Bueno, de hecho el misterio es porqué ha tardado tantos meses Jaeger-LeCoultre en proporcionar información oficial sobre este nuevo AMVOX7. En el SIHH del año pasado, hace nada menos que 10 meses, Jaeger presentaba sus novedades anuales, entre las que se encontraba este AMVOX7. Lo pudimos tener en la manos y debatir sobre él con los responsables de la marca. Más tarde, al abrir el pendrive que contenía los datos técnicos e imágenes de las novedades, ante nuestra sorpresa no se hacía la más mínima referencia sobre este reloj.
Es habitual que a partir de los salones anuales del SIHH o de BASELWORLD las novedades presentadas por las marcas tarden un cierto tiempo en aparecer en el mercado, normalmente de unos 4-5 meses. Lo que no es habitual es que tarden 10 meses en proporcionar datos sobre un modelo presentado. Partimos de la supuesta base de que este anuncio oficial coincide con su disponibilidad en los distribuidores oficiales, pero de momento no deja de ser una mera suposición.
La imagen superior corresponde al AMVOX7 que pudimos observar en el SIHH 2012. Nunca está de más compararlo con el modelo de producción final ya que ha veces se producen pequeños cambios, especialmente en la esfera. No es el caso de este AMVOX ya que solo se observa una pequeña diferencia que consiste en la inclusión del logotipo de Aston Martin en el perímetro de la esfera, entre las 2 y 3 horas. No soy nada partidario de las inscripciones en la esfera, pero en este caso se puede considerar justificable, al fin y al cabo el AM inicial del nombre de esta colección de Jaeger-LeCoultre se refiere precisamente a la firma automovilística Aston Martin. No entraré a fondo en la historia de los AMVOX ya que requeriría por si sola un extenso artículo, pero sí mencionaré brevemente los precedentes, necesarios para valorar este AMVOX7.
El primer miembro de esta colección, el AMVOX1 se crea en el año 2004 y se trata de un reloj de 42 milímetros con la complicación de Alarma, de ahí el término VOX. Más tarde se lanza una versión con caja de 44 mm que se denomina AMVOX1 R. En el año 2005 se crea el AMVOX2, el primer reloj de esta colección con la complicación de cronógrafo, también con caja de 44 milímetros. A este cronógrafo le suceden múltiples variantes: AMVOX2 Chronograph DBS, AMVOX DBS Transponder, AMVOX Transponder Rapide y AMVOX5 World Chronograph. Algunas de ellas añaden nuevas complicaciones y otras se limitan a variantes de material de caja o de diseño de esfera. Entre ellos se cuela el AMVOX3 Tourbillon GMT que carece de función de cronógrafo.
Todos los AMVOX poseen una estética particular que los diferencia de otras colecciones, pero el que realmente representa una revolución es el cronógrafo en cualquiera de sus versiones.
Se trata del primer reloj con mecanismo de cronógrafo de accionamiento vertical, lo que implica que carece de los habituales pulsadores ubicados en la carrura de la caja y en su lugar, para activar parar y poner a cero el cronógrafo, basta una presión sobre la esfera del reloj. A la altura de las 12 para activar/parar el cronógrafo y a las 6 para ponerlo a cero. Obviamente ello también implica añadir un complejo mecanismo a su calibre y a su caja, parte de la cual pivota junto con la esfera para accionar el cronógrafo. En la zona izquierda de la carrura de la caja encontramos una corredera de tres posiciones que permite bloquear totalmente la activación vertical del cronógrafo, bloquear parcialmente la puesta a cero o activar dicha función.
Otro de los rasgos característicos del AMVOX cronógrafo es la particular implementación de los contadores de horas y minutos del cronógrafo. En lugar de una aguja que recorre un índice circular, es el propio índice, en forma de rueda, que gira. Los minutos y horas acumulados en la medición se indican mediante unos marcadores fijos ubicados a las 3 y 9 horas. Al principio resulta un tanto extraño, pero en poco tiempo te habitúas, e incluso se puede afirmar que este sistema es más claro en su lectura que un contador convencional. Esto lo pude comprobar hace años cuando Jaeger-LeCoultre me cedió un AMVOX2 durante 15 días para su análisis.
La gran particularidad de este nuevo AMVOX7 es que añade a la función de cronógrafo la indicación de reserva de marcha. Como era de esperar, esta nueva indicación no se ha implementado de forma clásica mediante agujas e índices. En lugar de ellas, Jaeger-LeCoultre ha realizado en la esfera dos aperturas en forma de segmento emplazadas en la zona superior de la esfera, concretamente entre las 10 y 12 la primera y entre las 12 y 2 horas la segunda. En los índices horarios correspondientes a estos segmentos se indica el nivel de carga del muelle motor: F para carga máxima (a las 12), 1/2 para media carga (a las 11 y 1) y finalmente E para totalmente descargado (a las 10 y 2). Un segmento rojo, que se desplaza por debajo de las aperturas, nos indica en que estado se encuentra la reserva de marcha.
Pero el detalle que me resulta más atractivo de este AMVOX7 es la fuente utilizada para los dígitos de los contadores del cronógrafo. Los del primer AMVOX2 eran muy estilizados, pero poco legibles. En las sucesivas variantes se clarifican los dígitos y en este AMVOX7 se consigue una legibilidad óptima. Ello se debe a dos motivos. El primero es que el tipo de fuente utilizada es sumamente legible y lo más importante, que se divide cada minuto y cada hora mediante segmentos. Probablemente este AMVOX7 sea el cronógrafo de más rápida lectura de cuantos existen en la actualidad.
El resto de elementos no se diferencian demasiado de los AMVOX Cronógrafo anteriores. La caja, ligeramente rediseñada en su fondo y asas, sigue siendo de 44 milímetros de diámetro, en este caso realizada en titanio de grado 5. Un elemento en el que sí se aprecia a primera vista su nuevo diseño es la corona, con una estética muy técnica y robusta, acorde con la imagen y la tecnología de este AMVOX7. La hermeticidad es de 5 bares, una cifra poco espectacular pero muy respetable si tenemos en cuenta el gran tamaño de las partes móviles de este reloj.
El AMVOX7 se ofrecerá con la correa de piel (la de las imágenes) o con brazalete, del cual a falta de imágenes no puedo opinar. Las asas incorporan un sistema de cambio rápido, lo que permite a su propietario, por poco diestro que sea, cambiar de pulsera en un instante.
En mi opinión, tanto desde el punto de vista estético como funcional, este 7 es el mejor AMVOX que ha creado Jaeger-LeCoultre desde el inicio de la colección. Ahora solo falta conocer el PVP oficial para considerarlo un reloj recomendable o altamente recomendable.