Oris fue fundada en Hölstein en 1902 bajo la marca Lohner & Nägelin como fábrica local de relojes. En 1903 la empresa registró la marca Oris, el nombre de un pequeño río cercano. En 1904, Paul Cattin y Georges Christian se hicieron cargo de la fábrica y hasta 1960 fabricaron sólo relojes con escape de varilla (movimiento Roskopf). Ya en 1930 la producción diaria alcanzó alrededor de 7.000 relojes, con un mercado que abarcaba Europa, Nueva Zelanda, Sudamérica y China.
En los años sesenta Oris era uno de los diez mayores fabricantes de relojes en Suiza. A pesar de ello, la crisis del cuarzo de los 70 provocó la venta de la empresa, que finalmente fue comprada por ASUAG. En 1982 se restableció el nombre de Oris SA bajo la dirección del Dr. Portmann, siendo uno de los primeros fabricantes en enfatizar la mecánica tradicional bajo el lema «High Mech”, en contraste con la tecnología de cuarzo que seguía presente incluso en el segmento de lujo. La decisión de producir exclusivamente relojes mecánicos se confirma en 1991 con el lanzamiento del Calibre 581, diez años antes de adoptar el rotor rojo como una de sus señas de identidad. Basados tradicionalmente en movimientos ETA, en 2014 lanza su primer mecanismo manufactura en 35 años, bautizado como Calibre 110 en honor al 110 aniversario de la firma, seguido un año después por el Calibre 111.
Su colección actual se divide en cuatro temáticas de estéticas bien diferenciadas: cultura, submarinismo, aviación y deporte motor, entre los que destacan modelos como el Oris Big Crown ProPilot Calibre 111, o el Oris Aquis.