Montblanc Star Quantième Complet.
Segunda pieza que pasó completamente desapercibida durante la presentación de novedades que Montblanc realizó durante el pasado SIHH. Resulta curioso que, aún estando este Star Quantième Complet lejos de la complicación técnica del otro gran ausente, el ExoTourbillon Chronographe, se trate de un guardatiempos cuyo aspecto lo hace susceptible de haber merecido una mayor atención entre las novedades de este año 2013 de la manufactura asentada en Le Locle. Quizás una de las razones de su ausencia no sea otra que la fecha prevista para su disponibilidad, agosto de 2013, aunque este no debería de ser motivo suficiente ya que, la práctica totalidad de los relojes presentados en el mes de enero en Ginebra no empiezan a llegar a los distribuidores hasta pasado el verano.
Este nuevo integrante de la Colección Star de Montblanc responde a la complicación de calendario completo, la que podríamos considerar como la menor de las complicaciones dentro de los calendarios en relojería mecánica. Ya en alguna ocasión anterior hemos comentado los principales tipos de calendarios y las diferencias que existen entre ellos que radican en las necesidades de ajuste manual que cada uno de ellos requiere y cuya relación es inversamente proporcional: a mayor complicación, menor necesidad de ajuste manual.
Haciendo un poco de memoria y de menor a mayor complejidad, el primero de los calendarios es precisamente el que incorpora este Quantième Complet, el calendario completo, que precisa de ajuste manual en todos aquellos meses cuya duración es distinta de 30 días.
La complicación intermedia la encontramos en el calendario anual. En esta ocasión la necesidad de ajuste manual por parte del usuario de las indicaciones del calendario disminuye considerablemente y se reduce, prácticamente, a un ajuste anual cada 28 de febrero. El dispositivo reconoce de manera automática la duración de todos los meses del año excepto la correspondiente al mes febrero. Al igual que sucede con la relación entre complejidad y necesidad de ajuste manual, la relación entre la segunda y el precio de la pieza son también, obviamente, inversamente proporcionales. El precio de un calendario anual difiere considerablemente del correspondiente al calendario completo, aunque la máxima desviación en el precio la encontraremos en la tercera, y última, configuración de un calendario, el conocido como calendario perpétuo cuya necesidad de ajuste manual es prácticamente nula ya que, por ejemplo, los guardatiempos que se venden actualmente con esta complicación, no precisarán de ajuste por parte del usuario hasta el año 2100.
Si bien es cierto que la necesidad de ajuste manual de una complicación de calendario mecánico representa una incomodidad para el usuario, este hecho se compensa con el precio de adquisición de la pieza que puede verse incrementado, entre las distintas variantes, en varios miles incluso en decenas de miles euros. Adicionalmente, los mecanismos de ajuste son realmente prácticos y subsanan, en cierto modo, la comentada incomodidad.
De aspecto marcadamente elegante, lo que reduce sensiblemente su polivalencia, acentuado por el oro rosa empleado como material de construcción de la caja con unas dimensiones de 42 mm de diámetro y 12,17 de espesor, el Quantième Complet presenta la indicación de horas, minutos y segundos en configuración central e implementadas gracias a tres agujas manufacturadas en acero pavonado con el característico color azulado de este acabado. Las indicaciones correspondientes al calendario se disponen del siguiente del modo: la indicación de la fecha abandona la habitual representación por ventanilla para adoptar una configuración en aguja, con el mismo material y tratamiento que las indicadoras de la hora, que comparte eje con ellas y que apunta a una escala perimetral junto al bisel que incluye los numerales del 1 al 31. Esta aguja, ligeramente más larga que la segundera, acaba en forma de media luna en color rojo para ayudar a la lectura de la indicación.
Día de la semana y mes se ubican sobre un mismo eje horizontal, por encima del centro del dial y por debajo de la pequeña placa que sirve de soporte a la leyenda de la manufactura. Estas indicaciones se completan con la correspondiente a la de las fases de la luna, en un dial subsidiario alojado a las 6.
El fondo visto de la caja, que ofrece un valor de estanqueidad de 30 metros, permite observar el calibre que late a 28.800 alternancias por hora en su interior, el movimiento de remonte automático MB 4810/912 con una reserva de marcha, algo limitada, de 42 horas. El conjunto se complementa con una correa de piel de caimán en color café y cierre del tipo ardillón en el mismo material que la caja.
De por sí más asequible económicamente que las mayores complicaciones de calendario comentadas, parece ser que el Star Quantième Complet tendrá su versión correspondiente en caja de acero, lo cual aumentará consecuentemente su polivalencia a la vez que reducirá su precio de adquisición. En resumen, se trata de una pieza fiel a la línea de la Colección Star de Montblanc, la cual acumula unos quince años de historia en su catálogo.
Con este modelo, daremos por cerradas las presentaciones de las principales novedades de Montblanc para este 2013. En las siguientes imágenes, disponéis de los links correspondientes al resto de los artículos publicados.
