El Omega Speedmaster CK2915-1 establece un impresionante record en subasta.
Un Omega Speedmaster CK2915-1 ha alcanzado un precio inimaginable en una subasta de Phillips; más de 20 veces el máximo previsto.
El Omega Speedmaster CK2915-1 ha sido objeto pasivo de un logro que pocas veces se da en una subasta profesional. Ha alcanzado un precio de 3.115.500 francos suizos, una cifra que multiplica por casi 26 el montante máximo que había estimado las prestigiosa empresa de subastas Phillips.
Que en las grande subastas existen una serie de hábitos establecidos, en muchas ocasiones absurdos, lo sabe cualquier coleccionista o persona interesada en este exclusivo mundo. Que uno de estos hábitos es que la empresa responsable de la subasta realicé valoraciones a la baja para incentivar las pujas de personas que nunca se llevarán la pieza, también es sabios de todos. Al fin y al cabo es un método de ventas totalmente legítimo para que la pieza subastada alcance el máximo precio, lo que siempre será del agrado de su propietario.
Que debido a ello, algunas piezas extraordinarias hayan multiplicado por más de cinco veces su valor máximo estimado ha ocurrido en diversas ocasiones. Que lo haya multiplicado por 26, como ha ocurrido con el Omega Speedmaster CK2915-1, excede todo lo imaginable. Seguro que se ha dado en alguna otra rara ocasión, pero si ha ocurrido con un reloj no lo recuerdo.
Hasta ahora, estas cifras estratosféricas eran patrimonio exclusivo de Patek Philippe seguido a bastante distancia por Rolex. Con esta subasta puede que la relajada tranquilidad de estas dos grandes marcas se haya terminado, por los menos la de Rolex. Al fin y al cabo, no olvidemos que el precio que se paga por cualquier objeto que se subasta tiene mucho más que ver con la percepción de valor de la marca o del artista que del valor objetivo de la pieza subastada. Por tanto, no es descartable que este Speedmaster CK2915-1 establezca un antes y un después en la percepción de valor de los relojes Omega.
Dejando de lado las elucubraciones sobre el mundo de las subastas, vayamos a los hechos objetivos que convierten al Speedmaster CK2915-1 en un cronógrafo excepcional. Básicamente todo se puede resumir en dos aspectos; el pertenecer a la primera serie de la famosa trilogía de relojes de carácter profesional presentados por Omega en 1957 y su peculiar color de esfera.
1957 fue probablemente el año más importante en la historia del catálogo de Omega. En dicho año se presentaron al unísono tres de los griales de la manufactura suiza: los Seamaster 300, Railmaster y Speedmaster. Sus referencias eran respectivamente CK2913, CK2914 y CK2915. Esta última referencia es la que atañe al Speedmaster protagonista de este impresionante record, concretamente la CK2915-1.
Omega solo produjo el Speedmaster CK2915 entre 1957 y 1959. Además, esta referencia concreta CK2915-1 pertenece a la primera serie de este reloj, lo que ya de por sí le convierte en coleccionable. El pertenecer a esta serie comporta una serie de características que ya no volverán a repetirse en conjunto y son las siguientes: agujas tipo «Broad Arrow», bisel metálico, el peculiar grafismo de la marca OMEGA con la O ovalada, la escala taquimétrica ubicada en el bisel y por supuesto el ser los primeros Speedmaster en equipar el legendario calibre 321. Estos Speedmaster también se caracterizan por su carrura simétrica, sin protectores entre los pulsadores y la corona.
Este Speedmaster no ha sido un reloj conservado en un cajón sino que ha sido utilizado con normalidad por su propietario. Ello, concretamente su exposición continuada al sol, ha generado que el color haya evolucionado hacia un tono chocolate, algo por otra parte habitual en este tipo de esfera «Tropical». No obstante, el factor que intuyo más ha contribuido a la espectacular cifra que se ha pagado por este CK2915-1 es su rareza. Desconozco el número de CK2915 que se han producido y ni Omega ni Phillips mencionan nada al respecto, por lo que es fácil deducir que no lo saben con certeza. Probablemente no habrán sido muchos, pero lo que es indudable es que un CK2915-1 con esfera tropical es una absoluta rareza. En la literatura especializada sobre el Speedmaster y en la red podemos encontrar diversos ejemplos de CK2915-2 y CK2915-3 con esfera tropical, pero no he conseguido encontrar ninguno del CK2915-1.
En la subasta, celebrada en Ginebra el 5 de noviembre, se entregó también un certificado, un extracto de los archivos, que confirma que la pieza subastada fue producida el 22 de noviembre de 1957. El afortunado nuevo propietario de este Speedmaster CK2915-1 ha invertido mucho dinero en él, concretamente la impensable cifra de 3.115.500 CHF, pero ¿quién sabe? puede que si se vuelve a subastar se incremente notoriamente esta cifra. Ya ha ocurrido en repetidas ocasiones con relojes célebres.