Si en el mes de enero Omega nos sorprendía con la noticia de la reedición de su legendario Calibre 321, ahora y con motivo de la celebración del 50º Aniversario del Apollo 11, presenta otro movimiento nuevo. En esta ocasión se trata del Master Chronometer Calibre 3861 destinado a latir en el interior de las dos ediciones limitadas con las que la manufactura rinde tributo al medio siglo transcurrido desde el primer alunizaje en el que tanto tuvo que ver.
La evolución.
El Master Chronometer Calibre 3861 debe ser entendido obligatoriamente como un descendiente del Calibre 321, el que alimentaba el movimiento del Speedmaster que llegó a la Luna. Este Calibre 321, que con el tiempo se convertiría en uno de los legendarios en la historia de la relojería, era a su vez descendiente del original 27 CHRO C12 (27 mm de diámetro, cronógrafo gobernado por rueda de pilares y contador adicional de doce horas tomando el oro rosa como material para su construcción) que fue diseñado y producido por vez primera en 1941.
Fue en el año 1949 cuando el 27 CHRO C12 pasaría a ser conocido como Calibre 321 para dar lugar al origen de un icono, de un movimiento codiciado hasta nuestros días por su diseño, sus prestaciones y, por supuesto, por tratarse del que albergaban los Speedmaster que recibirían la cualificación de la NASA para uso en sus misiones tripuladas. Por si fueran pocos estos motivos, una versión modificada del Calibre 321 sería la que se convertiría en el motor de los Speedmaster que utilizarían los astronautas de la misión Apollo 11.
Como parte del proceso de innovación y avances tecnológicos que ha caracterizado a Omega a lo largo de su dilatada historia, el Calibre 321 evolucionaría al Calibre 861.
Las diferencias principales con su antecesor consistían en la sustitución de la rueda de pilares por el sistema de leva y palanca para controlar las funciones del crono, la eliminación de los tornillos de regulación del volante, el incremento de la frecuencia de oscilación pasando de las anteriores 18.000 alternancias por hora (2,5 Hz) a unas nuevas 21.600 (3 Hz), la espiral del volante pasó a ser plana y, finalmente, el puente del volante abandonaba la forma de Y para adoptar una nueva trapezoidal. Este movimiento, que seguía siendo de oro rosa, se utilizaría entre los años 1968 y 1997.
Al Calibre 861 le seguiría en su evolución el Calibre 1861, que mantenía las 21.600 alternancias por hora de su predecesor a la vez que renunciaba al oro rosa como material en pos de un rodinizado para conseguir una mayor estabilidad constructiva. De manera adicional, la pieza del movimiento que activa el freno del cronógrafo pasó de ser metálica a producirse en un material sintético de Nylon que mejoraba sus prestaciones debido a un menor desgaste en su uso. También se vio alterado el número de rubíes sintéticos del Calibre 861, ya que el Calibre 1861 añadía uno de adicional en el pivote de la rueda de acoplamiento del cronógrafo. El total pasaba a ser de 18. Este calibre sigue utilizándose a día de hoy, siendo por ejemplo el que implementa el Speedmaster Professional Moonwatch con cristal de Hesalite y fondo ciego.
El Calibre 1863 responde a una versión del 1861 diseñada para latir en el interior del Speedmaster que monta un cristal de zafiro en lugar del Hesalite en su esfera además de un segundo zafiro en la trasera de la caja para dejar visible el movimiento. Este 1863 es idéntico al 1861 salvo por un pequeño a la vez que importante detalle: conserva el freno del cronógrafo en el original material metálico del Calibre 861. Omega quiso introducir esta variación por motivos meramente estéticos evitando de este modo que, al tratarse de un reloj con fondo visto, quedara expuesto un componente fabricado en material sintético al observar el movimiento del guardatiempos.
Master Chronometer Calibre 3861.
El desarrollo del Master Chronometer Calibre 3861 ha requerido la inversión de cuatro años de desarrollo y pruebas. El reto en su diseño consistía en producir un movimiento certificado como Master Chronometer adaptando sus dimensiones al Calibre 1861. Conseguirlo pasaba por encontrar la manera de encajar los componentes actuales en un espacio pensado para un movimiento con más de veinte años de vida. Los ingenieros de Omega lograron ensamblar los 240 componentes del 3861 en el mismo espacio que ocupaban los 234 del 1861, mejorando además la reserva de marcha (50 horas frente a las 48 anteriores), el comportamiento cronométrico y la resistencia a campos magnéticos.
La desviación diaria se redujo desde -1/+11 segundos hasta los 0/+5 segundos, es decir, además de limitar la horquilla desde 12 hasta 5 segundos por día, esta únicamente debía darse en forma de avance. Otra mejora introducida en las prestaciones del movimiento consistió en la implementación de la parada del segundero, de inestimable ayuda cuando el reloj debe ser puesto en hora.
Gracias a los equipos y maquinaria de última generación utilizados por Omega fue posible modificar ligeramente la forma de los dientes de las ruedas, lo que permitió ajustar más el contacto entre ellas suavizando el movimiento del tren de engranajes. Como tributo al Calibre 1861, el 3861 mantiene la frecuencia de 21.600 alternancias por hora. Sin embargo, el número de rubíes se ha incrementado desde los anteriores 18 hasta 26. De estos ocho rubíes adicionales y necesarios para el rediseño del calibre, la mitad se encuentran en el escape Co-Axial que sustituye al de áncora suizo montado en el 1861. Los cuatro restantes han sido necesarios para mejoras técnicas de carácter general.
Otro cambio significativo introducido en Calibre 3861 ha sido la retirada del regulador de frecuencia de manera íntegra. Al tratarse de una parte móvil suponía un riesgo de cambio de frecuencia accidentales. En el nuevo 3861 se ha sustituido este regulador por cuatro tornillos ajustables en el volante. Gracias a la inclusión del escape Co-Axial de Omega y a la espiral del volante en silicio (Si14), el Calibre 3861 ofrece, además, una extraordinaria resistencia a las influencias negativas de campos magnéticos de hasta 15.000 gauss.
Estéticamente, por sus acabados, el Calibre 3861 se acerca más al 1863 que al 1861. Para adaptarlo de manera perfecta a los dos relojes que rinden tributo al Apollo 11 se han producido dos versiones de este nuevo movimiento. La primera de ellas es la que late en el interior del Omega Speedmaster Apollo 11 50th Anniversary Limited Edition Moonshine™ Gold (1.014 unidades) del que ya os hablé en este artículo. La segunda versión es la que alberga el Omega Speedmaster Apollo 11 50th Anniversary Limited Edition (6.969 unidades) y se distingue de la primera por renunciar al Moonshine™ Gold en la construcción de la platina principal y los puentes. De este guardatiempos os debo el artículo con todos los detalles. De momento podéis consultar aquí sus principales características, en el artículo general que dedicamos a las novedades presentadas por Omega en el Time to Move.