El nuevo Omega Seamaster Planet Ocean Worldtimer es una novedad de gran calado por un motivo bien claro, introduce por primera vez una complicación inédita en uno de sus emblemáticos Seamaster; el Planet Ocean. Como ya denota su nombre, se trata de la complicación “Horas Mundiales”, “Horas Universales” o “World Time”, por citar alguna de las múltiples denominaciones con las que se conoce esta indicación.
De forma muy condensada, se puede definir esta fascinante complicación por su cualidad de ofrecernos simultáneamente la indicación de la hora en los 24 husos horarios terrestres. A partir de esta base, las posibilidades son inmensas, tanto técnica como estéticamente. Este no es el primer Seamaster en el que Omega implementa esta complicación, ya que en el año 2017 la introdujo en el Aqua Terra 150M. Ahora, ofreciéndolo con la base del Planet Ocean 600M, la traslada al extremo más deportivo de la colección Seamaster.
El primer elemento en el que se muestra el carácter extremo del Seamaster Planet Ocean Worldtimer es en su caja. En primer lugar por su tamaño, de 45,5 milímetros de diámetro y 17,4 mm de grosor, unas dimensiones más que considerables, propias de relojes deportivos de carácter decididamente profesional.
La segunda característica que incide en el carácter extremo del Planet Ocean Worldtimer es el material utilizado para fabricar su caja; la cerámica negra. Incidiendo en su carácter decididamente industrial, Omega combina el satinado de su carrura con el arenado de su bisel, dos acabados muy propios de relojes de carácter profesional. La escala de inmersión de dicho bisel se implementa mediante relieve y sin alterar el negro absoluto que preside todos los elementos de la caja de este Seamaster.


Habitualmente, las esferas de los relojes con indicación de Horas Mundiales son complejas. Lo son porque la mayoría de ellos representan una parte del Mapa Mundi y además muestran el nombre de las 24 ciudades que simbolizan cada uno de los 24 husos horarios. Todo ello encajado en un sistema de discos giratorios, que es le responsable de la coordinación de todo el sistema horario.
El Omega no es ajeno a este principio y lo reproduce en su esfera, aderezándolo además con detalles estéticos que conforman la muy especial personalidad de este Seamaster. Lo primero que atrae la mirada es la estructura tipo panal de abejas que decora la zona perimetral de la esfera, donde se implementan los índices horarios. Por encima de ella, en blanco sobre fondo negro, se ubican los nombres de 12 de las ciudades que representan los husos horarios. Aun por encima, en el anillo más perimetral, se alojan el resto de las doce ciudades referenciales.
Aquí es donde apreciamos que Omega nos ofrece dos versiones del Seamaster Planet Ocean Worldtimer, que se diferencian únicamente por el color del fondo de este anillo y del fondo del mapa central; turquesa o blanco. El resto de elementos de las dos versiones de este Worldtimer, tanto estéticos como mecánicos, son absolutamente idénticos.
Lógicamente, el Seamaster Planet Ocean Worldtimer equipa el mismo mecanismo que inauguró el Aqua Terra 150M Worldtimer. Se trata del Calibre Omega 8938, un movimiento de carga automática, equipado con un escape Co-Axial, con una espiral de silicio y aprobado por el certificado METAS, lo que, entre otras cosas, le garantiza una inmunidad a corrientes magnéticas de hasta 15.000 gauss. Su volante oscila a una frecuencia de 3,5 Hz y genera una reserva de marcha de 60 horas, una cifra mágica, ya que permite dejar el reloj reposando durante un largo fin de semana sin que se detenga.
Omega ha dotado de una estética decididamente industrial a las primeras versiones del Seamaster Planet Ocean Worldtimer, lo que encaja a la perfección con el carácter de esta colección de relojes de buceo extremos. Elegir entre estas dos variantes es, como siempre, un tema totalmente personal y subjetivo, aunque es evidente que la versión turquesa es algo más llamativa que la gris. En este sentido, no me cabe duda de que, siguiendo el patrón que Omega ha aplicado en el Aqua Terra Worldtimer, pronto nos ofrecerá otras versiones de este reloj.
En cuanto a la recomendación de uso de este reloj, aunque también es una cuestión personal, no parece ser la elección ideal como primer reloj para adentrase en el fascinante mundo de la relojería de alta gama. Parece más adecuada como una elección para complementar y ampliar una colección ya existente de relojes de alto nivel. De todos modos, teniendo en cuenta la enorme evolución que han experimentando las convenciones sociales, nadie criticará a quien utilice su Seamaster Planet Ocean Worldtimer en ocasiones a priori alejadas de su entorno natural, incluso las más protocolarias. El precio de este Worldtimer es de 16.400 EUR.