El Blancpain Air Command es un caso atípico, ya que su diseño se basa en un reloj de los años 50 del cual solo se produjeron 12 ejemplares y jamás se comercializó, ni siquiera a la Fuerza Aérea de los EE. UU. que era su destinataria inicial. Dicho de otro modo, el Air Command original nunca pasó de la fase de prototipo.
En el año 2019, Blancpain decidió reeditar este cronógrafo (artículo) con una versión de titanio y esfera negra, lo cual fue muy bien recibido por todos los apasionados de la relojería. Menos ilusionante fue el hecho de que se tratase de una edición limitada. Afortunadamente, en el 2021 presentó nuevas ediciones con esfera azul (artículo), esta vez de producción regular. Ahora llega el turno de una tercera serie con un nuevo color de esfera que en estos tiempos no va a sorprender a nadie; el verde.
Es evidente que el verde de su esfera y de su correa es lo que más llama la atención, pero hay otro factor que acentúa la personalidad de esta nueva versión. Me refiero a su bisel negro, que contrasta y combina a la perfección con el verde que predomina en el reloj. Afortunadamente, Blancpain no ha seguido la vía de los Air Command de producción regular, que recurren al azul para su esfera y también para su bisel. Esta monocromía resulta atractiva en azul, pero intuyo que en verde no se obtendría le mismo éxito estético. Al igual que el resto de relojes Air Command, la parte superior del bisel, la más expuesta a los arañazos, está realizada en cerámica y sus índices están tratados con Super-LumiNova.
En el interior de los nuevos Air Command Green encontramos el mismo Calibre F388B que ya conocemos de las versiones de producción regular. No obstante, aunque el código sea el mismo, este calibre difiere en su masa oscilante, que ahora adquiere la forma de hélice que ya conocíamos de la primera edición moderna del 2019.
Las especificaciones técnicas de este Calibre no experimentan ninguna variación. El volante, con su espiral realizada en silicio, oscila a una alta frecuencia de 5 Hz y genera una reserva de marcha de 50 horas. Este movimiento de cronógrafo ofrece la función flyback, lo que permite realizar con una sola pulsación la secuencia de parada, puesta a cero y puesta en marcha, que en cronógrafos convencionales requieren tres.
Blancpain nos ofrece el nuevo Air Command Green en dos versiones que se diferencian por el tamaño de su caja; 42,5 y 36,2 milímetros de diámetro. En ambos casos, el material elegido para producirla es el titanio, en el que se conjuntan el acabado satinado de sus partes principales con el pulido que se aplica al ángulo de las asas.
En mi opinión (siempre subjetiva) la estética del Air Command, tanto esta nueva edición como las anteriores, es perfecta. Cumple con todos los ingredientes para que así sea, tanto por su configuración bi-compax, como por la ausencia de fechador, una indicación práctica pero que casi siempre rompe el equilibrio de una esfera. También forma parte de su encanto el estilo del indice perimetral del cronógrafo y de la escala taquimétrica que lo rodea.
Siguiendo la pauta de la edición inaugural de la reedición de este icono, Blancpain lo emite en formato de edición limitada, a 200 unidades para el tamaño grande y 100 para el pequeño. Sus precios son de 23.850 y 22.450 EUR respectivamente.