Panerai Submersible Elux LAB-ID
Panerai se inspira en su técnica ELUX patentada en los años 60 y lanza el Submersible ELUX LAB-ID con luminiscencia mecánica.
Primera Guerra Mundial, noche cerrada, luna nueva. Estamos en una trinchera, parapetados tras unos sacos de arena que nos protegen del enemigo emplazado a escasos 50 metros en otra larga zanja paralela. Una tregua nocturna en que la mayoría intentamos dormir y reponernos mínimamente del cansancio extremo acumulado. Me despierto sobresaltado por una pesadilla. ¿Qué hora es?. Intento leer mi reloj de bolsillo al que le he soldado unas asas y atado una correa para asirlo a mi muñeca. Son las 03:15.
Por suerte, desde hace unos pocos años, sobre 1910 aproximadamente, se ha empezado a utilizar una mezcla de radio y sulfuro de zinc para pintar índices y manecillas, una sustancia que emite luminosidad constante gracias a su radioactividad: leer la hora en plena oscuridad ha dejado de ser un problema.
La búsqueda e innovación sobre la legibilidad de las indicaciones en condiciones precarias de luz ha sido una de las premisas sobre las que ha evolucionado Panerai desde sus inicios. Ahora, recurre a su bagaje histórico en este campo para explorar fuentes de inspiración para nuevos relojes conceptuales. La luminiscencia característica de Panerai encuentra una nueva expresión a través del Submersible Elux LAB-ID totalmente mecánico, surgido del Laboratorio di Idee de Panerai después de ocho años de I+D, plasmando la esencia de la firma a través de su búsqueda continua de soluciones técnicas innovadoras. Esta creación presenta la gran novedad de su electroiluminación bajo demanda creada exclusivamente de forma mecánica. El nuevo Sumergible Elux LAB-ID PAM01800 se basa en el histórico invento patentado de Elux Panerai en la década de los 60. Podemos pensar que con el Super-LumiNova ya tenemos suficiente para la lectura de las indicaciones en la oscuridad, pero lo realmente interesante no es que la luminiscencia esté presente constantemente, bajando progresivamente su intensidad hasta que se agota al cabo de una horas, sino poder disponer de ella cuando realmente sea necesaria, o sea, a demanda.
La historia de Panerai y la luminiscencia
La historia de Panerai es bien particular. Sus orígenes no se sitúan en las tradicionales tierras helvéticas, cuna de la relojería, sino el la Florencia de mi siempre admirada Toscana. Giovanni Panerai abrió su primera tienda en Ponte alle Grazie en 1860 (un año antes de que la Toscana fue anexada al Reino, recién formado, de Italia), pero fue con su hijo, Guido Panerai, cuando la firma se estableció como proveedor de la Armada Real italiana de instrumentos de precisión. Para satisfacer las exigencias militares, Panerai desarrolló un polvo a base de radio para potenciar el brillo de las esferas de los instrumentos y las miras en colaboración con el capitán de corbeta Carlo Ronconi: así nació el Radiomir, cuya patente data de 1916. Ya en 1935, la Armada Real italiana puso en marcha un programa secreto de nuevos operadores y vehículos de asalto submarino, siendo Panerai una de las empresas que participó en el desarrollo de herramientas técnicas útiles para esta nueva actividad militar, entre las que se encontraban varios prototipos de relojes de buceo, entre los cuales el mejor resultado fue la referencia 2533, fabricada sobre una base proporcionada por Rolex y modificada por Panerai. Posteriormente, se creó la referencia 3646, el instrumento que hoy conocemos como el reloj Radiomir y que ya implementaba numerales e índices gracias al uso de dicho material luminiscente.
