Watch Test

Longines celebra el 185º aniversario enseñando su historia

Para celebrar su 185º aniversario, Longines lanza en su web el proyecto “On this day”, donde diariamente mostrará una pequeña historia de su pasado.

Saint-Imier, 1832. Este es el lugar y año de fundación de la sociedad Raiguel Jeune & Cie., el taller de relojería de Auguste Agassiz que en 1867, ya bajo la dirección de su sobrino Ernest Francillon, adoptará el nombre de Longines al trasladar y poner en marcha la industrialización de la empresa en los terrenos que llevaban ese nombre. De esta efeméride se cumple ahora su 185º aniversario, y para celebrarlo, la marca ha puesto en marcha en su web el proyecto “On this day”, en el que, desde el pasado 1 de enero y hasta el 31 de diciembre, se revelará diariamente una pequeña historia de Longines que sucedió en el pasado.

Longines 185 aniversario-6

Fábrica Longines

Cada año asistimos a multitud de aniversarios y efemérides sobre los temas más diversos que el aparato de marketing de las marcas puede llegar a “idear”, pero pocas veces he visto una forma tan deliciosa, original y romántica de celebrarlo. Al proyecto se puede acceder desde el link “On this day», o a través de la página principal de la web de Longines, clicando en el recuadro superior izquierdo de los 185 años.

Longines 185 aniversario-1

Su funcionamiento no puede ser más sencillo: se nos abre una parrilla deslizante en los que el calendario del 2017 se irá haciendo visible conforme avance el año, descubriéndonos pequeñas perlas históricas de Longines que tuvieron lugar ese mismo día. Cada casilla incluye un dibujo en azul y dorado, y un par de líneas introductorias. Cuando clicamos sobre ella, se nos abre el texto a pantalla completa, acompañado de fotografías y/o documentos adicionales, pudiendo retornar en cualquier comento al calendario o pasar directamente al día anterior o posterior.

No puedo sino recomendaros encarecidamente que visitéis el proyecto “On this day”, un excelente ejemplo de cómo aprovechar internet para dar a difundir una marca de forma sencilla, afable e históricamente muy instructiva. Felicidades!. Por nuestra parte, y como pequeño homenaje a una de mis marcas preferidas, os proponemos un viaje a los inicios de lo que actualmente es Longines: sus primeros 35 primeros años de vida. Retrocedamos 185 hasta 1832…

Los inicios: Raiguel, Agassiz, Francillon  / 1832-1867/  los años pre-Longines.

El atelier Raiguel Jeune, ubicado en Saint-Imier, es uno de los numerosos pequeños talleres abiertos en la zona durante los años 1770-80.  La fecha exacta de su fundación no se conoce, pero se sabe que fueron los hermanos Jean Pierre et Jean Henry Raiguel los que instalaron en Saint-Imier su pequeño negocio dedicados a fabricar relojes de oro. Años más tarde, Pierre Henri Raiguel, uno de los hijos de Jean Pierre, creó en noviembre de 1832 la sociedad Raiguel Jeune & Cie. junto algunos asociados con el objetivo de fabricar y comerciar relojes. Esta sociedad reunió tres personas de perfil muy distinto y complementario. El primero de ellos era precisamente Henri Raiguel, a cuyo conocimiento técnico se le unió la capacidad inversora de su cuñado Florian Morel. Por último, Auguste Agassiz, el tercer socio, será el encargado de llevar la parte comercial. Nacido en una familia de notables de la región, su madre estaba ligada

Longines 185 aniversario-7

Auguste Agassiz

con los Fornachon, unos banqueros de Neuchâtel especializados en la financiación de varias empresas relojeras a principios del siglo XIX. De formación comercial, Auguste trabajó en el banco Fornachon y habría comerciado con relojes Lépine comprados a relojeros neuchâtelois bastante antes de unirse al comptoir de Raiguel. Cuando se funda la sociedad 1832, Agassiz trae consigo el acceso a las redes de financiación y comercialización que la nueva empresa necesita.

