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De todas las novedades que nos presentaron durante el pasado SIHH, los Radiomir 1940 de Panerai se sitúan entre las piezas que más nos han gustado. La caja 1940 hizo su debut el año pasado gracias a una edición especial de 100 piezas bajo la referencia PAM 399. Con un bello calibre OPXXVII de base Minerva, sus 47 mm ha tenido continuidad, uniéndose a un nuevo tamaño de 42 mm, que con distintos calibres y sus respectivas versiones de acero y oro, conforman el conjunto de los Radiomir 1940.

Hoy os presentamos el test del Radiomir 1940 de 42 mm, el más equilibrado de los dos. Pero antes de analizarlo, creo conveniente situarlo en el timeline de Panerai para comprender mejor el porqué de su diseño.

Historia

En 1926, sesenta y seis años después de que Giovanni Panerai abriera su taller en Florencia, Guido Panerai registra la primera patente de la marca. Para satisfacer las necesidades militares de la Armada Real Italiana, para la que ya llevaba años trabajando, Panerai crea el Radiomir, un polvo obtenido a partir del radio empleado para conferir luminiscencia a los instrumentos de avistamiento y las esferas.

En vísperas de la Segunda Guerra Mundial, los instrumentos desarrollados por Panerai para la Marina Militare tomaron una papel protagonista. En 1936, entregó el prototipo del Radiomir al Comando del Primer Cuerpo Submarino, en respuesta a la petición del Estado Mayor de desarrollar “un reloj sumergible luminoso”. Evaluó las creaciones de numerosos fabricantes reconocidos, pero el único modelo que satisfizo los estrictos requisitos de las autoridades militares fue el presentado por Panerai. Éste sería el primer prototipo de Panerai y, según muchos especialistas, el primer modelo sumergible profesional en la historia de la relojería: el Radiomir.
En 1938, dos años después, hizo entrega de las primeras diez unidades para las fuerzas de asalto. En sus muñecas y sobre el traje de goma impermeable, además del reloj indispensable para sincronizar todas las operaciones en tiempo de guerra, llevaban otros instrumentos de precisión desarrollados por Panerai, como el profundímetro y la brújula.

El Radiomir presenta ya muchas de las características que aún hoy en día le distinguen: una caja de gran tamaño (47 mm) en acero y de forma cuadrangular redondeada, números e índices horarios luminiscentes, asas desmontables de correa soldadas a la caja, y correa ancha resistente al agua con una longitud suficiente para abrocharla por encima del traje de inmersión.
La primera caja Panerai tenía una elegante forma cuadrangular y la correa cosida estaba unida por medio de unas delgadas asas formadas por una varilla metálica curvada por los dos extremos y soldada a la caja. Esta solución exponía las asas al riesgo de doblez o rotura  mientras los comandos realizaban operaciones externas a bordo de los vehículos submarinos de asalto, los maiale, con el consiguiente riesgo de perder un instrumento de importancia vital en sus misiones.

En torno a 1940, respondiendo a las peticiones de los buzos de la Armada, se perfeccionó el diseño del Radiomir con una evolución que buscaba solucionar estos problemas con una mayor solidez y resistencia. El resultado de esta investigación fue la sustitución de las asas iniciales por otras más robustas, mayores y talladas en el mismo bloque de acero que la caja Radiomir 1940. Paralelamente, se introdujo el sistema de pequeños tubos asentado en los orificios de las asas que permiten cambiar con mayor facilidad la correa de cuero, mientras una corona rectangular de mayor tamaño toma el lugar de la corona trocoidal del Radiomir.

Esto representa el momento de la transición entre la primera caja cuadrangular habitual en los Radiomir de 1936 y 1938, a la más voluminosa del Luminor, distinguible por el ahora característico dispositivo protector de la corona, cuya versión definitiva se estableció alrededor de 1950. En ella, el Radiomir radiactivo es sustituido por el Luminor, un compuesto basado en el tritio, un isótopo del hidrógeno patentado por Panerai por primera vez en Italia en 1949.

Los Radiomir 1940 SIHH 2013

Dos son los modelos que Panerai ha lanzado dentro de su colección Historic:

  • Radiomir 1940 3 days 47 mm, con calibre manufactura P.3000 de carga manual. PAM 514 en acero, y PAM 515 en oro rojo.
  • Radiomir 1940 42 mm, con calibre manufactura P.999 de carga manual. PAM 512 en acero con correa negra de aligator, y PAM 513 en oro rojo, con correa marrón de aligator.

Con características estéticas y mecánicas diferenciadas, dejaremos el análisis de los 47 mm para un artículo posterior, centrándonos en modelo que mejores sensaciones me ha dejado, el PAM 512.

Radiomir 1940 42 mm

La primera idea que me viene a la cabeza es… nitidez, descripción que le viene como anillo al dedo a esta esfera de diseño extremadamente puro; sólo el prescindible pequeño segundero a las 9 horas rompe su armonía. Grandes números arábigos nos indican las 12, 3 y 6 horas, mientras que entre ellos, cada cinco minutos, encontramos índices de tipo bastón de igual longitud que los números. Las agujas de tipo espada incluyen aplicaciones de Super-LumiNova, al igual que la pequeña aguja segundera. La leyenda “RADIOMIR PANERAI” bajo las doce horas completa el diseño de la esfera.

