Bell & Ross evoluciona con cerámica su BR 03-92 Carbon

«Si algo funciona, no lo toques«. Cuantas veces habremos oído esta frase aplicada a multitud de ámbitos. No es que sea una mala filosofía, pero si la recogemos y aplicamos hasta sus últimas consecuencias, nuestro producto se quedará expuesto e indefenso ante la evolución del mercado: lo que es válido hoy puede no serlo mañana, debiendo contar también con que la competencia no se quedará de brazos cruzados. Así pues, la máxima ideal  sería «si algo funciona, mejóralo«. Este es el camino que ha seguido Bell & Ross con su BR 03-92, sin duda el diseño más exitoso y reconocido de la marca gracias a su icónica caja cuadrada: un reloj-instrumento en su estado más puro.

Esta mejora evolutiva se limita a pequeños cambios en el diseño de ciertos componentes en caja y esfera y a la implementación de la cerámica como material elegido para la fabricación de su caja de 42 mm. Todos ellos aportan su pequeño grano de arena para actualizar y modernizar el BR 03-92, manteniendo intacto su ADN.

Repasemos las modificaciones:

• Caja cerámica: manteniendo el color negro mate habitual, las propiedades físicas de este material le aportan un indudable atractivo. Yo he tenido varios relojes con este tipo de acabados, y el miedo a los arañazos motivó que al final me deshiciera de ellos: cualquier pequeño arañazo que en un reloj de acero pasaría casi desapercibida y reparada con un simple pulido, en un PVD o DLC resulta un drama. La resistencia física de la cerámica a roces y rasguños lo convierten en el material ideal cuando buscamos ese look negro… aunque su fragilidad ante posible caídas o golpes, su verdadero talón de Aquiles, puede intimidar a alguno de sus posibles compradores. Por suerte para ellos, este modelo no sustituye a las referencias con revestimiento en PVD, sino que convivirán dentro de la misma colección.

• Tornillos con ranura apuntando al eje central. Puede parecer un cambio muy simple, pero logra mejorar mucho la simetría del conjunto.
• Manecilla de minutos: pasa a ser tipo bastón, sustituyendo a la morfología romboidal a imagen y semejanza de la aguja horaria. Muestra un contrapeso con terminación lobular.
• Contrapeso de la segundera: abandona la forma de semiarco corto y pasa a ser una prolongación de una longitud de aproximadamente 1/3 del largo efectivo de la aguja.
• Numerales e índices más definidos, de menor grosor y de formas más redondeadas.
• Logo también de tipografía más pequeña.
• Desaparecen los cuatro pequeños tornillos en la esfera.
• El swiss made pasa a la parte exterior de la escala.

En la imagen siguiente podéis comparar los cambios implementados respecto a la referencia existente:

Personalmente, todas estas modificaciones estéticas ayudan a aumentar la nitidez y aspecto de este guardatiempos. Y si a ello le unimos el gran acierto de la caja cerámica, el nuevo BR 03-92 Carbon Black Matte se ofrece como uno de los guardatiempos más recomendables de la colección actual de Bell & Ross.