Renovarse para seguir igual. Si algo funciona, ¿para qué tocarlo?. Esta máxima la aplica Rolex a la perfección, y un claro ejemplo lo tenemos en la última versión del Submariner que la firma ginebrina acaba de lanzar. No hay reloj de lujo más omnipresente que el icónico Submariner, un reloj que ha trascendido la funcionalidad como instrumento de buceo y ahora es considerado como un símbolo de diseño y estatus reconocido tanto por los aficionados al mundo de la relojería como por el público generalista. Sin duda uno de los relojes más importantes del siglo XX.
La última vez que el Submariner recibió una revisión fue en 2012 con la introducción de la ref. 114060, la versión sin fecha de la ref. 116610 presentada en 2010, el primer Submariner en usar un bisel de cerámica Cerachrome y en usar la caja de estilo «maxi» con asas más anchas. Ocho años después, Rolex actualiza la colección con un nuevo look gracias a su aumento de tamaño, un brazalete más ancho y un nuevo movimiento. A pesar de ello, sigue conservando el diseño clásico que poco ha cambiado desde la década de 1950.
Lo que nos ha sorprendido es que Rolex ha roto con una de sus tradiciones en cuanto a la presentación de novedades se refiere. Cuando lanza un nuevo modelo acostumbra a hacerlo de forma gradual; a una primera versión fabricada en metales preciosos le sigue una bicolor, dejando para el final la iteración más buscada, la de acero. Pero este año, y quizás debido a los efectos de la pandemia, Rolex ha lanzado toda la colección de golpe, encabezada por el Submariner sin fecha ref.124060, pero también cuatro Submariner Date con nuevos biseles de colores combinados con varios metales como el acero, el oro blanco o el Rolesor. Dejaremos estos últimos para otro artículo y nos centraremos en el verdadero pilar de la colección, el Submariner 124060LN sin fecha, caja de acero y esfera y bisel negros.
Aunque a primera vista parece un cambio muy discreto, el aumento de 40 a 41 mm es importante a nivel de sensaciones. Con un tamaño que se había mantenido en los 40 mm durante muchas décadas, este no se ha ejecutado de forma aislada. El resto de la caja también ha sido remodelada, con unas asas más estrechas acompañadas de un brazalete más ancho, dando como resultado un reloj menos agresivo y más cercano a los Submariner clásicos de hace décadas que la generación anterior (ref. 114060), más estilizado y bien proporcionado. No se ve tan grande como parece y que se percibe más delgado de lo que es.
Por su parte, el bisel giratorio unidireccional está dotado de un disco Cerachrom graduado a 60 minutos en cerámica negra, mientras las graduaciones y los números, moldeados en hueco, muestran un acabado de platino en PVD.
Los cambios en la esfera son aún más sutiles. Debido al mayor diámetro de la caja, la esfera parece «respirar» un poco más, ofreciendo una imagen más liviana. La minutera es ahora más larga (ahora «toca» la escala de minutos) y tiene una inserción luminiscente más ancha. La manecilla horaria de tipo Mercedes también es un poco más ancha que en el pasado, mientras que el segundero conserva su perfil de piruleta, con un punto luminoso.
El otro cambio es el minúsculo emblema de la corona situado en medio del logotipo «Swiss Made» a las 6 en punto. Además, este texto está ubicado en la parte inferior de la esfera, con los índices de minutos asomando por encima de ellos en lugar de debajo de ellos como en la generación anterior.
Aunque su aumento de diámetro es el cambio más visible en esta evolución (que no revolución), el más importante está oculto a las miradas: su calibre 3230. Su introducción por primera vez en el Submariner es silenciosa pero significativa a nivel técnico. Junto a su espiral amagnética Parachrome azul, este movimiento ofrece una reserva de marcha de 70 horas, casi un 50% más que las 48 horas del calibre 3130 en la ref. 114060. Además implementa el escape patentado Chronergy que lo convierte en un reloj más eficiente y fiable a lo largo del tiempo. Su precisión es de -2/+2 segundos por día, y cuenta con la certificación de Cronómetro Superlativo.
El precio del Rolex Oyster Perpetual Submariner 41 mm No-Date Ref. 124060 será de 7.700 CHF, lo que supone un aumento de 200 CHF respecto a la generación anterior. En mi opinión, el hecho de implementar el calibre 3020 y la mejora estética del leve pero eficiente restyling, hace que merezca la pena pagar ese incremento.