Una de las indudables ventajas de ser una marca independiente es la libertad de explorar y fomentar la creatividad, experimentando con técnicas que otros fabricantes suelen evitar. En esta ocasión, el componente elegido es la esfera del nuevo ProPilot X Calibre 400 Laser, que exhibe un fascinante colorido mediante un proceso alejado de los métodos habituales: lacado, esmaltado, recubrimientos en PVD, utilizando materiales biológicos como el nácar o la madera, o inorgánicos como metales, piedra e incluso meteoritos.
Oris no utiliza ninguno de ellos y recurre a la interferencia óptica para crear color en una superficie. La luz es una onda, y cuando dos ondas se encuentran, los valores de sus amplitudes se entrelazan, pudiendo aumentar o disminuir considerablemente o anulando parte de ellas, de tal manera que las ondas de luz en una determinada parte del espectro visible se destruyen, mientras que otras se reflejan. Esta técnica se ha desarrollado durante dos años en colaboración con un laboratorio de investigación afiliado a la universidad ETH de Zürich.
La esfera del Oris ProPilot Calibre 400 Laser lleva el concepto de interferencia de la luz a la relojería. Su esfera debe su efecto multicolor a un tratamiento láser que transforma la superficie de titanio. Este tratamiento manipula las ondas de luz reflejadas para contener un espectro específico de luz visible, creando una cautivadora impresión de color. Richard Siegrist, director de desarrollo de productos de Oris, explica el proceso: “La luz normal contiene todos los colores del espectro visible. Si se elimina un cierto rango, como las ondas rojas más largas, sólo se reflejan las ondas verdes medianas y las azules más cortas. Es la creación de color por adición. También agregamos una segunda capa que divide la luz visible en sus componentes y crea un efecto de arco iris brillante que varía según tu ángulo de visión, cambiando de oscuro a violeta, de verde a blanco y otros cambios sutiles conforme movemos la muñeca.»
Su geometría y medidas son idénticas al resto de referencias de la colección Oris ProPilot X Calibre 400 nacida en 2022: caja de 39 mm de diámetro fabricada en titanio de acabado satinado y arenado con brazalete integrado de líneas angulares y vanguardistas, pequeños protectores de corona, bisel y corona estriados que se inspiran en los álabes de la turbina de un avión. Ese tamaño contenido se combina con la ligereza del titanio para conseguir una excelente ergonomía. Su hermeticidad es de 100 metros, una buena cifra conseguida en parte gracias a su corona atornillada.
Por supuesto, el principal atractivo del nuevo Oris ProPilot X Calibre 400 Laser es su vanguardista esfera de titanio. Lo crea o no, toda la superficie de la esfera visible debajo del cristal de zafiro es titanio desnudo, y todos los colores, escalas, índices y texto de la esfera se logran mediante grabado láser. Estos elementos de color gris oscuro incluso captan la luz de la misma manera que si fuera aplicado en relieve, pero es un efecto simulado. Por otro lado, el las angulares manecillas cepilladas de tipo alfa con Super-LumiNova gris oscuro es un elemento básico de la serie ProPilot X, y ayuda a no restar protagonismo a la irisada esfera. En ese mismo sentido, el ProPilot X Calibre 400 prescinde de la indicación de fecha, una complicación que sí implementa habitualmente la colección.
Como sugiere el nombre, el Oris ProPilot X Calibre 400 Laser late al ritmo del movimiento automático manufactura Calibre 400. Lanzado en 2020 como el nuevo calibre insignia de Oris, presenta unas características impresionantes, con una espectacular reserva de marcha de 120 horas gracias a sus dos barriletes a una frecuencia de 4 Hz (28.800 alternancias por hora), junto con una precisión de -3/ +5 segundos por día. Además, utiliza más de 30 piezas no ferrosas y antimagnéticas, incluyendo una rueda de escape y anclaje de silicio.
Su rotor también muestra un elemento importante: se ha eliminado el rodamiento de bolas por completo, reemplazándolo con un sistema deslizante de baja fricción menos complejo y muy eficiente que implica una menor propensión al desgaste. Estas bondades se traducen en un aspecto muy a tener en cuenta: la garantía de los Calibre 400 es de diez años, el mismo intervalo de servicio recomendado por Oris. En términos de acabado, el Calibre 400 sigue siendo simple, con placas de tres cuartos mate y un rotor calado con cepillado vertical.
Para completar el diseño, Oris equipa el ProPilot X Calibre 400 Laser con el brazalete de tres eslabones de titanio característico de la línea. Con eslabones exteriores fuertemente inclinados, este brazalete le da al ProPilot X Calibre 400 Laser gran parte de su carácter. Su precio es de