Los Big Bang All Black Zermatt que nos acaba de desvelar Hublot demuestran que, aunque estemos de pleno en el periodo de festividades navideñas, el desenfreno de la firma suiza en presentación de novedades no cesa. Este es el segundo homenaje que realiza Hublot en poco tiempo dedicado a lugares relacionados con la nieve. Sobre el primero, el Classic Fusion Aerofusion Aspen Snowmass, hablamos hace apenas cuatro días en este artículo.
Ahora Hublot abandona las cumbres estadounidenses de Aspen y se adentra en las suizas de Zermatt, una población alpina que es tan famosa por la práctica del esquí como por ser punto de partida de las difíciles ascensiones al famoso Matterhorn, también llamado Cervino en italiano.
Este no es el primer homenaje que realiza Hublot a Zermatt. En diciembre del 2018 ya nos presentó los Big Bang Zermatt (artículo), una serie de tres relojes que rendían homenaje a esta célebre población de montaña. Estos Big Bang se presentaron en dos medidas, de 44 y 41 milímetros de diámetro. Aunque con solo dos referencias, ahora Hublot repite la jugada ofreciendo estos dos mismos diámetros en los Big Bang All Black Zermatt.
La gran diferencia entre ambas series es que la que hoy nos ocupa abandona el acero y el oro y se decanta por la cerámica negra para elaborar las cajas de estos nuevos Zermatt. El resto de rasgos estilísticos también ese repiten, decorando el bisel de la versión de 41 mm con un engaste de piedras preciosas, en este caso 36 diamantes negros.
El rasgo decorativo directamente relacionado con Zermatt y su famoso Matterhorn también sigue la misma pauta que los Bon Bang del 2018. Se trata de la silueta de su temible cara norte que se reproduce mediante un aplique grabado en el interior de los pequeños segunderos de ambos cronógrafos.
Acorde con su denominación «All Black», el fondo dela esfera, los índices y las agujas son de color negro o de un gris muy cercano a él. Siguiendo la pauta de su bisel, las versión de 41 milímetros recurre a diamantes negros para sus índices horarios con las excepción del 6 y del 12, este último realizado mediante números árabes aplicados.
El fondo de la esfera nos descubre un cristal de zafiro, el cual nos permite observar el mecanismo, aunque de forma relativa ya que en él encontramos impresa de nuevo la cara norte del Matterhorn. En el anillo de cerámica negra que rodea el cristal de zafiro observamos impresa la condición de edición limitada de estos relojes, así como su número individual.
Ambas versiones del Big Bang All Black Zermatt son relojes que ofrecen la función de cronógrafo y equipan movimientos de carga automática: el calibre HUB4100 para la versión de 44 mm y el HUB4300 para la de 41 mm.
De la versión del Big Bang All Black Zermatt de 44 mm se emitirán únicamente 100 ejemplares y su precio es de 17.500 EUR. La variante de 41 mm con el bisel engastado aun es más limitada, a 50 unidades y su precio es de 22.500 EUR.
