En su edición del presente 2013, la legendaria carrera de clásicos «Mille Miglia» cumple su vigésimo quinto aniversario de la relación iniciada con Chopard en el año 1988. Para encontrar el origen de la «Mille Miglia» tenemos que remontarnos al año 1927, cuando cuatro entusiastas del deporte del motor deciden organizar una competición automovilística accesible a cualquier buen piloto. El único requisito innegociable para tomar parte en esta carrera es el participar con un vehículo fabricado por cualquiera de las marcas de renombre y que no haya sufrido ningún tipo de modificación respecto de su configuración original de fábrica.
De este modo y a partir de entonces, modelos legendarios de automóviles como un BPW 328 MM de 1938, un Riley Brooklands de 1928, un Alfa Romeo 6C 1750 GS de 1930, un Gullwing Mercedes 300 SL de 1955 o un Porsche 550 RS de 1955 pueden verse en la línea de salida de la que desde entonces se conoce como «Mille Miglia» y que realiza el recorrido Brescia-Roma-Brescia con una longitud total de 1.000 millas (1.600 km) y de la que toma su nombre.
Ferrari 750 Monza y Austin Healey 100S, ambos de 1955.
Lo que se ha convertido en un espectacular rally de coches clásicos atrae, año tras año, a miles de espectadores que la califican como «la carrera más bella del mundo». Estas mil millas de «circuito» atraviesan en tres etapas los paisajes más pintorescos de la península itálica: de Brescia a Ferrara, de Ferrara a Roma y vuelta al punto de salida recorriendo más de una treintena de localidades italianas como Verona, Siena, Módena y Florencia. Este recorrido se mantiene fiel al original trazado en el año 1927.
Karl Scheufele y Albert Carreras en el Mercedes 300 SL W 198, 1955
Desde el año 1988, Karl Scheufele y Kart-Frederich Scheufele, presidente y co-presidente respectivamente de Chopard, decidieron patrocinar esta legendaria carrera. Desde entonces compiten personalmente en ella con la participación de otros personajes ilustres como, en el caso de este 2013, José Carreras y su hijo Albert Carreras y el mismo Jacky Icks.
Modelo Mille Miglia de Chopard – Año 2013.
Como la mayoría de vosotros ya sabéis, esta colaboración dio origen a una línea de guardatiempos incluida en la Colección Classic Racing de la manufactura, conocida con el mismo nombre de la carrera y que cada año aumenta su número con un nuevo modelo. Del correspondiente a este año, un cronógrafo automático con indicación GMT y certificado por el COSC, os anticipábamos unas breves pinceladas en este artículo dedicado a las novedades generales de Chopard durante la pasada edición de Baselworld. En un futuro próximo os facilitaremos la información al completo en el correspondiente artículo de test.