El dial de color negro (acero) o marrón (oro) presenta una estructura sandwich, con Super-Luminova aplicada entre los dos discos. Esta sustancia luminiscente es de color beige, un tono que le otorga un acertado look vintage.

Caja

La caja de geometría almohadillada sigue las líneas marcadas por el Radiomir 1936. Una de las principales bondades de este reloj vienen dadas por su comodidad de uso, gracias a su contenido diámetro de 42 mm y, sobre todo, a su escaso grosor respecto a las medidas que Panerai nos tienen acostumbrados. La hermeticidad conseguida llega a los 10 bares (100 metros).

Las asas son robustas, similares a las que implementan las cajas Luminor y 1950. La corona rectangular presenta las iniciales OP en su superficie. El material empleado en la fabricación de la caja comporta ciertas diferencias, además del metal, entre el PAM 512 de acero y el 513 de oro rojo; mientras en el de acero las agujas son de oro blanco, consecuentemente en el de oro rosa son del mismo metal que la caja, pero la principal variación la encontramos en el calibre, tal como veremos en el apartado siguiente.

El calibre P.999

Este movimiento manufactura de carga manual, con 3’40 mm de grosor, es el calibre más delgado fabricado por la firma de Neuchâtel. Tiene un diámetro de 12 líneas, 19 rubíes y 154 componentes, además de gozar de una buena reserva de marcha de 60 horas, conseguida gracias a la energía almacenada en un único barrilete. La frecuencia de oscilación del volante es de 21.600 alternancias por hora (3 Hz).

Cuatro puentes ocupan la gran mayoría del espacio, ocultando casi por completo la platina. Sus acabados sigue la tendencia de la marca en sus calibres manufactura, industrialmente austeros. No soy un gran fan del diseño de los calibres de Panerai, pero he de reconocer que el P.999 no me desagrada en absoluto… aunque queda por debajo de la bella arquitectura y los acabados del OPXXVII de base Minerva implementado en la edición especial PAM 399.

El PAM 513 monta el calibre P.999 descrito hasta ahora, mientras que el PAM 512 de acero utiliza una versión de dicho movimiento, el calibre P.999/1. ¿Qué diferencia hay entre ambos?. Pues que el primero, un regulador de cuello de cisne ajusta la longitud activa del muelle del volante, mientras que en el P.999/1 se ajusta mediante un dispositivo de palanca. La ausencia del cuello de cisne comporta que el grosor final del reloj disminuya hasta los 3’00 mm, y que el número de componentes baje a 144.

Otra de las diferencias es que no presenta las aristas de los puentes biseladas y pulidas, decoración que sí está presente en el P.999. Sinceramente, no entiendo porqué utilizan dos versiones tan similares, eliminando en una de ellas el estético cuello de cisne y el biselado de los puentes. ¿Tanto incrementaba los costes implementar el P.999 sin modificar en la caja de acero?, ¿o sólo es una manera de dar un valor añadido a la versión de oro?. Lástima!

Con 1.500 piezas anuales, el Radiomir 1940 de 42 mm en acero tiene un pvp de 5.900 €, mientra que la versión en oro rojo, con una producción anual de 500 unidades, casi triplica este precio hasta alcanzar los 16.500 €.

 Valoración

Los nuevos modelos 1940 aterrizan sin perder ni un ápice de su ADN paneristi. Aunque al principio se nos haga un poco raro ver la caja Radiomir sin las asas tipo alambre o la corona trocoidal, su esbeltez pronto nos cautiva. Su contenido grosor junto a unos universales 42 mm, consiguen que el Radiomir 42 mm sea un reloj muy cómodo de llevar.

La nitidez de la esfera conduce a presentar una legibilidad óptima, y junto al Super-Luminova beige conforman un diseño vintage muy logrado. Sin el pequeño segundero, a imagen y semejanza del recién y lamentablemente finiquitado PAM 210, sería perfecto.

Respecto al calibre manufactura, además del ya alabado grosor, cabe destacar su construcción fiable y robusta, junto a una buena reserva de marcha de 60 horas. En su contra, los acabados del P.999/1 respecto al P.999.

A pesar de ello, este reloj resulta una pieza muy a tener en cuenta en su versión de acero. Su precio se sitúa en la gama media de Panerai, en el mismo rango que su alma gemela el Radiomir PAM 337, con idénticas medidas y calibre. El tiempo dirá si consigue hacerse un hueco entre los compradores, o si éstos siguen optando por la clásica caja Radiomir.


Watch-Test es una página web especializada en análisis y comparativas de relojes mecánicos de pulsera de alta gama y de lujo. Todos los artículos de Watch-Test son originales, independientes y exclusivos, escritos por editores referentes en el sector.
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Ingeniero geólogo, Master en Geología Marina y Master en Restauración Medioambiental, Co-fundador y editor en Watch-test. Opinión, pasión y rigor, son los pilares fundamentales que sustentan la redacción de mis artículos. La clave, disfrutar de una profesión que coincide con mi afición.

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