Con el Reine de Naples 8925, Breguet sigue su tradición de crear un reloj dedicado al día de los enamorados. No es un hábito exclusivo de esta legendaria firma, ya que son muchas las marcas relojeras suizas que siguen esta costumbre. Eso sí, a Breguet no le gana nadie anticipándose al día señalado, ya que no se celebrará hasta el 14 de febrero.
No es la primera vez que Breguet elige la base del Reine de Naples para realizar su reloj de San Valentin. Sin ir más lejos, este año 2022 ha sido el turno del Reine de Naples 8905 (artículo). La elección es lógica ya que siguiendo patrones clásicos, pocos relojes existen o han existido más decididamente femeninos que el Reine de Naples. Claro que al entrar en este terreno, también sería lógico plantearse si es un género determinado el que debe realizar un obsequio en esta fecha señalada. No obstante, esta es una cuestión que se aparta de la finalidad de este artículo. Dejemos pues que cada persona haga lo que considere oportuno.
Aparte de su inconfundible diseño, el Reine de Naples debe su aura legendaria a su histórica ascendencia como reloj de una Reina. Se trata de una pieza relojera que formaba parte de un conjunto de relojes que encargo Caroline Murat, Reina de Nápoles, al legendario maestro relojero Abraham-Louis Breguet. La gran particularidad es que entre ellos se encontraba un demanda muy particular; un reloj para ser ceñido a la muñeca, un concepto que se apartaba totalmente de los relojes «pendentif», que utilizaban las mujeres sujetos a un collar. Breguet entregó este reloj a la Reina de Nápoles en 1812, convirtiéndose así en el primer reloj de pulsera de la historia.
La caja del Reine de este Naples 8925 está realizada en oro blanco de 18 quilates. Sus dimensiones son de 33 mm x 24,95 mm por una altura de 8,5 mm, un grosor muy fino para tratarse de un reloj equipado con movimiento mecánico de carga automática.
Tanto el bisel como el asa inferior, en forma de bola, están decorados con un engaste de 73 diamantes talla brillante. La corona está culminada con un cabujón de rubí, una gema que le otorga el color rojo que es el gran protagonista de este Reine de Naples.
Aparte del cabujón, es en la esfera donde encontramos los detalles propios que caracterizan este Reine de este Naples 8925. Su fondo está realizado con nácar blanco, un material que asociamos normalmente a los relojes femeninos. Sobre él, encontramos los 12 números árabes de tamaño variable que escenifican los índices horarios. Junto con su tamaño, estas dos características ya las encontramos en la referencia 8928 de este reloj, que es la base que toma Breguet para desarrollar la pieza destinada al día de San Valentin.
Normalmente, el color rojo se asocia con el día de los enamorados y es el que utiliza Breguet para crear las peculiaridades que diferencian al 8925. Lo más evidente son las agujas de horas y minutos, decoradas con este color. También son de color rojo los 12 minúsculos corazones que se implementan para señalar las horas. Finalmente, la característica más exquisita del Reine de Naples 8925 es el engaste de rubís que decora el realce interno de la esfera, cuyo color es el rojo propio de esta piedra preciosa.
El fondo de la caja equipa un cristal de zafiro que nos permite admirar el reverso de mecanismo que equipa. Se trata del calibre 586/1, un movimiento mecánico cuyo volante oscila a una frecuencia de 21.600 alternancias por hora (3 Hz) y proporciona una reserva de marcha de 38 horas. Esta energía se obtiene mediante una masa oscilante, lo que concede a este calibre su condición de movimiento automático. Dicha masa oscilante está realizada en platino, lo cual no se debe a una excentricidad sino al gran peso específico de este metal noble. Ello genera una gran inercia, lo que beneficia su eficacia al generar la energía que da vida al reloj.
Al igual que la mayoría de mecanismos modernos de Breguet, se recurre al silicio para realizar su espiral, lo que, aparte de sus cualidades anticorrosivas, protege a este elemento de los campos magnéticos que nos rodean a diario.
Breguet equipa al Reine de Naples 8925 con una correa de piel de aligator, evidentemente de color rojo. Su cierre se efectúa mediante una hebilla de oro blanco decorada con un engaste de 28 diamantes talla brillante. Como era previsible, este exquisito reloj femenino se emitirá en formato de edición limitada, a tan solo 28 piezas. Breguet no ha comunicado el precio del 8925, pero no debería diferir mucho de los 41.100 EUR de la referencia 8905.