El Big Bang Integral Tourbillon Full Sapphire que vamos a destripar os resultará familiar. Hace apenas tres meses publicamos un artículo donde estudiamos todos los detalles del espectacular Big Bang Tourbillon Automatic Orange Sapphire que nos presentó Hublot en la LVMH Watch Week. En muchos aspectos son relojes similares, pero también aportan notables diferencias y no me refiero solo al brazalete. Vamos a verlas.
La gran primicia que aporta este Big Bang Integral Tourbillon Full Sapphire es su brazalete realizado en cristal de zafiro. Sin que sirva de precedente, esta no es una novedad absoluta en el sector relojero ya que Chanel nos presentó un reloj con brazalete íntegramente realizado con cristal de zafiro; el J12 X-RAY (artículo).
Es digno de remarcar que a pesar de las diferencias enter ambas firmas, se detecta una la gran similitud en sus estratégias de producto. Primero fue la cerámica, ámbito en el que tanto Hublot como Chanel son líderes ya que este material se puede considerar como estándar en sus colecciones. Y ahora, parece que la batalla se entablará en la utilización del cristal de zafiro para elaborar los elementos externos de los relojes.
Big Bang Integral Tourbillon Full Sapphire – la caja
Lo primero que hay que reseñar en el apartado de la caja es que el reloj que hoy tratamos es un Big Bang Integral, lo cual implica por sí mismo importantes diferencia con el Big Bang Tourbillon Automatic Orange Sapphire que antes hemos comentado.
El término Integral es el que explica las diferencias, pero no solo se refiere a que un Big Bang con este apellido integre un brazalete en lugar de una corra. También implica notables diferencias en el diseño y en el tamaño de la caja.
Obviamente, la geometría de la caja es la misma que la de todos los Hublot Big Bang, pero fácilmente apreciaremos una notoria diferencia si observamos la parte de la caja que se une a la correa. El pulsador que permite el cambio rápido de correa desaparece en todos los Integral. La explicación es muy simple y se basa en la voluntad de integrar totalmente caja y brazalete, ya sea de titanio, de cerámica o como en este caso de cristal de zafiro, como si fuera un solo cuerpo. Esto lo lleva tan al extremo Hublot, que los Integral no permiten intercambiar su brazalete con una correa.
Además de la ausencia del pulsador, estas partes extremas de la caja también ha sido ligeramente rediseñadas con respecto al Big Bang «convencional» para lograr una perfecta intregración visual y física del brazalete.
La segunda gran y trascendental diferencia es que la caja de este Full Sapphire mide 43 milímetros de diámetro, uno más que los otros Integral y tres menos que los 45 mm del Big Bang Tourbillon. Dos milímetros pueden parecer poca cosa, pero en el caso de una caja de reloj implican una diferencia de tamaño determinante. La transcendencia de esta diferencia de diámetros se traduce en que los Big Bang Integral consiguen una enorme ganancia en versatilidad de uso.
Un ejemplo claro soy yo mismo. Por mucho que me atraiga, no ceñiría un Big Bang de 45 mm a mi muñeca porque excede en todos los sentidos lo aconsejable para mi morfología. Por contra, el Big Bang Integral de 43 milímetro lo veo perfectamente utilizable. En cuanto a grosores, no puedo decir lo mismo ya que los 15,25 mm de este Big Bang Integral son prácticamente idénticos a los 15,3 mm del Big Bang Tourbillon Automatic Orange Sapphire.
Big Bang Integral Tourbillon Full Sapphire – el brazalete
Como parte integral de su estructura, continuamos con el elemento estrella de este Big Bang, que es su brazalete totalmente realizado con cristal de zafiro.
Uno d elos dos grandes atractivos de utilizar el cristal de zafiro para los elementos externos de un reloj es su práctica inmunidad a los arañazos, incluso 1 nivel por encima de la cerámica. Así, en la escala de Mohs, en orden descendente, encontramos el diamante con el máximo valor de 10, le sigue el cristal de zafiro con 9 y después la cerámica con 8. Ello implica que el único material que podría dejar una marca en el cristal de zafiro es el diamante.
El segundo gran efecto que proporciona el cristal de zafiro es su transparencia, lo que genera un efecto visual único. Es incluso paradójico que la gran sensación de fragilidad que nos transmiten subjetivamente los materiales transparentes, esté generado en este caso por un material extremadamente duro.
Pero, nada está exento de alguna contrapartida, que en el caso del cristal de zafiro la genera precisamente una de sus grandes cualidades, que es la dureza. Ello implica que todo el proceso productivo de un elemento realizado con este material se complique extraordinariamente. Desde el mecanizado inicial sobre un bloque de cristal de zafiro hasta los distintos procesos de acabado se deben realizar con instrumentos diseñados específicamente y basados en el diamante. Además requieren muchas más horas de trabajo que la misma operación realizada en materiales más convencionales. como pueden ser el acero, el titanio o cualquier tipo de metal precioso.
El único elemento del brazalete que, de momento, requiere la utilización de otro material es el cierre desplegable, para el que Hublot recurre al titanio.