El 11 de enero de 1949, se aprobó la patente para que Panerai utilizase el nombre Luminor en referencia a los materiales luminiscentes y autoluminiscentes de su modelo. Giuseppe Panerai se dio cuenta de que, dada la nueva realidad creada por la expansión de las tecnologías atómicas militares y civiles, el vínculo con la radiactividad debía gestionarse con precaución. Decidió que las sustancias luminiscentes debían recibir una nueva denominación más neutra, y poco a poco fueron identificadas con el nombre Luminor. Tras más de una década, Luminor se vinculó a una nueva sustancia luminiscente a base de tritio (un isótopo de hidrógeno), de emisiones muy bajas e inocuas. El 11 de enero de 1949, se aprobó la patente para que Panerai utilizase el nombre Luminor en referencia a los materiales luminiscentes y autoluminiscentes de su modelo. Giuseppe Panerai se dio cuenta de que, dada la nueva realidad creada por la expansión de las impresionantes tecnologías atómicas militares y civiles, el vínculo con la radiactividad debía gestionarse con precaución. Decidió que las sustancias luminiscentes debían recibir una nueva denominación más neutra, y poco a poco fueron identificadas con el nombre Luminor. Tras más de una década, Luminor se vinculó a una nueva sustancia luminiscente a base de tritio (un isótopo de hidrógeno), de emisiones muy bajas e inocuas. Por convenciones de uso, el término Luminor se convirtió gradualmente en el denominador común del reloj de buceo Panerai, caracterizado por el puente protector de la corona.
Otro capítulo fundamental de la producción de Panerai, que se desarrolló especialmente en los años 60, guarda relación con los instrumentos de precisión creados y proporcionados a petición de la Armada italiana, como brújulas y profundímetros de muñeca con diferentes calibrados, así como luces de señalización submarina para compensar la presión. En esta década, Panerai siguió investigando para potenciar la luminiscencia de sus instrumentos. Gracias a ello creó Elux, una tecnología patentada en 1966 como resultado de años de investigación, marcando un importante salto adelante en el campo de la luminiscencia. Esta abreviatura de «elettroluminescenza» (electroluminiscencia), definía originalmente a paneles electroluminiscentes compuestos por superficies uniformemente luminosas disponibles en varios tamaños, formas y materiales con su luminiscencia mantenida constantemente por un campo. Estos paneles, completamente libres de sustancias radiactivas, fueron excepcionalmente versátiles, robustos, resistentes a golpes y vibraciones y adaptables a diferentes entornos y requisitos, lo que los hacía adecuados para una amplia gama de aplicaciones. Además, eran energéticamente eficientes y funcionaban con baterías portátiles o con suministro de corriente, y la intensidad de la luz se podía ajustar según fuese necesario.
Diseñados específicamente para mejorar la luminiscencia de los instrumentos navales, Elux permitía una fácil lectura de las pantallas en diversas condiciones, incluidos escenarios con poca luz. Su versatilidad también se utilizó para crear caminos luminosos y señalización para el aterrizaje de helicópteros en las cubiertas de buques militares para ayudar en desembarcos nocturnos o en condiciones de mala visibilidad.
Submersible Elux LAB-ID
Como hemos visto, la historia de Panerai está estrechamente ligada con la búsqueda de mejorar la luminiscencia de sus creaciones, ya sean instrumentos o relojes. La tecnología luminiscente actualmente aplicada se basa predominantemente en una sustancia compuesta por aluminato alcalinotérreo (si, el afamado Super-LumiNova), con la notable capacidad de absorber luz, tanto solar como artificial, y emitirla en la oscuridad con una duración de su brillo que depende de la intensidad y duración de la exposición a la luz. Como tal, ese brillo no tiene una durabilidad lo suficientemente larga como para soportar, por ejemplo, toda una noche. Y es ahí donde entra el departamento LAB-ID de Panerai y su búsqueda continua de soluciones técnicas innovadoras para elevar los estándares y el rendimiento de sus referencias. Inspirado en la idea de la electroluminiscencia Elux, Panerai presenta el nuevo Submersible Elux LAB-ID PAM01800. Con este guardatiempo se culminan ocho años de I+D, creando de un movimiento totalmente mecánico que puede emitir luz bajo demanda con un máximo de 30 minutos gracias al almacenamiento totalmente mecánico de energía, el P.9010/EL. Dicho mecanismo se implementa en el corazón de una caja de 49 mm de titanio ceramizado (Ti-Ceramitech™). Vayamos por partes y hablemos primero de cómo funciona su tecnología electroluminiscente.
Si tenemos el enorme reloj en nuestra muñeca, veremos un pulsador con un protector giratorio en la carrura izquierda a la altura de las 8 horas firmado como ELUX. Con un simple gesto deslizaremos dicho protector hacia arriba, dejando al descubierto el pulsador subyacente que nos permitirá activar el mecanismo de luminiscencia a demanda (un proceso que nos puede recordar a la activación de un repetición de minutos). Al pulsarlo, el reloj se ilumina gracias a la energía almacenada en cuatro barriletes dedicados (de los seis disponibles en el movimiento) y específicamente diseñados para volcarla en un microgenerador que convierte dicha energía mecánica en electricidad. El compacto microgenerador mide sólo 8 x 2,3 mm, y cuenta con los elementos habituales: bobinas, imanes y un estator hechos a medida y, para optimizar su eficiencia energética incorpora electrónica no activa, un rotor de alta velocidad funcionando a 80 revoluciones por segundo, y genera una señal eléctrica de alta frecuencia de 240 Hz. Con dos barriletes dedicados a la funció de horas y minutos, la reserva de marcha alcanza el estándar de la firma: tres días.