Sin embargo, como es habitual en los comptoirs relojeros de principios del siglo XIX, esta sociedad rápidamente conocerá cambios profundos. En 1838, Raiguel se retira por razones desconocidas a la edad de 30 años. La sociedad sigue con los otros dos asociados bajo el nombre de Agassiz & Cie., y compran la casa que alberga el taller. Finalmente, ocho años después, en 1846, Morel se retira y deja solo a Auguste Agassiz a la cabeza de la empresa, convirtiéndose en una personalidad importante de Saint-Imier: llegó a ser su alcalde los años 1846 y 1847. Su empresa florece rápidamente gracias a las relaciones comerciales establecidas en 1845 con los representantes de la familia Mayor-Fornachon en los Estados Unidos.

Longines 185 aniversario-9

Relojes de bolsillo Lepine. A la izquierda, del comptoir Raiguel Jeune & Cie. A la derecha, del comptoir Agassiz

A pesar de su éxito, Agassiz debe dejar la empresa por motivos de salud, y se establece en Lausane hacia 1850, dejando la empresa en manos de dos de sus empleados, Frédéric Bétrix y Lucien Morel, pasando a manos de François Secrétan cuatro años más tarde. Sin embargo, a pesar de la presencia des esas personas a la cabeza del comptoir, Agassiz continúa ejerciendo un control a distancia, preparando su sucesión a manos de su sobrino Ernest Francillon, que se incorpora a la empresa en 1852, cuando sólo tenía 18 años.

Hijo de Olympe Agassiz y Marc Francillon, Ernest Francillon nace en Lausane en 1834 en el seno de una importante familia de negocios y terratenientes. Su padre ejercía funciones de comercial en la empresa familiar Francillon & Cie., mientras Ernest vivía en Stuttgart formándose como comerciante antes de ser llamado por su tío, completando su formación relojera mediante su aprendizaje en Môtiers, en el cantón de Neuchâtel (1853), antes de instalarse definitivamente en Saint-Imier en 1854.

Longines 185 aniversario-5

Ernest Francillon

A partir de ese momento, parece que Ernest Francillon comparte la dirección de la empresa con Secrétan hasta 1861, momento en que este último deja la empresa. En 1862, Francillon toma las riendas del negocio bajo una nueva razón social: “Ancienne Maison Auguste Agassiz, Ernest Francillon successeur”, asociado todavía con Agassize. Sin embargo, detrás de la aparente continuidad que representa esta sucesión gradual se escondía un momento clave en la historia de la empresa. Francillon se impone al frente del comptoir familiar con un objetivo bien definido: abandonar el sistema imperante de l’établissage para adoptar un sistema de fabricación industrial más rentable, una decisión radical en la que, sin duda, tuvieron un importante peso tres circunstancias:

  1. La voluntad de librarse de la excesiva dependencia de los fabricante de ebauches, que imponían precios abusivos a los fabricantes de relojes. Su número era realmente escaso: las fábricas Japy, Fointainemelon y Eguet suministraban a la gran mayoría de los comptoirs suizos, una posición casi de monopolio  que les permitía marcar esas políticas de precios elevados.
  2. La necesidad de buscar una verdadera marca y un logo, abandonando así el patronímico del fabricante, como símbolo de una concepción comercial extremadamente novedosa en la industria relojera suiza asociada a productos de consumo global fabricados en gran escala.
  3. La recesión de los años 1860, fruto del estancamiento de los negocios debido a la guerra de secesión americana y de la guerra austro-prusiana en Europa.

Longines 185 aniversario-8En marzo de 1862, Ernest Francillon compra el viejo molino de la localidad y los terrenos situados en el lugar llamado Les Longines, el motivo de inspiración del nombre de la nueva marca. Su objetivo era utilizar la fuerza motriz de una instalación hidráulica para mover la maquinaria que planeaba instalar en la nueva fábrica. Construida en primavera de 1867, se equipó con dos turbinas hidro-eléctricas en una superficie de 500 m², que comprendía los talleres, y que concentraba una gran parte de sus trabajadores bajo un mismo techo: 40 en 1867, que se convirtieron en 120 ocho años después.

Como hemos visto, estos treinta y cinco años han visto el nacimiento y evolución del comptoir familiar hasta la fábrica industrializada que debuta junto al nombre de marca. A partir de ahí se inicia otra etapa en la historia de Longines, un viaje tan fascinantes como estos primeros 35 y que podremos ir descubriendo día a día desde el proyecto “On this day”.