Con la denominación de Big Bang Integral, Hublot presenta una nueva versión de su reloj estrella con el objetivo de convertirlo en el guardatiempo universal. Para hacerlo ha elegido la LVMH Watch Week Dubai 2020, un evento de 3 días organizado por el grupo francés para presentar novedades de sus cuatro marcas de relojes: Hublot, Bulgari, Zenith y TAG Heuer.
Ello no implica que este grupo abandone Baselworld, feria en la que también exhibirán a partir del próximo 30 de abril. Según LVMH, el motivo de esta mini exposición en Dubai, dado el cambio de fechas de Baselworld, es que el grupo no quería dejar de presentar novedades durante tanto tiempo. Es una explicación un tanto discutible ya que estamos hablando de una diferencia de poco más de un mes, pero «doctores tiene la iglesia», en este caso los responsables de marketing del grupo, que seguro que saben lo que hacen.
Centrándonos ya en el Big Bang Integral, podemos definirlo como la gran apuesta de Hublot para competir en el complejo micro-sector de los relojes de uso universal. Los grandes iconos de este tipo de reloj ya los conocéis sobradamente; el Nautilus de Patek Philippe y el Royal Oak de Audemars Piguet. También, por supuesto, hay que mencionar el Overseas de Vacheron Constantin y el reciente Odysseus de Lange &Söhne. En el escalón inmediatamente inferior encontramos el Alpine Eagle de Chopard, el Santos de Cartier, el Polo S de Piaget o el Octo de Bulgari.
¿Que condiciones debe cumplir un reloj de uso universal?. Se podrían mencionar muchos aspectos necesarios, pero creo que se pueden resumir en dos conceptos; debe se elegante y debe ser también apropiado para un uso deportivo moderado. El requisito imprescindible para poder optar a ello es que el reloj debe equipar un brazalete metálico, el único medio de sujeción que puede ser duradero, fiable y al mismo tiempo elegante. Ningún otro material o medio de unir el reloj a la muñeca cumple ambos requisitos.
El brazalete metálico es precisamente lo que le faltaba al Big Bang de Hublot, probablemente el reloj más exitoso de las últimas décadas. Pues bien, ya lo tenemos aquí. Big Bang Integral es como Hublot denomina esta pieza, creada para convertirse en un icono aun mayor de lo que ya es el Big Bang.
No se trataba de una simple sustitución de una correa de piel o de caucho por un brazalete metálico. Esto se puede hacer con cualquier reloj, pero no cumpliría con otra premisa imprescindible que debe cumplir cualquier reloj de uso «universal». El diseño del brazalete y de la caja debe ser «integral». Estos dos elementos externos deben estar unidos como si formasen una sola pieza. Para ello, Hublot ha tenido que rediseñar la caja del Big Bang. Además ha tenido que hacerlo sin provocar que pierda su identidad. Creo que las imágenes son claras; objetivo conseguido.
Si observamos la zona donde deben unirse brazalete y caja, resulta realmente difícil apreciar qué piezas pertenecen a cada uno de los dos elementos. Ello es la prueba evidente de una integración bien realizada.
Elegir este tamaño es una decisión acertada y coherente ya que calificar de elegante a cualquier reloj que sobrepase dicho tamaño es pecar de optimismo. La esfera también conserva la estética del Big Bang de 42 mm, salvo los índices horarios en forma de números arábigos, que en el Big Bang Integral se sustituyen por índices tipo bastón.
Con el mismo fin de optimizar la integración visual, vemos que han desaparecido las características inserciones de composite que encontramos en la carrura de los Big Bang. No obstante, se mantiene la inserción de composite negro entre la carrura y el bisel. Otro elemento que se modifica son los pulsadores del cronógrafo, que abandonan la geometría redonda para adquirir una forma rectangular.
Todos los elementos de la caja del Big Bang Integral alternan el acabado satinado y pulido: En los eslabones que conforman el brazalete también se reproduce esta alternancia, realizándose un acabado satinado en el plano superior y pulido en las caras laterales de su geometría trapezoidal.
El mecanismo que equipa estos Big Bang Integral es el mismo que encontramos en los Big Bang «convencionales»; el calibre Unico HUB 1280. Se trata de un movimiento de carga automática que ofrece la función de cronógrafo flyback, oscila a 28.800 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 72 horas.
Como ya hemos apreciado en las imágenes que ilustran este artículo, Hublot ofrece el Big Bang Integral en tres materiales de caja y brazalete; titanio, King Gold y cerámica negra. Los dos primeros pasarán a formar parte del catálogo regular de la marca, mientras que la versión cerámica se emitirá en formato de edición limitada a 500 ejemplares.
Los precios del Big Bang Integral son de 20.700 EUR para la versión de titanio, 51.800 EUR para la realizada en King Gold y 22.700 EUR para la versión cerámica.
