Roger Dubuis presentó el Orbis in Machina Central Monotourbillon en el salón Watches and Wonders de este mismo año (artículo) y fue la gran estrella de sus novedades, Ahora, apenas seis meses después, esta manufactura ginebrina incorpora una nueva versión de este monumental reloj decorándolo con un espectacular engaste de diamantes y rubíes.
El tourbillon central es una de las complicaciones más raras de ver. La más conocida es el De Ville que desarrollo Omega como demostración de su poderío, aunque también se han atrevido con él firmas como Franck Muller y Corum. El motivo es que llevar el órgano regulador de un movimiento a su centro implica alterar el esquema clásico de un reloj, especialmente el tren de engranajes que soporta y controla las agujas centrales.
Esta nueva versión del Orbis in Machina Central Monotourbillon conserva todas las características del modelo inaugural que ya vimos en abril. Ello incluye el diseño y el oro rosa como material para su caja, así como sus dimensiones de 45 mm de diámetro por 14.41 mm de grosor. La novedad la encontramos en el espectacular aderezo de piedras preciosas que lo decora.
En el bisel perimetral de la caja encontramos un engaste de 72 grandes diamantes talla baguette, que suman nada menos que 2,9 quilates. Estos diamantes se distribuyen en 12 grupos de seis piezas, en clara relación con las 12 horas del sistema horario. En el realce interno se alojan 11 índices horarios, excluyendo el correspondiente a las 12 horas, plasmados con rubíes trapezoidales enmarcados en una estructura de oro rosa.
El esquema se repite en la zona central, con un índice que corresponde a los minutos y que presenta la misma combinación de gemas que hemos visto en el perímetro del reloj. La diferencia es que ahora 48 diamantes y 12 rubíes se emplazan en el mismo círculo, para completar un total de 60 piedras que representan los correspondientes minutos.
De forma concéntrica e interna, rodeando el tourbillon, encontramos el último índice, que en esta ocasión corresponde a los segundos, indicados por una pequeña aguja que surge directamente del eje del volante. Siguiendo el patrón cromático del resto de elementos, en este índice los marcadores son transferidos en blanco y rojo.
El impresionante mecanismo , manufacturado por Roger Dubuis, que da vida al Orbis in Machina Central Monotourbillon es el Calibre RD115. Se trata de un movimiento de carga manual, con esquema de tourbillon volante central, cuyo volante oscila a una frecuencia de 21.600 alternancias por hora y genera una reserva de marcha de 72 horas. La jaula del tourbillon realiza un giro completo cada minuto.
El cristal de zafiro que equipa el fondo de la caja nos permite deleitarnos con este movimiento, al que se aplican nada menos que 11 terminaciones distintas. Como es habitual en esta elitista firma ginebrina, Roger Dubuis emite este Orbis in Machina Central Monotourbillon en formato de edición limitada, en este caso a tan solo 8 unidades.