Cartier en Watches and Wonders 2021<br>Todo un Must
Entre las numerosas novedades de Cartier en Watches and Wonders 2021, se esconde uno de los relojes que más dará que hablar de todo el evento.
Como ya viene siendo costumbre en los grandes eventos anuales, las novedades de Cartier en Watches and Wonders 2021 son muy numerosas. Son nuevos relojes que abarcan diversas de sus colecciones, por supuesto también el emblemático Tank y van dirigidos tanto al público femenino como al masculino. No obstante Cartier nos presenta un reloj que nadie esperaba, cuyo solo nombre ya produce asombro; Tank Must SolarBeat.
Vamos a iniciar el recorrido por todas las colecciones en las que Cartier ha presentado novedades: Tank, Pasha, Privé, Libre y Relojes Preciosos. Como veréis, hay para todos los gustos y necesidades.
Tank de Cartier
Ningún año puede faltar una gran novedad en el territorio Tank de Cartier, uno de los mayores hitos de la relojería, y este año tampoco ha fallado. Todo lo que sobre el Tank nos presenta Cartier en Watches and Wonders 2021 cabe en el mismo epígrafe «Must», pero asimismo es muy diverso.
La colección Must se lanzó en 1977 y todos la recordamos principalmente por un detalle; el rojo intenso de sus esferas. Ahora, Cartier actualiza los Tank Must, pero bajo códigos muy diversos.
El más convencional consiste en un restiling de su arquitectura. El rasgo más notorio de ello son las famosas angarillas, que pierden su superficie plana superior para pasar a adoptar una forma redondeada. También se ha rediseñado su brazalete, que además ahora cuenta con el sistema de cambio rápido.
Cartier nos ofrece una referencia con caja de acero de tamaño extragrande y movimiento mecánico de carga automática, el calibre 1847 MC. A ella se suman otras dos referencias, también con caja de acero, de tamaño grande y pequeño, que recurren a un moderno movimiento de cuarzo que ofrece 8 años de autonomía.
Fiel al espíritu de los años 80, otra variante de este Tank Must 2021 recurre como signo distintivo al color de su esfera y nos la ofrece en tres tonalidades que son parte del ADN de Cartier: rojo, azul y verde. Se trata de una propuesta muy coherente con la imagen que todos tenemos de los Must históricos, pero se hecha en falta el rojo intenso que asociamos con dicha época. Por otra parte, estos Tank Must coloridos sí que conservan el minimalismo de los Must originales, prescindiendo totalmente de cualquier índice en su esfera.
Cartier ofrece estas tres variantes equipadas con brazaletes de piel de aligator de la misma tonalidad que la esfera. Todos ellos equipan movimiento de cuarzo de alta precisión.
Y llegamos al gran protagonista de la firma parisina en este 2021; el Tank Must SolarBeat, el reloj más inesperado y sorprendente de Cartier en Watches and Wonders 2021 y uno de los que más dará que hablar de todo lo presentado en este gran evento virtual.
Su nombre deja poco a la imaginación, se grata de un Tank Must que recurre a la energía solar para suministrase de energía. Con una imaginación y elegancia que pocos pueden igualar, Cartier logra camuflar todo un sistema fotovoltaico para recargar el movimiento de cuarzo que equipa este reloj.
Puede que esta sea la primera vez en la que una manufactura relojera de alto nivel recurre a una avanzada tecnología de captación y gestión de energía y la implementa en un icono de la relojería sin perjudicar su esencia. Además, enfatizando el la gestión natural de recursos, Cartier dota a estos Tank Must SolarBeat con correas de origen no animal.
Cartier ofrece inicialmente cuatro referencias de este Tank Must SolarBeat, siempre con caja de acero. Se reparten en dos tamaños, el grande y el pequeño en idioma Cartier, de los que de momento no se nos indica las dimensiones exactas en milímetros. El grande se ofrece con correa negra o azul y el pequeña con correa negra o verde. No entraré en más detalles sobre el Tank Must SolarBeat porque en breve le dedicaremos el exhaustivo análisis que se merece.
La última novedad que nos ofrece Cartier en esta colección afecta al Tank Louis Cartier de 1922, la primera evolución del Tank de 1917. En esta reinterpretación de 1922 del diseño inicial del Tank, la caja se alarga, las angarillas se estilizan y sus ángulos se redondean: En resumen, esto es lo que ha hecho el Must que acabamos de ver con respecto a su antecesor. Por ello, dado que estos nuevos Louis Cartier siguen este patrón estético, en cierto modo se unifican con los nuevos Must.
