Audemars Piguet Royal Oak Offshore Tourbillon Chronograph 25º aniversario
Para celebrar el 25 aniversario del nacimiento del Royal Oak Offshore, Audemars Piguet lanza dos versiones del su modelo Tourbillon Chronograph caracterizadas por su espectacular diseño vanguardista que logra conservar el ADN de este icónico reloj.
Tal como os comentaba en este reciente artículo sobre la celebración del 25º aniversario del Royal Oak Offshore, la reedición del modelo original de 1993 no será la única pieza conmemorativa que Audemars Piguet lanzará dentro de dos semanas en el SIHH 2018, sino que estará acompañada de otras dos referencias cuya agresiva estética vanguardista resulta diametralmente opuesta al diseño clásico de este icono de finales del siglo pasado: los Audemars Piguet Royal Oak Offshore Tourbillon Chronograph.
Además de rendir un perfecto homenaje con el relanzamiento del primer Royal Oak Offshore, el 25 aniversario es también la ocasión perfecta para que la marca demuestre su savoir-faire en términos de innovación mecánica y audacia en el diseño. No es precisamente un reloj clásico ni elegante, sino un reloj de aspecto contundente y con una compleja arquitectura, que reutiliza todos los elementos distintivos de la colección Offshore ofreciéndolos bajo una novedosa concepción futurista.
Aunque están basados en modelos anteriores del Royal Oak Tourbillon Chronograph (26388PO y 26288OR), los dos nuevos relojes presentan un movimiento y un diseño completamente nuevos que los hacen diferentes a cualquier Offshore anterior. La caja es su parte más reconocible gracias a su forma de barril con las asas integradas y el bisel octogonal con ocho tornillos hexagonales. Con un diámetro de 45 mm, el Audemars Piguet Royal Oak Offshore Tourbillon Chronograph nos remite al estilo habitual, con su caja de acero u oro rosa cepillada y pulida, combinada con una gran pieza de protección de titanio en el lado derecho, sobre la que se alargan los pulsadores del cronógrafo. Además también ofrece la familiar correa de goma que se integra a la caja mediante dos enlaces metálicos. Por su parte la corona y pulsadores ya no están recubierta de goma, sino que están fabricados en cerámica negra.
Pero lo más sorprendente de su exterior es, sin duda, el diseño del elemento más característico de los Royal Oak: su bisel. Como ya hemos dicho, mantiene su geometría otogonal y los ocho tornillos hexagonales, aunque si hasta ahora estos últimos servían para unir el bisel, la caja y el fondo, ahora también son el medio de sustento de la esfera flotante. Como vemos en las imágenes, el bisel pierde su imponente aspecto masivo para quedar reducido a un anillo octogonal de cuyos ángulos emergen ocho pestañas triangulares interiores en las que se disponen los tornillos. Otro factor de diferencia es que se disponen debajo del cristal de zafiro, una vez más algo totalmente novedoso en los Royal Oak Offshore.
La esfera está en las antípodas del grabado «Tapissierie» con el que generalmente asociamos al Royal Oak, y en su lugar se presenta como un calado de intrincada contrucción tridimensional que dificilmente identificaríamos como parte de la familia si no fuera por la forma octogonal del bisel y las reconocibles líneas de la caja.
La distribución de los diferentes elementos no muestra ninguna sorpresa respecto a la de los anteriores ROO Tourbillon Chronograph: indicación de horas y minutos mediante dos manecillas centrales que recorren una escala perimetral sin índices, tourbillon a las 9 en punto, segundero central y totalizador de 30 minutos a las 3 en punto y dos barriletes que aportan volumen a la base esqueletizada del reloj. Todo este conjunto «flotante» se sustenta mediante ocho puentes trapezoidales, también calados y fabricados con el mismo metal de la caja, que se unen a la caja con sus respectivos tornillos hexagonales.
Esta configuración es reconocible en el movimiento que animaba los anteriores ROO Tourbillon Chronograph, el calibre 2912, del cual que deriva el nuevo calibre 2947. Este impresionante movimiento dispone de una reserva de marcha de siete días mientras late a una frecuencia de 21.600 alternancias por hora (3 Hz). Mientras los dos barriletes se disponen en la parte superior del movimiento y son visibles en la esfera, la trasera muestra la espectacular orquesta de palancas y engranajes de la función cronográfica, presidida por dos grandes puentes en su parte superior y la rueda de pilares en la inferior.
El calibre 2947 tiene un diámetro de 39,78 mm y un grosor de 11,60 mm, y está compuesto por 353 piezas.
Las dos versiones del Audemars Piguet Royal Oak Offshore Tourbillon Chronograph (acero 26421ST.OO.A002CA.01 y oro rosa 26421OR.OO.A002CA.01) son ediciones limitadas a únicamente 50 ejemplares. A falta de confirmación oficial, los precios se situarán en los 285.000 y 325.000 francos suizos respectivamente.