El Patek Philippe 1938P Minute Repeater Alarm resuelve el misterio que tenía intrigados a todos los apasionados de la Alta Relojería en general y de Patek Philippe en particular. Cuando se publicaron los relojes que participarían en el Only Watch 2023, solo había uno del que no existía ni información ni imágenes; el Patek Philippe. Lo único que se avanzaba, y de ahí el misterio, es que se trataría de una pieza única derivada de una corta serie de relojes dedicados a Philippe Stern, su Presidente Honorario.
Naturalmente, tratándose de un reloj dedicado a Philippe Stern, resultaba evidente que se trataría de una pieza extraordinaria en todos los sentidos, tanto en el estético como en el técnico. También resultaba evidente, por lo menos para mí, que sería un reloj que equiparía una complicación o complicaciones relacionadas con la sonería. Pues bien, ahora ya sabemos que ambas predicciones se han cumplido.
El misterio no lo ha desvelado la pieza única destinada al Only Watch ya que, debido a unas presuntas irregularidades financieras, este evento se ha suspendido. En lugar de ello, esta legendaria manufactura ginebrina ha preferido desvelar la serie de relojes que estará “disponible al público”. Se trata de una nueva referencia en su catálogo, la 1938, que aporta un conjunto de grandes complicaciones que son primicia y en consecuencia un nuevo movimiento. Hablamos del Patek Philippe 1938P Minute Repeater Alarm que, mediante el nuevo calibre R AL 27 PS, integra las complicaciones de Repetición de Minutos y Alarma.
La caja del Patek Philippe 1938P
Un aspecto que era lógico y predecible es que la estética de un reloj dedicado a Philippe Stern debía ser clásica y Patek Philippe ha llevado este concepto al extremo. Geometría redonda, asas finas y corona en forma de cebolla son tres características que asociamos a un reloj vintage clásico y el 1938P las cumple.
Otro aspecto que distingue a un reloj clásico del máximo nivel es que sus dimensiones deben ser contenidas, algo que nuevamente cumple el 1938P. A priori, sus 41 milímetros de diámetro y 14.2 de grosor podrían parecer generosos, pero si tenemos en cuenta las grandes complicaciones integradas en el movimiento que alberga esta caja y que además su carga es automática, se trata de un tamaño extremadamente contenido.
Como era de esperar, Patek Philippe ha recurrido al platino, el más preciado y noble de los metales nobles, para elaborar la caja del 1938P. Casi oculto, entre las asas inferiores, encontramos un diamante engastado en la carrura, el símbolo que distingue a todos los relojes Patek Philippe con caja de este metal precioso.
En el centro de la corona se ubica un pulsador con el que podemos seleccionar el modo de la sonería, que se muestra en una pequeña ventana situada en la esfera, a la altura de las 3 horas. Para activar la sonería seleccionada, ya sea la repetición de minutos o la alarma, debemos accionar la corredera ubicada en la zona izquierda de la carrura.
El fondo del 1938P está equipado con un cristal de zafiro que permitirá a su propietario deleitarse con la contemplación del reverso del movimiento que alberga. Como protección extra y como símbolo de los grandes relojes históricos, este fondo está protegido por una tapa, también de platino, en la cual se puede leer el grabado “À mon Père, 85 ans de passion horlogère” (A mi padre, 85 años de pasión relojera), como muestra de la dedicatoria de Thierry Stern, actual Presidente de Patek Philippe, a su padre Philippe.
Una esfera Philippe Stern
Lo que dudo que alguien preveyera es que el motivo que decora la esfera del 1938P sería el mismo retrato de Philippe Stern. Lo que sí era de esperar es que para la decoración de la esfera se emplearía esmalte Grand Feu. La base de la esfera es de oro de 18 quilates y sobre su parte izquierda se plasma el retrato de Philippe Stern mediante pintura en miniatura en esmalte blanco y gris sobre un fondo de esmalte Grand Feu negro. Elegir este tipo de decoración tampoco ha sido una decisión aleatoria ya que esta técnica artística es otro de los legados que salvó y perpetuó el actual Presidente Honorario de Patek Philippe.