El factor diferencial lo encontramos en la esfera y en sus combinaciones de color. Cartier nos permite elegir dos versiones del nuevo Tank Louis Cartier. La primera opta por el oro rosa para elaborar su caja y lo combina con un fondo de esfera plateado y un índice horario azul. La segunda versión recurre al oro amarillo para la caja y al dorado para el fondo de la esfera, donde contrasta el rojo del índice horario.
Estos dos Tank Louis Cartier están equipados con el calibre 1917 MC. Se grata de un movimiento de carga manual que oscila a una frecuencia de 21.600 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 38 horas.
Pasha de Cartier
La Pasha de Cartier es una colección que data de 1985 y que ha sido relanzada recientemente en el 2020, hito que analizamos a fondo en un extenso artículo. En este relanzamiento de la colección Pasha se ofrecieron únicamente versiones «solo hora» y en dos tamaños, de 41 y 35 milímetros, dedicados respectivamente al público masculino y femenino.
Ahora, en este Watches and Wonders 2021, Cartier presenta la versión cronógrafo del Pasha, la primera complicación de esta renovada colección. El tamaño de su caja es de 41 milímetros de diámetro por 11,97 de grosor. Se ofrece en dos versiones para el metal de su caja; oro amarillo o acero.
Un rasgo original y distintivo de este Pasha Chronograph, a modo de guiño al diseño original de este cronógrafo, los dos pulsadores del cronógrafo cuentan con cabujones engastados. También se incorpora en este reloj el sistema de cambio rápido QuickSwitch, que permite intercambiar con toda facilidad y sin herramientas el brazalete y la correa de piel. En su interior equipa el eficiente y conocido calibre 1904-CH MC, un movimiento automático que ya han utilizado anteriormente varios cronógrafos del catálogo de Cartier.
Aunque no de tanta trascendencia como el Chronograph, Cartier también ha presentado otra nueva referencia en la colección Pasha. Se trata de un modelo femenino de tamaño reducido, de 30 milímetros de diámetro. Técnicamente no aporta el grado de novedad del cronógrafo, pero puede ser el Pasha perfecto para mujeres que privilegian los relojes de tamaño pequeño y la clásica feminidad a la que se suelen ir asociados.
Del Pasha femenino de 30 milímetros se ofrecerán cuatro variantes. Una con caja de acero que se entrega con brazalete de acero y con una correa de piel. Una segunda versión con caja de oro rosa y dos pulsera de piel de distintos colores. La tercera opción también recurre al oro rosa y ofrece dos correas de piel, pero añade un engaste de diamantes en su bisel. Finalmente, la cuarta opción es igual a la anterior pero se entrega con brazalete de oro rosa y correa de piel. Todos estos Pasha de 30 milímetros equipan movimiento de cuarzo.
Cartier Privé Cloche
Una definición de la colección Privé de Cartier podría ser que su finalidad es reeditar diseños históricos y atípicos que se ha convertido en icónicos. Así, por este proceso han pasado los Crash, Tank Cintrée, Tonneau y Tank Asymétrique. Ahora ha llegado el turno del Cloche (campana), uno de los diseños más sorprendentes de Cartier, lo cual es mucho decir.
Si realizamos un esfuerzo imaginativo y suprimimos mentalmente la correa cuando observamos por primera vez este Privé Cloche, identificaremos claramente un reloj clásico de mesa. Y de hecho, esto es lo que es, un clásico diseño de reloj de mesa, recudido a un tamaño coherente para poder ser lucido sujeto a la muñeca.
Junto con el Crash y el Asymétrique, que también han experimentado el honor de haber formado parte de la colección Privé, este Cloche completa el triunvirato de los diseños provocadores, casi extravagantes… pero con clase. Y ahí reside el gran mérito, en la capacidad de aunar originalidad extrema y elegancia, un campo en el que pocos compiten con Cartier.
Para encontrar el primer Cloche de Cartier tenemos que remontarnos nada menos que a 1922. Como ha ocurrido con todo sus relojes icónicos, durante estos casi 100 años de historia del Cloche, Cartier ha lanzado diversas actualizaciones y reediciones, al última en el 2007 y en esta misma colección Privé. El Cloche clásico equipa el calibre 1917 MC, un movimiento que oscila a 21.600 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 38 horas.
