El Blancpain Fifty Fathoms Tech Gombessa es una nueva adición al catálogo de relojes de buceo de esta histórica firma suiza. Los Fifty Fathoms de Blancpain se pueden equiparar a los Seamaster de Omega o a los Submariner de Rolex en muchos sentidos. Todos ellos fueron creados inicialmente como instrumentos profesionales de buceo, que con la creciente popularidad de este tipo de reloj se han convertido en un símbolo de estatus que prácticamente ninguno de sus propietarios utiliza para bucear.
A lo largo del tiempo, de vez en cuando, se han desarrollado versiones extremas de estos iconos de la relojería, con un carácter focalizado casi exclusivamente a ser utilizados en actividades subacuáticas. Este es el caso del Fifty Fathoms Tech Gombessa, pero con matices muy importantes. Si normalmente estos relojes extremos se centran en ofrecer incrementos exagerados de su hermeticidad, este Blancpain se focaliza en otros aspectos muy distintos. Vamos a verlo por pasos.
Una caja potente
La caja del Fifty Fathoms Tech Gombessa ya delata que ha sido desarrollada con parámetros puramente profesionales. Ello se percibe primeramente por la utilización de titanio grado 23 para elaborarla, el más puro que existe. Se trata de un material que pesa la mitad que el acero pero al que prácticamente iguala en cuanto a dureza. Por tanto, es una elección de material perfecta para un reloj de carácter profesional.
Sus dimensiones, de 47 mm de diámetro por 14.81 mm de grosor, también son coherentes con las exigencias de un reloj profesional de buceo. Uno de los parámetros críticos de este tipo de reloj es que debe ofrecer una gran legibilidad, incluso debajo del agua. Por lógica, ello pasa por una esfera de gran tamaño, lo que condiciona directamente el diámetro de la caja que la protege.
En la parte izquierda de la carrura encontramos la válvula de Helio, un elemento indispensable en inmersiones a grandes profundidades. Cuando los profesionales realizan estas prácticas de buceo, durante la fase de ascenso deben efectuar la fase de descompresión en cámaras dedicadas a ello, que contienen mezclas de aire con un elevado porcentaje de helio. Las moléculas de este gas son tan ínfimas que penetran por las juntas del reloj, pero es posible que durante la descompresión el helio no se escape con la suficiente velocidad, generando una presión que puede provocar que se suelte el cristal. La válvula, ya se manual o automática, deja escapar el Helio cuando hay un exceso de presión en el interior del reloj.
Aparte de estas características, comunes a la mayoría de relojes de buceo de carácter profesional, el bisel de cerámica del Fifty Fathoms Tech Gombessa sorprende por una característica que formará parte del ADN de este reloj y que no aporta ningún otro. La observación inicial de este bisel genera extrañeza a cualquier persona que no practique el buceo de forma profesional; ¿Que sentido tiene una escala de 3 unidades? Pues tiene todo el sentido del mundo en buceo moderno ya que se basa en la duración aproximada de 3 horas de los sistemas modernos de botellas de aire. Por ello encontramos en el bisel intervalos fuertemente señalados de 30, 1, 1:30, 2, 2:30 y 3 horas, que indicaran permanentemente el tiempo que se ha consumido de aire.
Una última característica totalmente atípica de la caja del Fifty Fathoms Tech Gombessa es que carece de las típicas asas necesarias para fijar la correa. En lugar de ello, podemos ver como la correa de caucho negra que equipa se une directamente a la carrura mediante unas fijaciones ubicadas en el fondo de la caja.
Muy coherentemente, Blancpain se limita a ofrecer una hermeticidad de 30 bares (aproximadamente 300 metros) en el Tech Gombessa, una resistencia a la presión más que suficiente para casi cualquier actividad de buceo que pueda realizar el ser humano ya que el record mundial está en 332 metros.
Una esfera de máxima legibilidad
Llegamos a la esfera del Fifty Fathoms Tech Gombessa, un elemento en el que predomina ante todo la extrema claridad de sus indicaciones. Para ello, Blancpain recurre al máximo contraste que genera su fondo negro mate con el tono anaranjado de los índices horarios y de las agujas que los recorren.
Estos índices, de fuerte relieve, están tratados con una sustancia luminiscente que en condiciones de oscuridad emite un tono azul. En la esfera apreciamos las tres agujas centrales habituales, de horas, minutos y segundos. Pero las convenciones se acaban con una cuarta aguja, también central, que es la que nos indica el periodo de tres horas, dividido en tramos de 5 minutos, de la escala del bisel. Se distingue de la aguja segundera por la forma de su punta. La imagen superior nos muestra que el buceador ha consumido aproximadamente 1 hora y 10 minutos de las 3 horas de aire que le ofrece su sistema de botellas.
Un mecanismo avanzado y fiable
La aguja que acabamos de describir realiza un giro completo a la inusual frecuencia de 3 horas. Lógicamente ello debe calificarse como una complicación mecánica adicional, que en consecuencia requiere de un nuevo mecanismo. Este es el Calibre 13P8, un movimiento de carga automática cuyo volante oscila a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora.
El sistema de doble barrilete que equipa permite una generosa reserva de marcha de 120 horas. Este calibre consta de 204 componentes, su diámetro es de 30,6 mm y su grosor de 5.65. A igual que la mayoría de relojes de las marcas de alto nivel del Swatch Group, este movimiento equipa una espiral de silicio. El fondo de cristal de zafiro del Tech Gombessa nos permite apreciar el reverso de este movimiento y nos muestra la rara combinación que ofrece de carácter industrial y acabados de Alta Relojería.
Conclusiones
El nombre de Gombessa viene de la sociedad del mismo nombre, co-fundada por Blancpain, cuyo objetivo es investigar y preservar la vida de los mares y los océanos. Por tanto, se gtrata de un proyecto que no puede ser más afín con el Fifty Fathoms, el «primer reloj de buceo moderno». En este año 2023 se celebra el 70 aniversario del lanzamiento del primer Fifty Fathoms en 1953 y Blancpain ha decidido celebrar este aniversario por fases.
La primera se desveló el Fifty Fathoms 70th Anniversary Act 1 (artículo). Ahora ha llegado el turno del segundo Acto de este aniversario con el Tech Gombessa que acabamos de ver, un reloj de carácter extremadamente profesional que además cumple con los genes de innovación propios de este legendario reloj de buceo.
¿Es el Fifty Fathoms Tech Gombessa un reloj para todo el mundo? Mi respuesta es un claro no. No digo que deba estar reservado para buzos profesionales pero sí para personas firmemente ligadas con las actividades acuáticas. En la imagen, tomada en Madrid el pasado día 13 durante el acto exclusivo de presentación de este reloj, se puede ver este Tech Gombessa ceñido a mi muñeca, que es más bien delgada. Inesperadamente, una vez puesto no trasmite la sensación del tamaño que realmente tiene. De todos modos, utilizarlo en el día a día sería como recurrir a un tanque para circular por la ciudad. Por contra si ya posees algún reloj de alto nivel para un uso diario y te apasiona el ambiente marino, esta es una opción a considerar muy seriamente como segundo o tercer reloj.
Sorprendentemente, Blancpain no ha decidido emitir el Fifty Fathoms Tech Gombessa en formato de edición limitada, con lo que pasa a formar parte del catálogo de producción regular de la marca suiza. Su precio es de 28.950 EUR.