Jaeger-LeCoultre Reverso Tribute Minute Repeater
Jaeger-LeCoultre presenta el Reverso Tribute Minute Repeater, un reloj que combina la arquitectura de un icono de la relojería con la complicación que más aprecian los connaisseurs.
El Jaeger-LeCoultre Reverso Tribute Minute Repeater es la enésima adición a una colección con más de 90 años de historia como es la icónica Reverso. Pero esta no es una variante más, ya que comporta la complicación mecánica más valorada por coleccionistas y apasionados; la repetición de minutos.
En 1994 Jaeger-LeCoultre presentó el Reverso Répétition Minutes, su primer reloj de pulsera con la complicación de repetición de minutos. Dado que Jaeger eligió su icónico Reverso para este hito, se convirtió en el primer movimiento de repetición de minutos rectangular de la historia.
En este punto, es importante recordar que una de las reglas no escritas de la Alta Relojería es que un reloj «de forma» debe estar equipado por una calibre también «de forma». Pocas cosas se consideran más inapropiadas que un reloj cuadrado o rectangular en cuyo interior se aloja un calibre redondo. Ello implica que las firmas que respetan esta sagrada regla no pueden recurrir a sus movimientos de arquitectura redonda si quieren motorizar un reloj que no sigue esta forma básica.
Evidentemente este es el caso del legendario Reverso, y por supuesto una firma con la historia y el prestigio de Jaeger-LeCoultre sigue la regla a rajatabla. En la imagen podemos observar el calibre 944 que equipa este Reverso. Se trata de un movimiento de carga manual cuyo volante oscila a 21.600 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 35 horas. El origen de este mecanismo se remonta al año 2011 cuando vio la luz para equipar otras pieza maestra de esta colección; el Reverso Répétition Minutes à Rideau.
Aparte de su extrema complejidad mecánica, la imagen superior nos permite apreciar el calibre 944 ya encajado en la carrera del Reverso. Esta imagen demuestra que la geometría y las proporciones de ambos elementos siguen la misma pauta.
La imagen también nos permite apreciar los elementos visibles desde el anverso de dicho movimiento, muchos de los cuales están directamente ligados a la complicación sonora que incorpora. Normalmente, solo veremos esta cara de un calibre mediante un imagen como esta que nos lo muestra en la fase de montaje ya que estará oculto tras la esfera.
Este no es el caso del Reverso Tribute Minute Repeater ya que Jaeger-LeCoultre no se resigna a mantener oculta esta espectacular cara de su calibre 944 y por ello huye del concepto convencional de esfera. Aquí no existe ninguna superficie opaca sobre la que montar las indicaciones, pero obviamente Jaeger es consciente de que no se puede prescindir de ellas en una pieza relojera de este nivel.
Para solucionar este compromiso, tanto el índice perimetral de minutos como los correspondientes a las horas, se montan en una placa que se fija directamente a la cara interna del bisel, de forma que tan solo permanecen visibles estas indicaciones.
Se trata de una solución compleja pero perfecta desde todos los puntos de vista. Ello deja visible de forma permanente los puentes dorados que sustentan los elementos del calibre que se ubican en su anverso. También podremos admirar los mecanismos relacionados con la Repetición de Minutos, algo atípico ya que habitualmente se montan sobre el reverso del movimiento.
Jaeger no se contenta con la transparencia absoluta del anverso del movimiento y también aplica esta solución al reverso de este reloj, lo que nos permite observar la decoración perlada de la platina, así como el barrilete, el tren de rodaje y el volante que da vida a este Tribute. Las dos caras de este Reverso muestran simultáneamente las indicaciones de horas y minutos mediante agujas centrales.
El metal precioso elegido para elaborar la caja del Jaeger-LeCoultre Reverso Tribute Minute Repeater es el oro rosa. Las dimensiones son de 51,1 x 31 milímetros y su grosor de 11,41 mm. En este apartado nunca está de más recordar que las dimensiones de un reloj rectangular no deben equipararse numéricamente con las de un reloj redondo.
Esta imagen nos demuestra que no debemos alarmarnos por los 51,1 milímetros de la cara larga de la caja de este Reverso ya que, en su conjunto, el tamaño de este reloj no tiene nada de excesivo.
Como era de esperar en una pieza de este nivel, Jaeger-LeCoultre ha decidido emitirlo en formato de edición limitada, a tan solo 10 ejemplares. Su precio será de alrededor de 250.000 EUR.