Aunque pueda parecer una broma no lo es. El título de este artículo es plenamente descriptivo ya que el Giuliano Mazzuoli Cemento es un reloj cuya caja está realizada en Cemento!. Cuando creíamos haberlo visto todo en cuanto a los materiales utilizados para la caja de un reloj, Giuliano Mazzuoli nos deja estupefactos recurriendo al Cemento. Claro que tampoco debería extrañarnos tanto, ya que el año pasado nos presentó el mismo reloj con caja realizada en Marmol de Carrara.
Al ser la primera vez que hablamos de la marca Giuliano Mazzuoli en Watch Test, sería conveniente realizar una breve introducción a sus orígenes y a su filosofía de producto. Su creador. Giuliano Mazzuoli es un florentino que ni es ni pretende ser relojero y que en consecuencia se limita a realizar lo que sabe hacer, y muy bien, que es diseñar y crear.
La historia de sus creaciones tampoco se inicia con la relojería sino con objetos que poco tiene que ver con ella. Su primer diseño famoso fue la tipografía de una agenda que realizó en el año 2000, lo cual le valió el encargo del Museo Moma de New York para realizar unas agendas personalizadas. Ello tiene poco de casual ya que el negocio familiar era la impresión, pero a partir de ahí, Giuliano extendió sus miras a otros campos, creando la Mokina, una linea de objetos de escritura inspirados en las formas de una cafetera.
En el año 2004, Giuliano decide adentrarse en el mundo de la relojería presentando el ya célebre Manometro, para cuyo diseño se inspira en el instrumento que le da nombre. Al Manometro le sucede el Contagiri, el más original de los relojes creados por Giuliano ya que además de su concepto estético aporta una originalidad mecánica rompedora ya que prescinde de la típica corona recurriendo a un bisel móvil para el ajuste de sus indicaciones. Además presenta una poco usual indicación retrógrada de las horas y minutos que recorre una escala que cubre prácticamente la circunferencia de la esfera.
Y así, después de otros diseños originales pero que no aportan novedades mecánicas, llegamos a este Giuliano Mazzuoli Cemento», que si bien no se diferencia estéticamente de otros diseños de Mazzuoli, se atreve con un material que podríamos considerar la antítesis del glamour. En su comunicado, la firma no nos detalla el método de fabricación de su caja con este material tan típico en el entorno urbano y tan impensable en un reloj, por lo que debemos dejarlo como una incógnita a resolver.
El dial se basa en la nitidez y en consecuencia en la legibilidad, ya que en él solo encontramos la escala perimetral de las horas, que se indican con unos índices metálicos de geometría tridimensional, que contrasta espectacularmente con la cerámica negra mate que preside el fondo de la esfera.
En consonancia con el carácter eminentemente minimalista y funcional de este «Cemento», Mazzuoli no se complica la vida con el mecanismo que alberga, recurriendo a un movimiento ETA, concretamente el calibre 2824/2, que si bien se ubica a mucha distancia de lo que podríamos calificar como Alta Relojería, aporta una simplicidad y fiabilidad fuera de toda duda.
En definitiva, este Giuliano Mazzuoli Cemento es sin duda un reloj contundente, calificativo que le otorgan, tanto el cemento utilizado en su caja como sus generosos 45 milímetros de diámetro y 13,5 de grosor. Aunque sin duda también podemos calificarlo de original, una cualidad que no creo que nadie le discuta.