Afianzando su relación con el mundo del motor, Chopard anunció en el Salón de Ginebra su nueva asociación con Porsche Motorsport. Y no, no fue durante la celebración del SIHH, sino en el marco del Salón del Automóvil que se celebró hace tres meses en la ciudad suiza. La noticia tuvo mayor impacto al estar unida a la esperada vuelta del fabricante alemán al Campeonato de Resistencia LMP1. Con motivo de su regreso a la competición, el nuevo Porsche 919 Hybrid participará en el Campeonato del mundo de resistencia LMP1, así como en las 24 Horas de Le Mans, una carrera mítica que el constructor ya ha ganado 16 veces y que se ha celebrado este mismo fin de semana.
Para conmemorar esta colaboración, Chopard lanza el nuevo Superfast Chrono Porsche 919 Edition, una edición limitada a unas lógicas 919 unidades cuya arquitectura y estética toma como base al Superfast Chrono, representante de la colección deportiva por excelencia de la marca. La caja de acero sigue manteniendo los imponentes 45 mm de diámetro y 15,18 mm de espesor, junto a dos elementos muy característicos de los Superfast: el bisel con escala taquimétrica y los ocho tornillos con acabado PVD negro que ensamblan este conjunto que encuentra en los 100 metros su límite de estanqueidad. Del mismo modo, se entrega con la ya conocida correa de caucho lisa inspirada en los neumáticos slick de competición.
Su hecho diferencial lo encontramos en la esfera y en la trasera. En esta última encontramos grabadas las inscripciones «Timing Partner Oficial Porsche Motorsport» y su número correspondiente dentro de la edición limitada, la primera en el zafiro y la segunda en el anillo perimetral que encierra dicho cristal. Pero es en la esfera de configuración tri-compax donde mejor se muestran las referencias a Porsche y las particularidades estéticas de este modelo. De color plateado opalino, presenta un entramado de líneas que, según la marca, evocan el difusor trasero del coche de carreras, un diseño alejado del típico rayado vertical de los Superfast. Pero la alusión más evidente a Porsche es el «919» que aparece en rojo en el interior del contador de 30 minutos ubicado a las 9 horas, luciendo la misma tipografía que en los coches de competición.
En su interior no encontramos ninguna sorpresa: de nuevo es el calibre 03.05-M el encargado de dar vida a este guardatiempos, un movimiento cronógrafo flyback automático que vibra a 28.800 alternancia por hora, manufacturado íntegramente en los talleres de Fleurier Ebauches y lanzado a finales del 2012 junto a los calibres 01.01-M y 01.02-M. Siguiendo con la política de calidad y fiabilidad que Chopard implementa en sus creaciones, el Superfast Chrono Porsche 919 posee el Certificado de Cronómetro emitido por el COSC.
