Blancpain nos desvela uno de los nuevos modelos que serán presentados en la feria de Baselworld. Ya el año pasado, la colección Villeret concentró la mayoría de sus nuevas referencias, a las que se sumó el Bathiscaphe Chronographe Flyback (en este artículo podéis leer un breve resumen sobre ellas), y por lo que se intuye, este año seguiremos el mismo camino. De momento, la firma nos adelanta el Villeret Grand Date, una novedad que nos ofrece, por primera vez dentro de esta colección, la complicación de gran fecha.
Ciertamente, resulta sorprendente que entre su extensa colección de complicaciones (tourbillon, carrusel, calendario perpetuo, sonería, etc.) no se contara esta relativamente común complicación. Para ello recurre a la clásica elegancia de la caja doble pomme de 40 mm en oro rojo. La minimalista esfera opalina muestra, dentro del anillo perimetral levemente hundido, once numerales romanos aplicados que son recorridos por las delicadas manecillas esqueletadas de geometría lanceolada y la fina segundera central con el logo de la marca como contrapeso. A las seis horas encontramos la doble ventana de fecha. Lamentablemente y tal como podéis ver en la imagen adjunta, ambas cifras no están situadas en el mismo plano, o sea, al mismo nivel. A muchos os podría parecer un hecho sin demasiada importancia, pero personalmente es un detalle que tengo muy en cuenta. Pocas marcas se esfuerzan en desarrollar este diseño que supone una muestra de pericia técnica ante la habitual práctica de superposición que facilita el diseño de un movimiento con esta complicación; Glashutte es una de esas firmas.
En su interior late el calibre 6950, un movimiento automático Frederic Piguet que Blancpain sólo utilizaba hasta ahora en los Léman Grand Date Aqualung, dotado de varios elementos a tener muy en cuenta, como por ejemplo su espiral de silicio, o los dos barriletes que le confieren una más que correcta reserva de marcha de 72 horas. Gracias al cristal de zafiro que cierra la trasera, podemos admirar la decoración en panal de la masa oscilante fabricada en oro rosa. Finalmente, comentaros que este guardatiempos se entrega con una correa de aligator marrón chocolate.
Elegancia, nitidez, comodidad, legibilidad, equilibrio… Estas son las armas del Blancpain Villeret Grand Date, unas virtudes que esperamos poder refrendar durante nuestra visita a la siempre esperada feria de Baselworld dentro de dos meses.
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