Jaeger-LeCoultre Master Control Memovox Timer

Jaeger-LeCoultre nos sorprende presentando tres novedades entre las cuales destaca el Master Control Memovox Timer. La sorpresa viene porque el Watches & Wonders Geneve 2020 «virtual» se ha celebrado hace poco más de un mes. Creíamos que, como era habitual en el antiguo SIHH, en él veríamos las principales novedades del 2020. Esta claro que no es así, lo cual es una buena noticia, pues siempre hemos creído que no era la mejor política concentrar el 90% de las novedades del año en una sola fecha.

Este Master Control Memovox Timer viene acompañado de otro nuevo Master Control Memovox, que viene a sumarse a la totalmente renovada colección Master Control que Jaeger nos presentó con motivo del Watches & Wonders. Por tanto, comparte todos los genes estéticos con las otras variantes de esta colección que ya habíamos visto y que os comenté en detalle en este artículo sobre el Master Control Chronograph Calendar.

Tanto este Master Control Memovox como la nueva versión «Timer» comparten las mejoras en su mecanismo de alarma que veremos más adelante. Las diferencias entre ellos son la novedosa función temporizador del «Timer» y sus códigos estéticos de la esfera, con tonos azules y con el bajo-relieve plateado de la zona central que nos indica la programación de la alarma. Los números árabes que se alternan con los índices trapezoidales para indicarnos la hora y el fechador ubicado a las 3 son idénticos en ambos relojes.

La caja de ambas versiones del Memovox está realizada en acero y mide 40 milímetros de diámetro por 12,39 de grosor. También comparten su hermeticidad de 5 bares. Hasta aquí, nada nuevo, pero si le damos la vuelta al reloj veremos una de las grandes novedades que también comparten ambas versiones; su fondo transparente.

No se trata tan solo de una cuestión estética , que nos permite contemplar el mecanismo del reloj, sino de una importante modificación técnica que atañe directamente a la función de alarma. Hasta ahora, todos los Memovox contaban con un fondo de caja macizo, una decisión obligada ya que el timbre sobre el que repercutía el martillo de la alarma estaba fijado en dicho fondo. Ahora, al eliminar el fondo macizo, Jaeger-LeCoultre ha fijado el timbre sobre el lateral de la caja.

Por tanto, el calibre 956 ha sido seriamente modificado por Jaeger-LeCoultre para adaptarse a este importante cambio que encontramos en los dos Memovox. A partir de aquí empiezan las grandes diferencias entre ambos relojes, debidas técnicamente a la nueva función de temporizador que ofrece la versión «Timer». Paradójicamente, Jaeger denomina los calibres que equipan ambos relojes con el mismo código; 956AA.

Es hasta cierto punto habitual en bastantes marcas que compartan código calibres con pequeñas diferencias entre ellos. Lo que es insólito es que lo hagan dos calibres que ofrecen distintas funciones, como es en este caso el temporizador. Aquí, nuevamente nos encontramos con el mismo problema que ya hemos comentado con otras novedades que obligatoriamente se han presentado de forma virtual. El hecho de no haber tenido el reloj en la mano provoca que no tenga respuesta a alguna cuestión técnica o de funcionamiento, que el comunicado oficial de JLC tampoco nos desvela, pero vayamos por partes.

La famosa función de alarma de Jaeger-LeCoultre, se podría definir en su funcionamiento como una repetición de minutos pero con un sonido voluntariamente mucho más estridente. Su «modus operandi» es el mismo ya que, para generar el sonido, se basa en un martillo que percute sobre un timbre. Aparte de la cuestión tímbrica, lo demás tiene poco que ver. La alarma de un Memovox se programa a una hora determinada mediante la segunda corona de la que dispone el reloj. Al llegar a dicha hora es cuando el martillo percutirá sobre el timbre para cumplir su función. Ello lo vemos indicado mediante una punta de flecha que apunta a la hora programada en el perímetro del circulo central de la esfera.

Ahora, Jaeger añade una función adicional que es la de programar la alarma por el método del temporizador. Es decir, no le decimos al reloj a qué hora tiene que sonar la alarma sino cuanto tiempo debe pasar para que lo haga; dentro de una hora, de dos… etc.

Desconozco como se ajusta esta segunda función, aunque obviamente debe ser mediante alguna posición determinada de alguna de las dos coronas con las que están equipados todos los Memovox. El método de mostrar la programación del temporizador sí está claro y consiste en un pequeño indicador rojo que emula el logotipo de Jaeger y que apunta un índice de 12 horas ubicado en el interior del índice convencional de la alarma.

La función de alarma se puede programar por cualquiera de ambos métodos y además se sincronizarán automáticamente. Así, cuando ambos indicadores no coinciden en la hora al que debe sonar la alarma, el indicador rojo del temporizador se desplazará automáticamente hasta que ambas programaciones lo hagan. Esta, que es la explicación oficial de Jaeger-LeCoultre, me genera alguna duda, ya que entonces la programación por temporizador resultaría superflua ya que siempre estaría condicionada a la convencional.

La imagen superior es un claro ejemplo; las agujas horarias indican que son las 10:09, la punta de flecha nos dice que la alarma está programada a las 18:00 y el indicador rojo del temporizador indica que faltan algo menos de 8 horas para que suene la alarma, lo cual es equivalente. Lo que ha ocurrido para que coincidan y el orden de cada programación es la incógnita a despejar. Intentaremos aclararlo en un futuro.

El precio del Master Control Memovox es de 12.100 EUR. El Master Control Memovox Timer se emitirá en formato de edición limitada a 250 unidades y su precio es de 16.400 EUR.

Dejando de lado la exclusividad que le otorga, es una lástima la limitación en la producción de la versión con temporizador de este Memovox, aunque la solución es relativamente fácil. Bastaría con que Jaeger-LeCoultre emitiera en un futuro una nueva versión del Timer con la clásica esfera plateada de la renovada colección Master Control.