Los año setenta representaron un punto de inflexión muy importante en la historia de la relojería. La aparición y masificación de los mecanismos de cuarzo ocasionó un auténtico terremoto que abrió una crisis ante la que sucumbieron multitud de marcas que no pudieron asumir ni subsistir a este brutal cambio de panorama. Pero no todo fueron malas noticias; también debemos recordar esta década como una época de oportunidades fruto de la cual nacieron relojes tan icónicos como el Nautilus, el Royal Oak o el Overseas. Longines no se quedó atrás en esta carrera, y aunque también se apoyó en la novedosa tecnología de cuarzo, siguió apostando por los calibre mecánicos. Inspirado en un reloj concebido en esta época convulsa, hoy os presentamos el Longines Heritage 1973.
La colección Heritage de Longines se caracteriza por incluir guardatiempos que recuperan los diseños históricos de la marca, con la gran virtud de mantener un extraordinario parecido con las referencia originales. Gracias a ello, comparten espacio relojes de 49 mm como el Avigation Watch Type A-7 con otros de tamaño mucho más contenido, por ejemplo los 38 mm de uno de los Lindbergh Hour Angle. La fidelidad de diseño del Heritage 1973 la podéis comprobar en las imágenes siguientes que reproducen el Longines Conquest en el que se inspira.
La caja cuadrada almohadillada de 40 mm con acabado satinado presenta un biselado pulido muy marcado que se prolonga hacia las asas, ofreciendo un contraste de indudable atractivo. Ubicados en la carrura derecha, los discretos pulsadores cilíndricos y la corona estriada ceden todo el protagonismo a la espectacular caja que los acoge.
La esfera muestra un diseño casi idéntico al original, excepto algunos nuevos elementos funcionales como la implementación del totalizador de 12 horas o la ventana de fecha. Por suerte, las líneas minimalistas de dicho subdial logran disminuir dicha «intrusión», manteniendo casi intacto visualmente el diseño bi-compax de referencia. Longines ha lanzado este modelo en dos referencias según el color del dial y de los contadores situados a las 3 y 9 horas: una con esfera plateada y contadores negros, y otra con esfera negra y contadores plateados. En acabado pulido, los índices rectangulares aplicados siguen la misma estética que las manecillas de la función horaria, que muestran una delicada línea negra y aplicación de Super-LumiNova en su extremo.
La escala minutera en dos alturas permite lecturas de hasta 1/4 de segundo, cifra lograda gracias a su frecuencia de oscilación de 28.800 alternancias por hora. Es precisamente esta profusión de índices la que puede crear cierta duda estética en el posible comprador. Personalmente, lo considero parte de su encanto, un elemento imprescindible si la firma quería mantener intacta su esencia vintage. Otra valoración muy diferente es la que tengo sobre el contador de horas y de la fecha: prescindiendo ellos se hubiera obtenido una esfera más nítida, equilibrada y fiel a la configuración histórica, aunque he de reconocer que la utilidad diaria de la función de fecha es un argumento de peso para su implementación.
En posición perimetral, una escala taquimétrica de color azul abraza toda la esfera, aportando la única nota de color al monocromatismo que preside el conjunto, incluyendo la elegante correa de aligator en color negro y pespunte blanco con la que se entrega el Heritage 1973.
Evidentemente, la principal «actualización» reside en su interior. El reconocido calibre de Longines 30CH, el último movimiento cronógrafo propio fabricado por Longines, da paso al actual calibre L688 (ETA A08.L01), un cronógrafo de remonte automático con rueda de pilares y 58 horas de reserva de marcha, visible gracias al zafiro que cierra la trasera.
Watch-Test es una página web especializada en análisis y comparativas de relojes mecánicos de pulsera de alta gama y de lujo. Todos los artículos de Watch-Test son originales, independientes y exclusivos, escritos por editores referentes en el sector.