La innovadora sociedad Swiss Space Systems – S3, no podía elegir mejor socio relojero que Bretiling y así lo ha hecho. De hecho el acuerdo va más lejos ya que Breitling se convierte en el sponsor principal de las actividades espaciales de carácter lúdico que realizará S3.
Swiss Space Systems es una empresa suiza que tiene por objeto el ofrecer vuelos espaciales «asequibles» a un público relativamente amplio. Ya se han puesto a la venta los primeros pasajes para su actividad más «light» que consiste en experimentar la gravedad cero. Estos vuelos ZeroG se realizarán en un Airbus preparado especialmente para ello y partirán de diversos puntos del globo.
La realidad es que esta experiencia 3G proporciona un efecto de gravedad cero pero tiene poco de espacial ya que el Airbus solo asciende a poco más de 10.000 metros. El efecto gravitatorio se consigue por el cambio brusco que se produce entre un ascenso muy vertical y el descenso. Como vemos en el gráfico, la sensación de gravedad cero apenas dura 25 segundos, aunque se repite en diversas ocasiones esta maniobra.
Todo esto tiene poco que ver con la relojería, si no fuera porque la «tarjeta de embarque» es un Breitling que la firma de Greuchen ha bautizado como S3. Se trata de un modelo inédito, que se basa en una caja con diseño y diámetro (43 mm) idéntica a la del Avenger II, pero que en este caso aloja un mecanismo de cuarzo, el calibre 73 SuperQuartz, que ofrece funciones de cronógrafo rattrapante. Otra diferencia es que la caja está realizada en titanio de color negro (supongo que un tratamiento DLC) y que en la esfera, diseñada para esta ocasión, se aprecia el logotipo S3.
La elección del cuarzo para un reloj «espacial» tiene su lógica, ya que un sistema mecánico de carga automática en condiciones de gravedad cero pierde su eficacia, aunque en este caso, por la poca duración de dicho efecto, este tema carece de importancia. Lo que sorprende un poco es que utilizando la misma caja del Avenger II, su hermeticidad anunciada sea de tan solo 10 bares, más que suficientes para la actividad a la que está destinado, pero lejos de los 30 bares del Avenger.
Este reloj no se podrá adquirir en ningún comercio relojero y solo se entregará a los pasajeros de estos vuelos, y aquí, por la información disponible, es donde se genera la confusión, que puede ser debida a cuestiones de traducción, pero también de descoordinación entre Breitling y Swiss Space Systems.
En la nota de prensa en español de Breitling dice textualmente: «los felices beneficiarios de la experiencia ZeroG podrán conservar, junto con su traje de vuelo, como parte del equipamiento que les acompañó durante ese momento único e inolvidable». Esto estaría muy bien, salvo porque el pasaje más asequible tiene un coste de 1.990 €, un precio bastante inferior a lo que costaría el reloj si se vendiese por un canal tradicional.
Si leemos el comunicado en inglés, cita textualmente «Along with their flight suit, the lucky partakers in the ZeroG experience will be entitled to keep this authentic high-performance and functional instrument for professionals». La traducción correcta del término «will be entitled to keep» sería «Tendrá derecho a mantener». El matiz es importante, ya que en el primer caso es fácil entender que el reloj se obsequia, mientras que en el segundo parece indicar que se tendrá el derecho a adquirirlo.
Para acabar de complicar el asunto, si visitamos la página web de ZeroG, veremos que en la descripción de lo que se ofrece en el pasaje más económico, que denominan Party Zone, no se menciona el reloj. Sí que se hace en los pasajes Premium Zone y VIP Room, que tienen un coste de 5.000 y 50.000 euros respectivamente. Esto parece más coherente, aunque en el caso del pasaje Premium, me sigue pareciendo un precio bajo si realmente se regala el traje de vuelo y el reloj.
En fin, sería aconsejable que Breilting y Swiss Space Systems especificaran de forma más exacta lo que se ofrece con los pasajes. Si no lo hacen, teniendo en cuenta que se pueden adquirir a través de internet, les puede generar más de un conflicto con los clientes que interpreten que con cualquier pasaje obtienen el reloj. Y si es así, yo me apunto !
