-Test son originales, independientes y exclusivos, escritos por editores referentes en el sector.
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POR   

Ingeniero Técnico Industrial, de formación electrónica con pasión por la micro-mecánica. Co-fundador y editor de Watch-Test. En mi trabajo y en la vida tengo una máxima: Las cosas hay que explicarlas de manera que se entiendan. De lo contrario, el esfuerzo es en vano.

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