Aparte de la versión «convencional», Cartier también nos ofrece una versión esqueleto del Cloche. Esta versión, además de por su esfera, obviamente difiere de la versión clásica por el movimiento que equipa, el calibre 9626 MC.
La versión clásica del Privé Cloche se emite en tres versiones de caja: oro amarillo, oro rosa y platino, todas ellas limitadas en su producción a 100 piezas numeradas. De la versión esqueleto también se emiten tres variantes; oro rosa y platino, limitadas a 50 unidades y una que adorna su caja con un engaste de diamantes talla brillante, cuya producción se limitará a 20 unidades.
Cartier Libre
Llegamos a otra colección, la Libre, que tiene muchos puntos en común con la Privé. Al igual que ella, acoge relojes que se diferencian por su diseño creativo e inusual. La mayor diferencia es que los relojes de la colección Privé reproducen diseño históricos y los de la colección Libre, como bien dice su nombre, no parten con ninguna cortapisa.
Marie-Laure Cérède, directora de creación relojera de Cartier afirma que «los relojes Cartier solamente se parecen a ellos mismos» una verdad que llevan al extremo los relojes de la colección Libre. La prueba evidente es la primera de las dos piezas Libre que nos presenta Cartier en Watches and Wonders 2021; el Bagnoire Tortuga. Para ello, Cartier parte de la geometría de la caja típica del Bagnoire y aplica su fortaleza de diseño en la esfera y en el bisel, reproduciendo con impresionante creatividad el caparazón de una tortuga en una visión cenital.
Para reproducir el caparazón emplea unos campos geométricos, pentagonales y hexagonales, dibujados con lineas negras y antracita, que se rellenan totalmente con un profuso engaste de 171 diamantes talla brillante que se complementan con 18 zafiros y 24 tsavoritas.
La caja del Bagnoire Tortuga está elaborada con oro blanco y equipa un movimiento de cuarzo. Su producción está limitada a 30 unidades.
El segundo Libre que nos presenta Cartier sigue un camino parecido al tortuga. Parte del diseño del Tortue y reproduce en su bisel y esfera la piel de una serpiente. Para ello emplea esmalte negro, coral y nácar, que se complementan con un engaste de 130 diamantes talla brillante.
Como en el caso anterior, su caja está realizad en oro blanco, pero a diferencia de él, emplea un movimiento de carga manual, el calibre 430 MC. También se trata de una edición limitada con la misma producción: 30 unidades.
Precious Watches
Como ya es costumbre cada año, Cartier se resiste a no completar sus novedades con las piezas que denomina «Precious Watches» que no son más ni menos que la máxima expresión de la relojería unida a la alta joyería.
Este año son cinco los relojes preciosos que nos presenta Cartier: Reptilis, Rosary y tres Panthère Songeuse. Los dos primeros recuerdan bastante la estética Art Déco, especialmente el Reptilis con sus formas anguladas que se oponen a las suaves curvas del Rosary. Ambos relojes joya comparten un engaste total de diamantes y una base de los elementos externos, caja y brazalete, realizada en oro blanco. El Reptilis suma en sus engastes un total de 232 diamantes talla brillante y 70 diamantes talla princesa. El engaste del Rosary lo forman 1.191 diamantes talla brillante.
Cartier no anuncia que estas piezas se emitan en formato de edición limitada, pero a buen seguro, dada la extraordinaria naturaleza de los materiales empleados y del exhaustivo trabajo que requiere su elaboración a manos de expertos, su producción ya será de por sí muy reducida.
Los tres Panthère Songeuse comparten el mismo diseño de caja y el oro blanco con el que está elaborada. El motivo decorativo es la emblemática pantera, el gran símbolo de Cartier. Aquí nuevamente destaca el profuso engaste de diamantes que adorna y cubre la totalidad de las cajas y las esferas.
Una de las variantes se distingue por añadir un brazalete también totalmente engastado con diamantes y la tercera por alternar los brillantes con piezas de esmalte. Los tres Panthère Songeuse utilizan piedras preciosas y semipreciosas para recrear los ojos, el hocico y las manchas de la pantera que se eleva por encima de la caja.