Hace un año, H. Moser & Cie publicó en sus redes sociales la imagen de un reloj con esfera Vantablack. Hasta ahí nada normal, no sería el primer H. Moser que recurre a este material. Lo excepcional es que las manecillas también estaban pintadas con Vantablack: como vemos en la imagen inferior, era completamente ilegible. Pero no era una foto real, sino una broma para celebrar el April Fool’s Day, el equivalente a nuestro Día de los Inocentes que muchos países europeos y norteamericanos celebran el 1 de abril.
Ante la avalancha de solicitudes de clientes interesados y el entusiasmo que despertó, a H. Moser & Cie. no le quedó otro remedio que tomárselo en serio, dando lugar a las tres ediciones Vantablack Black que hoy os presentamos: los Venturer Vantablack Black Hands, Venturer Vantablack Black Hands XL y Endeavour Tourbillon Vantablack Black Hands.
Además, debido a la excepcional situación actual, la compra en persona no existe en este momento, por lo que H. Moser está utilizando estos lanzamientos para promocionar su nuevo canal de ventas online que os presentamos en este artículo.
El recubrimiento ultranegro de Vantablack es la sustancia más oscura jamás fabricada
Creado por la empresa británica Surrey NanoSystems, está compuesto por nanotubos de carbono, 10.000 veces más finos que un cabello humano, que se alinean verticalmente uno al lado de otro para ofrecer la sorprendente capacidad de absorber el 99,965 % de la luz que incide sobre él. Debido a ello, el ojo humano lo percibe como si no hubiera materia, simplemente un insondable agujero negro.
No es la primera vez que se utiliza el Vantablack en relojería: hace dos años se presentaron en el SIHH el MCT Sequential One S110 Vantablack y el Panerai LAB-ID™ Luminor 1950 Carbotech™ 3 Days (PAM700). Si el primero ostentaba dicho material ya en su nombre, Panerai sólo hablaba de «revestimiento de nanotubos de carbono». Además de su aplicación artística
(el artista Anish Kapoor tiene la exclusiva), su principal utilidad se centra en la fabricación de telescopios y en el ejército como camuflaje térmico.
Los tres relojes cuentan con esferas recubiertas en Vantablack y las dos manecillas ennegrecidas
Debido a que su revestimiento (más bien es gris oscuro) no alcanza la profundidad del Vantablack, las agujas realmente parecen flotar sobre la nada. Dependiendo del ángulo de visión, las manecillas parecen oscurecerse, confundiéndose aún más con el dial.
En cuanto a los relojes, la referencia de más alta gama es el Endeavour Tourbillon Vantablack Black Hands, la única edición limitada entre las tres. Fabricado en una caja de acero con acabado DLC negro, mide 42 mm de ancho y 11,6 mm de espesor. Es una versión del precioso modelo en oro blanco y (obviamente) sin manos ennegrecidas que os presentamos a finales del año pasado. Tanto el original como esta nueva edición limitada, el tourbillon de un minuto del calibre HMC 804 se ubica a las 6 y tiene los puentes recubiertos de DLC negro.
Mucho más asequible es el Venturer Vantablack Black Hands XL, con una gran caja de acero de 43 mm de diámetro y 11,9 mm de grosor. En su interior se aloja el calibre HMC 327, un movimiento de cuerda manual con una reserva de marcha de tres días que late a 18.000 alternancias por hora e implementa un indicador de reserva de energía visible en el lado del movimiento.
Este mismo calibre es el que alimenta el Venturer Vantablack Black Hands, aunque esta vez su caja es de 39 mm y está fabricada en oro blanco. Personalmente, me resulta mucho más equilibrado y sensato que el XL.
- Venturer Vantablack Black Hands
- Endeavour Tourbillon Vantablack Black Hands
- Venturer Vantablack Black Hands
- Venturer Vantablack Black Hands XL
Los precios empiezan en 24.000 CHF del Venturer XL de acero de 43 mm, seguidos por los 25.000 CHF del Venturer de 39 mm en oro blanco y culminados por los 69.000 CHF del tourbillon de acero DLC, una edición limitada a 50 unidades. Con este trío, H. Moser nos vuelve a sorprender gracias a una particularísima estética que casa a la perfección con la filosofía de la firma. Lástima que la inmensa mayoría de vosotros no podáis ver en directo estas piezas, porque os aseguro que el efecto visual del Vantablack al tenerlo en nuestras manos es realmente impactante; las fotos no hacen justicia a oscura profundidad.