Relojes y coches, coches y relojes, no importa el orden. Dos mundos íntimamente ligados por ser objeto de deseo del hombre que tienen en la mecánica y el diseño su fascinante punto de encuentro. Innovación, I+D, rendimiento y eficiencia mecánica, nuevos diseños y acabados, la estructura básica chasis/motor frente a caja/calibre,… Como vemos, las similitudes son incontables a pesar de su evidente diferencia dimensional, a lo que debemos sumar su innegable atractivo como objeto de lujo y como referente de status. Y si por si esto no fuera suficiente, debemos considerar el indiscutible papel protagonista que adquiere la relojería en su papel como cronometrador de las competiciones automovilísticas, en las que una centésima puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. Es en este ámbito donde podemos encontramos, desde 1988, una de las más sólidas relaciones entre ambos mundos: la histórica carrera Mille Miglia y Chopard.
Aplazada desde el mes de marzo, la prestigiosa carrera italiana se ha celebrado el pasado fin de semana por los preciosos paisajes de la región de Lombardía. Saliendo desde Brescia, trazado baja hasta Roma y regresa otra vez a la ciudad de salida. Son 1600 kilómetros, unas mil millas, por carreteras de montaña y veloces rectas a través de las llanuras. Y una vez más (y ya van 32), Chopard, como patrocinador y cronometrador oficial, presenta el Mille Miglia 2020 Race Edition en dos seductoras ediciones limitadas de aires vintage que nos transportan a la edad de oro del automovilismo más histórico, una en acero con acabado DLC y otra bicolor de acero (tambien con DLC) y oro rosa.
Mille Miglia Race Edition, una colección icónica.
El origen de esta estrecha unión debemos encontrarlo en la pasión de Karl-Friedrich Scheufele por los coches clásicos. Su impulso ha convertido a Chopard en el principal patrocinador de la mítica Mille Miglia y en una de las primeras marcas relojeras en asociar su nombre al mundo del automovilismo. Cada año desde 1988, Chopard ha presentado un modelo producido en edición limitada y reservado a los participantes de la famosa carrera italiana, los Mille Miglia Race Edition, con sólo dos excepciones, ambas en sus inicios: un llavero en 1989 y unos gemelos en 1992. Pero uno de los puntos de inflexión de la colección tuvo lugar en 1997, cuando, además de los relojes fabricados para los competidores, los Mille Miglia Race Edition empezaron a ser comercializados como ediciones limitadas, con la particularidad de que cada año el número de ejemplares producido coincidía con el año de la carrera. Esto fue así hasta 2015, cuando se inició la actual política de restringir dicha producción a 1.000 ejemplares en acero, acompañándose estos últimos años con otra versión en oro o bicolor limitada a 100 ejemplares (250 en 2019).
La edición 2020 Race Edition, diseño clásico pero estéticamente sorprendente
Por primera vez un Race Edition exhibe un acabado completamente negro que es su principal hecho diferencial respecto a otras ediciones que recurren a la misma caja en acero pulido/satinado. Conseguido gracias a su revestimiento en DLC, a su look negro debemos sumarle el trabajo previo de granallado del acero que le confiere la caja a una suave microtextura granulada. La unión de ambos tratamientos, que ya vimos por primera vez en el recientemente presentado L.U.C Skull One, me parece sumamente atractivo. Precioso diseño, tacto agradable, resistente mecánicamente hablando y, además, anti reflectante.
Con 42 mm de diámetro y 12,67 mm de grosor, la caja de acero tripartita de la versión en acero muestra el mismo acabado en todas sus partes, ya sea carrura, bisel, pulsadores, corona o trasera. Las únicas excepciones son el anillo que enmarca el cristal de zafiro ahumado posterior y la superficie de contacto de los pulsadores en forma de pistón. La corona roscada está decorada con un volante de tres radios. Por su parte, la versión bicolor únicamente se diferencia por su llamativo bisel en oro ético rosa que destaca sobremanera en la uniforme negrura del reloj. En aras de una lógica uniformidad estética, el bisel adopta el mismo granallado del resto de la caja.
Esfera tricompax de inspiración vintage a juego
Arropada por el look negro mate de la caja, la esfera logra captar toda la atención. También de color negro, presenta un acabado ligeramente rugoso que logra una continuidad estética con la caja. No es un negro tan puro, sino que su tonalidad sutilmente amarillenta se conjunta con el color amarillo de las diferentes escalas.
Su configuración tricompax 3-6-9, acompañada de numerales arábigos de reconocible tipografía y una escala taquimétrica perimetral, retoma el diseño de los Chopard Mille Miglia Race Edition de los años 2014, 2016 y 2018, en mi opinión el diseño que mejor le sienta. Junto a una discreta pero prescindible ventana de fecha situada entre las 4 y 5 horas, las agujas negras en forma de espada tienen el tamaño y proporciones justas para su perfecta legibilidad, mientras la delicada trotadora central luce un deportivo toque gracias al lacado en rojo de su extremo. Este color también lo encontramos en la pequeña pero visible flecha de la Mille Miglia, un elemento presente en todos los Race Edition. Tanto los índices como las manecillas están recubiertas de Super-LumiNova.
Retomando los totalizadores, la distribución antes mencionada ofrece el pequeño segundero a las 3 horas, el contador de 12 horas a las 6 y el de 30 minutos a las 9, todos ellos con escalas diferentes. Además, cada subesfera incluye escrita su función, un detalle que se integra sin tacha alguna y que le añade encanto.
Los Mille Miglia 2020 Race Edition laten al ritmo de las 28.800 alternancias por hora del calibre ETA-2892 con módulo Dubois-Depraz, un mecanismo de remonte automático con una reserva de marcha de 42 horas que cuenta con la certificacion cronométrica que otorga el COSC.
Ambos se entregan con una correa de becerro negro perforada inspirada en los guantes de conducir, mientras que su interior está forrado de caucho negro con dibujo de neumáticos de carreras Dunlop de los años 1960. Por último, el cierre desplegable, de acero granallado y acabado DLC, hace juego con la caja. Con el número de referencia 168589-3028, la versión de acero del Chopard Mille Miglia 2020 Race Edition está limitada a 1.000 unidades y tiene un precio de 6.670 €, mientras que del modelo bicolor referencia 168589-6002 sólo se fabricarán 250 piezas y su precio se incrementa hasta los 8.360 €.