Los índices horarios, en forma de números árabes en cursiva, están aplicados sobre la base de la esfera y realizados en oro blanco. La excepción es que, con el fin de no interferir en el retrato de Stern, se prescinde de los correspondientes a las 9, 10 y 11. Este tipo de índices son característicos de muchos de los grandes relojes de Patek Philippe: los calendarios perpetuos 5327 y 5160, los cronógrafos 5370, 5373 y 5470. Por supuesto, también encontramos esta tipografía en algunos de los relojes con sonería más emblemáticos del catálogo de Patek: 5178, 5374, 6301 y 6300.
Las agujas del tiempo son de estilo Breguet y están realizadas con oro blanco, lo que crea un atractivo contraste con el oro rosa con el que está elaborada la aguja que nos indica la hora a la que está programada la alarma.
Calibre R AL 27 PS; nueva oda sonora
Como en todo reloj del máximo nivel con grandes complicaciones, el corazón y el alma del 1938P lo encontramos en el mecanismo que protege su caja; el calibre R AL 27 PS. Aquí el simbolismo de los caracteres es tan transparente como en todos los calibres Patek; R de repetición de minutos, Al de alarma, 27 como indicación de su diámetro y PS de pequeño segundero.
Dado que por primera vez se reúnen en solitario las complicaciones de Repetición de Minutos y Alarma, ha sido necesario el desarrollo de un nuevo calibre. Para ello se ha partido de la base del calibre R 27, que equipa todos sus relojes automáticos con repetición de minutos de Patek. La gran complicación técnica surge de la integración de la complicación de alarma en esta base de repetición de minutos.
Parte de la solución a este desafío ya la tenía Patek Philippe en el excelso Grandmaster Chime 5175 presentado en el año 2014, cuya alarma programable comportó una de las cinco funciones sonoras que fueron motivo de patente. No obstante, integrar este modulo de alarma en el R27 es extremadamente complejo, hasta el punto que los ingeniero de Patek ha tenido que rediseñar profundamente el mecanismo de repetición de minutos para poder integrarlo con éxito con el de alarma. La complejidad venía de que la finalidad era que ambas funciones sonoras utilizaran los mismos dos timbres clásicos para generar el sonido.
Esta complejidad mecánica ha originado la adición de nada menos que 227 componentes a la base de R 27, incluidos y cito textualmente la hoja técnica “Un sistema de báscula y rueda de pilares para seleccionar el modo de sonería y un dispositivo fusée con gatillo de sonería, utilizado para desconectar temporalmente la fuente de energía (tambor del barrilete de sonería) del mecanismo de sonería, un sistema normalmente reservado para relojes con un mecanismo de sonería de gran tamaño”.
El desarrollo del nuevo calibre R AL 27 PS ha dado lugar a la presentación de cuatro nuevas patentes. Este movimiento consta de 561 componentes, su volante oscila a una frecuencia de 21.600 alternancias por hora y genera una reserva de marcha de entre 43 y 48 horas. En el reverso de este movimiento destaca la masa oscilante del mecanismo micro-rotor, en la que encontramos grabada la firma de Philippe Stern.
Patek Philippe 1938P; conclusiones
No puedo finalizar sin mencionar que, por primera vez, la referencia numérica de un reloj Patek Philippe tiene una lógica; 1938 es el año en el que nació Philippe Stern. Recomendar o alabar el 1938P es casi prescindible. Es una pieza que alberga todos los símbolos que históricamente han caracterizado a los relojes del máximo nivel de esta firma ginebrina. Además, tanto el motivo de su creación como el modo en el que se plasma en la esfera son y serán únicos. Por tanto, si añadimos estas características a la desesperada demanda que experimentan los relojes más complejos de Patek Philippe, es evidente que el 1938P es, desde ya mismo, una gran pieza de colección con todos los visos de convertirse en icónica.
Al inicio de este artículo entrecomillaba el término “disponible al público” y el motivo es que, a pesar de que se acaba de desvelar oficialmente, tengo claro que acceder a una de las treinta piezas que se emitirán del 1938P ya es una misión imposible. No me cabe duda de que los 30 Patek Philippe 1938P Minute Repeater Alarm ya están adjudicados. De todos modos, aplaudo a cualquier apasionado que disponga de los medios, del historial de coleccionista necesario ante Patek Philippe y de la fe necesaria, que lo intente por todos los medios. Yo lo haría.