Por decimoquinta vez consecutiva, IWC se ha asociado con la fundación Laureus Sport for Good y así apoyar cientos de programas deportivos para niños en todo el mundo, con el objetivo de ayudar a terminar con la violencia, la discriminación y las desventajas a las que se enfrentan los jóvenes. Desde el inicio de esta benéfica relación en 2006, IWC lanza cada año una edición limitada con el nombre de Laureus. Para este 2021, la firma de Schaffhausen presenta una versión del Pilot’s Watch Mark XVIII de 41 mm con la novedad de que su caja está fabricada, por primera vez en IWC, en cerámica azul, un color que también protagoniza la esfera y la correa.
En cada edición anual Laureus, IWC realiza un lavado de cara a uno de sus relojes, desde el clásico Portofino hasta el deportivo Pilot’s Watch, habitualmente sumándole una esfera azul y el correspondiente logo. Pero este año ha ido un paso (o dos) más allá con el modelo de entrada a la colección de relojes de piloto, algo que siempre es de agradecer. Aunque IWC ya usó una fórmula similar para la edición Laureus de hace dos años con una caja de cerámica negra pulida, esta última edición es tangiblemente mejor. Por un lado, tenemos una rara caja de cerámica azul que solo hemos visto en algunos relojes, y por otro vemos como incrementa su hermeticidad de los 60 metros de la versión estándar hasta los 100 metros.
Pero es que además implementa un upgrade mecánico al actualizarse con el nuevo calibre 32111, un mecanismo con cinco días de reserva de marcha derivado del fascinante Big Pilot XPL (ambos son, a su vez, versiones modificadas de cal. 32110 que IWC lanzó hace dos años en el modelo base Spitfire).
Con un precio de 6.900 €, cuesta alrededor de un 10% más que la edición Top Gun de producción regular en cerámica negra. Eso sigue siendo una suma sustancial para un modelo de nivel de entrada, pero lo suficientemente razonable dadas las especificaciones y los materiales, especialmente considerando que ayuda a respaldar una buena causa. También cabe recalcar que sólo se fabricarán 750 unidades, la mitad de la edición anterior en cerámica negra.
Dicho esto, personalmente el reloj tiene un pequeño detalle que no me gusta, provocado por el tamaño de la caja. Aunque los relojes de aviador Mark XVIII en acero o titanio tienen un diámetro de 40 mm, los fabricados en cerámica (colección Top Gun o el Laureus que hoy nos ocupa) crecen hasta los 41 mm. ¿Porqué es un punto débil?. Simplemente porque estéticamente, la esfera no muestra su mejor versión al tener la ventana de fecha demasiado alejada del perímetro, rompiendo el círculo conformado por los números arábigos, un efecto realzado por el hecho de que el disco de fecha es blanco (en el resto de modelo se disimula por tener el mismo color de la esfera). Hubiera sido preferible prescindir de la fecha.
La esfera azul del IW328101 está diseñada para parecerse a un instrumento de cabina de gran legibilidad. Tiene números arábigos blancos de gran tamaño que contrsatan a la perfección sobre el fondo. Las manecillas negras de las horas y los minutos tienen la mayor parte de su superficie ocupadas por grandes inserciones de Super-LumiNova, mientras que la manecilla de los segundos blanca tiene una punta roja y un contrapeso negro. Se entrega con una correa de caucho azul a juego con una incrustación textil y costuras del mismo color.
Un dibujo grabado en su trasera
Fundada por Daimler y la empresa matriz de IWC, Richemont, la Laureus Sport for Good Foundation lleva el deporte a los jóvenes desfavorecidos de todo el mundo, y actualmente lleva a cabo más de 250 programas en más de 50 países.
Cada año, IWC organiza un concurso de dibujo abierto a los niños que participan en los programas Laureus. Las presentaciones son luego preseleccionadas por IWC, y el ganador se decide mediante votación pública en el sitio web de Laureus. La ganadora del año pasado fue Melissa Mejía Castilla, una colombiana de 12 años.
Titulado Vivir en Armonía, su dibujo representa a 10 personas vestidas de diferentes colores con sus brazos alrededor de los hombros de los demás alrededor de una cálida fogata. Este dibujo se reproduce en el fondo de la caja, como es tradición en la edición Laureus.