Esta energía se canaliza para iluminar varios indicadores en el dial, incluida la del indicador lineal de reserva de energía luminiscente y los índices. Si bien iluminar estos elementos estáticos es ya es de por sí un logro, aún lo es más el hecho de hacer llegar la luz a los elementos móviles: las agujas de horas y minutos y el índice redondo del bisel. En éste último componente, Panerai LAB-ID ha conseguido conducir la electricidad al bisel fuera del caja del reloj mientras ofrece una hermeticidad de 500 metros. Ello se consigue gracias a su accionamiento magnético, iluminando solo simultáneamente los 15 LED bien colocados debajo del índice dot frente a los 60 LEDs que en total se albergan bajo el bisel. Por su parte, las grandes agujas de horas y minutos y el eje central no tienen ese grosor sobredimensionado por estética. Como vemos, las manecillas disponen de una «ventana acristalada» que permite emerger la luz desde la superficie interior gracias a la energía suministrada a través del eje, una singular arquitectura sin duda marcada por la movilidad de las agujas. Aunque la nota de prensa no nos cuenta nada al respecto, esperemos que la marca nos pueda aclarar el funcionamiento de esta patente.
Podríamos pensar que la luminiscencia tendría una duración más bien limitada, pero estaríamos equivocados: el mecanismo puede proporcionar luz continua durante hasta 30 minutos, un dato muy a tener en cuenta dada la energía limitada disponible en comparación con las baterías tradicionales.
Ti-Ceramitech y esfera
Consecuentemente con la avanzada tecnología que exuda el Submersible Elux LAB-ID, la caja de 49 mm debía estar a la altura. Para ello, recurre al Ti-Ceramitech, un nuevo material presentado en el Watches & Wonders de este año con los dos Submersible QuarantaQuattro Luna Rossa Ti-Ceramitech. Creado mediante la ceramización del titanio por oxidación con plasma electrolítico, logra una tonalidad azul muy distintiva. Técnicamente, si lo comparamos con el acero proporciona una dureza significativamente superior además de ser un 44% más ligero, pero con una tenacidad a la fractura diez veces mayor que la cerámica tradicional. No sólo la caja y la trasera son de Ti-Ceramitech, sino también la corona, el protector, el mecanismo de activación de la luminiscencia y el bisel unidireccional con la escala de buceo en relieve. En el icónico protector de corona en forma de media luna, la tradicional firma marca REG TM ha sido reemplazada por SUB LAB en verde, marcando así el carácter especial de este modelo dentro de la colección Submersible.
La esfera muestra índices de tipo bastón a las 3, 6 y 12 horas (dobles en este último) y de tipo dot en las restantes posiciones excepto a las 9 horas, donde encontramos el pequeño segundero con cruz y manecilla azules y un fino anillo perimetral luminiscente de cuatro sectores. Sobre las seis horas se dispone el indicador lineal de energía del sistema electroluminiscente junto al texto LAB-ID (en blanco) y Power Light (en azul). Equilibrando las dos líneas y sus colores, en la parte superior del lineal se ubican las serigrafías de Panerai y Submersible.
Un detalle a tener en cuenta y que puede pasar desapercibido ante la magnificencia del sistema de electroiluminación es que los índices y la manecilla de las horas están acentuados con una fina línea de contorno casi perimetral de Super-Luminova X2 verde (un nuevo grado que garantiza una luminosidad un 10% mayor que SuperLuminova® X1 después de 180 minutos en la oscuridad). Las manecillas de minutos y el índice del bisel están iluminados de la misma forma por Super-Luminova X1 en azul.
El Panerai Submersible Elux LAB-ID reloj se entrega con una correa de caucho azul y una segunda correa bimaterial. Como era de esperar, no entrará en la colección estándar: es una edición limitada a 150 piezas, con una disponibilidad de 50 piezas por año durante tres años. Su precio es de 106.000 €.