Un año más, y sin lugar a dudas, Glashütte Original se erige como una de las grandes triunfadoras de la presente edición de Baselworld en su edición de este 2013. Son muchos los factores que me conducen a esta afirmación sin temor alguno a equivocarme: desde la exquisitez de su diseño y la calidad mecánica de todos y cada uno de los nuevos guardatiempos, hasta la excelente relación calidad – precio que la manufactura esgrime de manera incesante año tras año.
Cuando, hace unas pocas semanas se presentaban como Pre-Basel los nuevos Senator Panorama Date así como la nueva colección Pavonina orientada exclusivamente al público femenino, resultaba obvio que la manufactura afincada en Glashütte reservaba a los verdaderos protagonistas, sin desmerecer en absoluto a los anteriormente comentados, para ser debidamente presentados durante la celebración del evento. Y ciertamente, no es únicamente que la marca sajona no haya defraudado sino que ha cubierto con creces las expectativas que, personalmente y un año más, tenía depositadas en una de mis marcas fetiche.
A la vista de los modelos presentados, si el año 2012 fue el año de la Colección Pano, este 2013, de manera indiscutible, pertenece a la exquisita Colección Senator que se enriquece aún más si cabe con piezas ciertamente interesantes. En este artículo me limitaré a presentarlas de manera enunciativa para, posteriormente, analizarlas en profundidad en artículos dedicados a cada una de ellas.
Senator Tourbillon.
No cabe ninguna duda de que el tourbillon representa una de las complicaciones más bellas y de difícil ejecución que existen en la relojería mecánica, más aún si ésta se implementa de manera sobria y nítida y sin ánimo de ostentación. Este es el caso del tourbillon volante que se incorpora a la Colección Senator en una caja de 42 mm de diámetro manufacturada en oro blanco, con un bisel ligeramente más delgado que el implementado en los modelos precedentes del Senator. El dial en color gris antracita con acabado granulado y lacado muestra, adicionalmente a las horas y minutos centrales y a la apertura del tourbillon a las 6, la tradicional fecha panorámica de Glashütte a las 12.
Senator Chronometer Regulator.
Muchos de vosotros, por lo que a mí respecta se trata de una de mis piezas favoritas, recordaréis el Senator Chronometer que la manufactura germana presentó en el año 2011. Este 2013, Glashütte presenta el mismo concepto de guardatiempos pero en una configuración de reloj regulador. Si esta disposición de las indicaciones me ha parecido siempre realmente atractiva, en este caso me resulta sencillamente fascinante. Albergado en una caja de 42 mm de diámetro, al igual que el Senator Tourbillon, este modelo regulador se presenta en dos versiones en función del material de base utilizado en la fabricación de la caja: oro blanco y oro rojo. El resto de elementos, incluido el dial, son idénticos para las dos versiones. Personalmente, y a pesar de la belleza del tourbillon, tendría serias dudas si entre ambos relojes tuviera que decidir. Probablemente me decantaría por este regulador.
Senator Panorama Date.
Inicialmente, como presentación de los dos modelos que responden a este apartado, el Senator Panorama Date y el Senator Panorama Date Moon Phase, poco que añadir a lo que Enric os comentó como Pre-Basel en este artículo. Ambos modelos se presentan en una exquisita caja de 40 mm de diámetro y, al contrario de lo que sucede con el Tourbillon y el Regulador, los nuevos Senator Panorama Date añaden a la versión en caja de oro rojo, la correspondiente a la versión en caja de acero. Sin lugar a dudas, la ya habitual apuesta de Glashütte por las cajas de acero en piezas de alta relojería, es uno de sus puntos fuertes y admirables por lo inusual de esta decisión en otras manufacturas. En un futuro próximo los analizaremos de manera detallada.
Sixties.
Esta característica colección, que veía por primera vez la luz en el año 2007, incorpora en este 2013 dos novedades basadas únicamente en la modificación del color del dial. Así, tanto el Sixties, con su caja de acero de 39 mm, como el Sixties Panorama Date en acero de 42 mm, adoptan una esfera en color azul galvanizado y acabado con decoración sunburst. El resto de características tanto dimensionales como técnicas de estos modelos permanecen inalteradas respecto de las versiones anteriormente existentes.
PanoLunar Tourbillon.
Probablemente muchos de vosotros podáis pensar que este modelo debería estar encabezando este artículo como una de las novedades mayores de Glashütte para este 2013. Y razón no os faltaría. Pero todo tiene su explicación y, en este caso, no es otra que la primera noticia sobre este nuevo guardatiempos la tuve al consultar el kit de prensa que la manufactura nos entregó en Basel. Así pues, y dado que no tuve la oportunidad de tenerlo en la mano, he decidido comentarlo en último lugar, aunque sobran las dudas al respecto de la calidad y excelencia que este reloj compartirá con el resto de la colección.
Alojado en una caja de 40 mm de diámetro manufacturada en oro rojo, el nuevo integrante de la Colección Pano que completa la renovación iniciada el pasado año, añade una complicación de tourbillon volante al calibre sin perder ni un ápice de su implícita elegancia y sobriedad. Realmente, se trata de todo un ejemplo a juzgar por las imágenes de como implementar un mecanismo de la belleza de un tourbillon sin que este desvíe por completo la atención del resto de los componentes de la esfera. Máxima discreción.
Colección Pavonina.
Enric os comentaba en este artículo de manera detallada las particularidades de esta la primera colección de Glashütte pensada única y exclusivamente para el público femenino. Lo cierto es que dado lo extenso del artículo que os comentaba, no tendría sentido incidir de nuevo en las características de esta nueva colección puesto que resultaría redundante. A modo de resumen y desde mi punto de vista personal, excelente la iniciativa de dedicar una serie de guardatiempos al público femenino y la versatilidad e infinidad de combinaciones existentes, incluida la variedad de correas disponibles y la facilidad de su cambio dado el dispositivo con el que se ha equipado la caja. Quizás el único punto débil de esta colección, visto desde la perspectiva de la Alta Relojería, sean sus movimientos de cuarzo.
