Como ya es tradición anual, Glashütte Original celebra el día de los enamorados con una edición limitada. Para este 2022, la firma de Dresde nos presenta una versión del Lady Serenade con esfera nacarada y cristales de zafiro, cuya tonalidad rosada evocan la aparición de las primeras flores de azafrán después de los meses de invierno.
La caja es idéntica a la de la colección estándar. Fabricada en acero de acabado pulido, tiene un diámetro de 36 mm y un grosor de 10,20 mm. Coronada con un cabujón de diamante, cabe destacar su corona romboidal, una geometría que facilita su manipulación a la hora de sincronizar la hora. El bisel engastado con 52 diamantes se combina con una esfera nacarada con ocho índices en forma de corazón en cristal de zafiro rosa dispuestos en las posiciones no cardinales, la principal novedad que implementa esta referencia.
Por su parte, las 3, 9 y 12 horas están ocupadas por numerales romanos aplicados, mientras que la discreta ventana trapezoidal de la fecha se ubica a las 6 horas. Al igual estos numerales, las manecillas de latón para las horas, los minutos y el segundero central están rodiadas.
Las colecciones femeninas, los PanoMatic Luna y Lady Serenade, están equipadas con movimientos automáticos manufactura, y el reloj que hoy nos ocupa no podía ser un excepción (los Pavonina en cuarzo presentados en 2013 ya no aparecen en catálogo).. En su interior se aloja el calibre 39-22, con una reserva de marcha de 40 horas y latiendo a una frecuencia de 28.800 alternancias por hora (4 Hz). A través del fondo de zafiro podemos admirar la típica platina alemana ¾, esta vez decorada con franjas de Glashütte, tornillería azulada y con los bordes biselados. Por su parte, el rotor esqueletado luce la habitual doble G de los movimientos automáticos de la firma.
Limitado a 50 unidades, el Glashütte Lady Serenade San Valentín 2022 se acompaña de una correa de aligátor de color azafránSu precio con correa y hebilla es de 13.800 €, mientras que sube hasta los 14.200 € si optamos por un cierre desplegable.
