Solo leer el nombre F.P. Journe x Francis Ford Coppola ya desconcierta. ¿Qué tiene que ver el siempre discreto François-Paul Journe, poco amante de cámaras y eventos, con Francis Ford Coppola que, le guste o no, es todo un símbolo del espectáculo hollywoodiense. La respuesta la encontramos en lo que cuenta el propio Journe:
“Este reloj nació en 2012 mientras cenaba en la casa de Francis Ford Coppola en el Valle de Napa. Me preguntó si era posible indicar la hora con una mano en la esfera de un reloj. Le respondí que la idea era interesante y merecía pensar en ella. Pero, ¿cómo mostrar 12 horas con 5 dedos?»
Por tanto, estamos ante algo que nace de una provocación de Coppola hacia el gran genio de la relojería. A partir de aquí, el «Invenit«, el pensar como combinar los dedos para indicar 12 números, lo realizó Coppola. El «Fecit«, el convertir la idea en realidad por medios mecánicos ha corrido a cargo de Journe.
La imagen superior nos muestra lo que ideó Coppola. De 1 al 5 es obvio y evidente. Del 6 al 9 ya deja de ser obvio pero sigue un patrón definido. El 10, 11 y 12 ya parecen más forzados. De todos modos, dudo que el futuro poseedor de este reloj lo utilice para leer el tiempo.
La segunda parte, la de cómo trasladar estas indicaciones «digitales» a un ingenio mecánico, ya ha sido tarea de F.P. Journe. Lo primero que se debía decidir es la estética del autómata y para ello Journe ha recurrido a una mano mecánica ortopédica ideada en el siglo VXI por Ambroise Paré (1509-1590), al que se considera como padre de la cirugía moderna.
Veréis que he utilizado el término Autómata porque sin duda la mano que se implementa en la esfera del F.P. Journe x Francis Ford Coppola, lo es. Aparte del reloj en sí mismo, esta es la gran sorpresa conceptual de este reloj ya que estamos más habituados a encontrar autómatas en relojes del gran especialista histórico que es Jaquet Droz, o en las creaciones más contemporáneas de Christophe Claret, que en una firma muy sobria desde el punto de vista estético como es F.P. Journe.
Es una lástima que F.P: Journe no haya editado un video para mostrar como funciona el autómata, por lo que habrá que imaginárselo. Por lógica, supongo que se trata de un mecanismo retráctil, que por sí mismo intuyo no será tan complejo como todos los mecanismos y rodajes que coordinan los movimientos de cada dedo en función de la hora. Evidentemente estos mecanismos no tienen nada que ver con el clásico tren de engranajes de un reloj mecánico.
Dado que el autómata de la mano impide la implementación de agujas centrales, los minutos se indican mediante un método poco habitual en F.P. Journe. Se trata de un disco perimetral giratorio que nos indica los minutos mediante un marcador fijo ubicado a la altura de lo que en un reloj convencional son las 12 horas.
Un factor que sí sigue la norma de F.P. Journe con todos los relojes que ha donado a las distintas ediciones del Only Watch es que su caja está realizada con tantalio, un metal de transición que raramente veremos en un reloj. Su color es de un peculiar tono azul grisáceo y físicamente se distingue por su alta dureza y su resistencia a la corrosión.
Si le damos la vuelta al F.P. Journe x Francis Ford Coppola, el cristal de zafiro del fondo de la caja nos permite observar el calibre FFC 1300.3, un movimiento totalmente nuevo, tal y como requiere la implementación de la mano autómata. En el anillo perimetral de dicho fondo podemos leer el término «Prototype», lo que nos permite intuir que esta edición Only Watch no será la única versión de este tan especial reloj y que FFC (de Francis Ford Coppola) será el término que probablemente se utilizará para denominar a hipotéticas futuras variantes de este sistema de indicar la hora.
Este F.P. Journe x Francis Ford Coppola se asimila al Patek Philippe Complicated Desk Clock (artículo) ya que ambos son raros relojes totalmente inéditos donados al Only Watch. Son relojes que nunca se han visto antes, pero también son relojes de los que no me cabe duda que veremos nuevas versiones en un futuro. El precio que estima Christie’s que alcanzará esta obra de arte mecánica en la subasta Only Watch se mueve en un margen de 300.000-400.000 CHF.
