Dos años después de los tonos blanco y negro del RM 71-01, Richard Mille lanza la nueva colección RM 71-02 Automatic Tourbillon Talisman, cuyo protagonista es la hipnótica apoteosis de sus colores prismáticos conseguidos mediante un espectacular trabajo de engastado de piedras preciosas. Gracias a las variaciones en el diseño del engaste, Richard Mille compone diez versiones que, asociadas todas ellas al nombre de una mujer, se limitan a únicamente 7 piezas.
Si en 2018 se inspiró en el Art déco, esta vez dirige la mirada hacia la cultura de la discoteca y el nacimiento de la música electrónica y disco de los años 70, y que además fue testigo de cómo surgían nuevas tribus urbanas que se entregaban a la vida nocturna. Cécile Guenat, directora de Creación y Desarrollo de Richard Mille, se propuso reinterpretar el individualismo exacerbado de la época disco, de la que rescata los juegos de luces, sonidos y colores por medio de la síntesis de varios estratos de la cultura de los años 1970: los ritmos punzantes de los éxitos musicales de la época, el ambiente teatral de Studio 54 y, como no podía faltar, la extravagancia de una moda en la que reinaban el lamé brillante, el estrás y las lentejuelas.
Diamantes, zafiros, amatistas, espesartitas, espinelas, rubíes, tsavoritas, peridotos, lapislázuli, crisoprasa limón, ónice, peridotos, malaquita, nácar, hematitas, sugilitas, turquesa, ópalo rosa y jaspe son los coloridos elementos utilizados por Cécile Guenat, directora creativa y de desarrollo de Richard Mille. Las piedras preciosas están engastadas en distintos patrones geométricos que engalanan las cajas y las esferas de 0,90 mm de grosor, estas últimas haciendo referencia a dos universos distintos: uno vegetal y otro urbano. El diseño de dicho engastado, minuciosamente escogido para lograr el efecto preciso deseado, ha supuesto una labor artesanal que se ha prolongado durante más de seis meses.
Las cajas de oro gris de 52,20 x 34,40 x 12,50 mm implementan en su interior el calibre CRMT1, el primer movimiento tourbillon automático manufactura presentado en 2018 que estaba, contra todas las expectativas, alojado en un reloj hecho por una mujer y para la mujer, el RM 71-01. Este mecanismo esqueletizado en forma de tonel de sólo 6,2 mm de grosor y 8 gramos de peso, late a 28.800 vibraciones por hora y dispone de una reserva de marcha de 50 horas. Cuenta con un rotor bidireccional de geometria variable que, engastado con gemas, permite adaptar el armado automático a la actividad que se practique ajustando las dos masas.
Estas se deslizan lateralmente y se bloquean gracias a los tornillos Spline. Cuando las dos masas están en su posición más cercana la una de la otra, la inercia del rotor es óptima, ofreciendo un armado más rápido del barrilete. Al contrario, si se desplazan a las extremidades del rotor, la inercia del mismo se reduce considerablemente y el armado del muelle se realiza más lentamente.
Para complementar su espectacularidad, Richard Mille ha diseñado una serie completa de pulseras para cada modelo. Pulseras, en charol metalizado, grabado con discretos motivos vegetales a las 12 en punto y líneas geométricas a las 6 en punto se unen gradualmente dos tonos diferentes. De acuerdo con la inspiración subyacente, los contrastes están asociados con los materiales que juegan con la luz y la textura. A esta colorida armonía se ha agregado el tratamiento metálico del cuero destinado a realzar el impacto visual de las piedras.