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Y esta vez lo hace con el legendario tema de 1981 “Start Me Up” de los Rolling Stones, que precisamente en este 2012 celebran sus 50 años de actividad como banda sonora. Desde luego se trata de una combinación de lo más atractiva.

Que Omega es el cronometrador oficial de los Juegos Olímpicos es un hecho que, sin lugar a dudas, conocen aficionados y no aficionados a la relojería. Podríamos afirmar, si nos referimos a la era moderna, que ver el logo de la manufactura suiza en todas las competiciones que constituyen este evento deportivo se ha convertido en algo tan habitual como los propios anillos olímpicos.

Tyson Gay

Pero los Juegos Olímpicos de 2012 de Londres tendrán un significado especial para Omega por dos motivos.

El primeros de ellos se debe no sólo a que se tratará de la vigésimo quinta ocasión en que la manufactura asumirá el papel de cronometrador oficial sino que, además, celebrará el 80 aniversario del comienzo de esta asociación que se inició en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles de 1932

El segundo motivo, y no por ello menos importante, es que la última vez que se celebraron unos Juegos Olímpicos en Londres, en el año 1948, Omega fue en gran parte la firma responsable del nacimiento del cronometraje deportivo moderno.

El spot televisivo se ha producido en tres versiones de distinta duración – 15, 30 y 60 segundos – y se centra en los cruciales momentos de concentración de los atletas durante los segundos previos al inicio de la competición.

Para la filmación del spot, Omega ha elegido a un conjunto de atletas todos ellos promesas olímpicas y, como no podía ser de otro modo, embajadores de la marca: el saltador de trampolín chino Bo Qiu, la nadadora estadounidense Natalie Coughlin, la heptatleta británica Jessica Ennis, el velocista estadounidense Tyson Gay, la nadadora sudafricana Chad Le Clos y la saltadora de pértiga Jenn Suhr.

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POR   

Ingeniero Técnico Industrial, de formación electrónica con pasión por la micro-mecánica. Co-fundador y editor de Watch-Test. En mi trabajo y en la vida tengo una máxima: Las cosas hay que explicarlas de manera que se entiendan. De lo contrario, el esfuerzo es en vano.

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