Salvo raras excepciones, todos los que están leyendo este artículo se estarán preguntando lo que significa el término M.A.D House. La respuesta acerca de las tres siglas iniciales es “Mechanical Art Devices”, que podríamos traducir al español como “Dispositivos Mecánicos Artísticos”. Trasladado todo ello a lo que realmente importa, M.A.D House es el nombre de la nueva manufactura que MB&F ha inaugurado en el pueblo ginebrino de Carouge.
Antes de seguir, no está de más elucubrar sobre la política de “naming” de Maximilian Büsser. Está claro que siempre le han gustado los nombres tremendamente explicativos, cuyo inconveniente es que resultan poco prácticos de utilizar. Imaginemos una frase que contenga expresiones como “me compraré un reloj Maximilian Büsser y Amigos” o “voy a ver qué ha llegado de nuevo a la Galería de Dispositivos Artísticos Mecánicos”. La solución es recurrir a los acrónimos. De ahí surgen MB&F (Maximilian Büsser and Friends) o M.A.D Gallery (Mechanical Art Devices Gallery).
Lo que admito me sorprendió es que Maximilian recurriera al acrónimo M.A.D para bautizar su nueva manufactura, pero pensándolo bien, definir a los relojes MB&F como dispositivos mecánicos artísticos me parece absolutamente adecuado y definitorio.
El proceso se inició cuando se hizo evidente que MB&F necesitaba más espacio para desarrollarse. Desde hacía años, las instalaciones se repartían entre la M.A.D.Gallery de la Rue Verdaine, en pleno centro histórico de Ginebra, y el taller ubicado en el Boulevard Helvétique, a pocos minutos a pie de la M.A.D.Gallery. El problema era que el crecimiento de MB&F ya había colapsado estas instalaciones y la solución era tan obvia como costosa; crear una nueva manufactura.
Según cuenta Büsser, como casi siempre ocurre en estos casos, la elección de la nueva sede fue casual. Visitando edificios industriales en la población de Carouge, descubrieron en sus afueras una antigua mansión de grandes dimensiones. De inmediato les pareció un estilo de sede más adecuado para MB&F que una fría edificación moderna.
La propiedad, construida entre 1907 y 1908, fue originalmente un proyecto del arquitecto ginebrino Edmond Fatio (1871-1959) y del lionés Charles Meysson (1869-1947). Se creó para convertirse en la residencia privada de una adinerada familia de empresarios industriales e incluso ganó un premio de arquitectura.
Una vez tomada la decisión, se inició la fase de rehabilitación, lo que incluyó una restauración total del tejado y también de todo el interior de la mansión. Como era obligatorio, en todo este proceso, un parámetro irrenunciable fue mantener los genes centenarios de esta gran casa.
El objetivo se cumplió escrupulosamente. Si observamos las imágenes de las salas de los talleres, con sus paneles de madera y sus grandes ventanales acristalados, nos recuerdan de inmediato al entorno de los ancestrales cabinotiers, que desarrollaban sus trabajos en las buhardillas de los edificios a fin de aprovechar al máximo las horas de luz.
La luz natural que penetra en el interior de la M.A.D House se beneficia de la ubicación de la casa en medio de una gran parcela de tres hectáreas, lo que crea un entorno totalmente despejado de obstáculos.
MB&F trasladó sus actividades relojeras a la M.A.D.House a finales de 2022. Ahora, en el 2023, MB&F ha decidido abrir las puertas de esta fascinante mansión para recibir visitas de los amigos de la marca y de todos los apasionados de los Dispositivos Mecánicos Artísticos, un sinónimo perfecto del concepto de Alta Relojería.
Los detalles de las visitas a la MB&F M.A.D.House los podemos descubrir en la siguiente página web: https://www.mbandf.com/en/mbandf/visit.
Para contactar con los responsables de las visitas podemos escribir a la siguiente dirección de correo electrónico: visit@mbandf.com.
