Cartier Libre: el diseño llevado al extremo

Cartier Libre es la denominación que da la firma de La Chaux-de-Fonds a una nueva colección que veremos en el inminente SIHH 2018. Se trata de una colección perenne ya que los cinco relojes que la componen están fuertemente limitados en su producción, de entre 15 y cincuenta piezas únicamente.

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  Cartier Libre - cover

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  Cartier Libre - models

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  Cartier Libre - Baignoire Debordante

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  Cartier Libre - Baignoire Etoilée

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  Cartier Libre - Baignoire Interdite - Crash Radieuse

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  Cartier Libre - Baignoire Interdite

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  Cartier Libre - Crash Radieuse

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  Cartier Libre - Baignoire Infinie

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Inevitablemente, en cada artículo en el que tratamos de Cartier hacemos referencia al diseño, el principal rasgo del su ADN histórico y presente. El diseño altamente original y creativo lo aplica Cartier a sus joyas y complementos y los relojes nunca han quedado exentos de él. Esta nueva colección Cartier Libre la componen cinco relojes, algunos de ellos ya existentes en el catálogo, cuyo rasgo principal es la originalidad de su diseño externo.

Estos cinco relojes representan todo un ejercicio de diseño llevado al extremo y de complejidad de elaboración. De hecho, atendiendo a estos dos principios, los podríamos dividir en dos grupos. La complejidad del Baignoire Débordante, del Baignoire Etoilée y del Baignoire Infinie, aunque este último también se podría encuadrar en la categoría de diseño extremo, cuyos máximos representantes son el Baignoire Interdite y el Crash Radieuse.

También se puede afirmar que la condición relojera de estas piezas de Cartier es lo de menos. De hecho, consultar la hora en cualquiera de ellos es un verdadero ejercicio de optimismo ya que resultará prácticamente imposible. En algunos por lo diminuto de su esfera y en otros por los elementos propios de diseño que lo dificultan en extremo. Pero también está claro que la precisión de lectura no ha sido la prioridad en los Cartier Libre.

Cartier Libre – diseño de elevada complejidad

El Baignoire Débordante puede considerarse el más «convencional» de los Cartier Libre. Su diseño ovalado de caja y esfera es bastante corriente, especialmente en relojes femeninos. El extremismo de este reloj lo encontramos en la extrema dificultad de elaboración.

Las protagonistas del diseño del Baignoire Débordante son sin duda las piedras preciosas que emanan de su caja; concretamente los diamantes y las espinelas. En su parco comunicado, Cartier no especifica el número de piedras que componen este complejo entramado, pero calculo que rondarán las doscientas unidades. Además del diseño por si mismo, en el engaste manual de este elevadísimo número de piedras reside una de las grandes complejidades de este Baignoire.

La caja del Baignoire Débordante está realizada en oro gris y el movimiento que equipa es de cuarzo, algo que no debe extrañarnos ya que es bastante común en relojes femeninos, incluso en las firmas más prestigiosas. El Baignoire Débordante se emitirá en una edición limitada a 50 unidades.

Aunque estéticamente muy distintos, el Baignoire Etoilée tiene muchos puntos en común con el Débordante. Ambos relojes coinciden en la arquitectura oval de su caja, aunque la del Infinie se presenta en formato horizontal en lugar de vertical. También observamos que el tamaño de dicha caja es diminuto, lo que evidentemente no facilita la lectura de las indicaciones horarias de su esfera.

El otro aspecto, el más significativo, en el que coincide el Etoilée con el Débordante es en el hecho de que la originalidad de su diseño y de su complejidad reside en las piedras preciosas, aunque en este caso implementadas en su brazalete.

Además del trabajo de engaste manual de los innumerables diamantes y espinelas negras, es impresionante tanto el diseño como el laborioso soldado de todas estas piedras para formar un brazalete de una originalidad fascinante.

Al igual que en el Baignoire Débordante, la caja del Baignoire Etoilée está realizada en oro y su movimiento es de cuarzo. En este caso se emitirá en formato de edición limitada a únicamente 15 piezas.

Cartier Libre – diseños rupturistas y extremos

Nos adentramos en el campo de los diseños extremos. El primer representante de este tipo de reloj en la nueva colección Cartier Libre es el Baignoire Interdite, un reloj que se sale de todo lo imaginable. Definir, o simplemente explicar su diseño ya resulta tremendamente difícil.

El Baignoire Interdite nos presenta una caja oval horizontal con un bisel engastado con diamantes, unas características que encontramos en varios de los relojes femeninos de la colección Baignoire de producción regular. Pero aquí termina toda normalidad. Por encima de la caja, como envolviéndola, encontramos unas bandas realizadas en ADLC negro brillante que parecen emular una especie de precinto, o por lo menos esa es la sensación que a mí me trasmite este raro diseño.

Si observamos estas bandas con mas atención, veremos que también parecen emular números romanos. De izquierda a derecha se diría que es un I seguido de un X. Por la parte derecha encontramos nuevamente un X y no soy capaz de descifrar lo que sigue. En medio,queda un reducido espacio a través del cual intentaremos tener una idea aproximada de la hora. Lo que es indiscutible es que el Baignoire Interdite es un reloj de diseño original, rupturista y extremo. Se emitirá en edición limitada a 50 piezas con caja de oro gris y movimiento de cuarzo.

El siguiente reloj es una viejo conocido y fácilmente reconocible para cualquier aficionado a la relojería; el célebre Crash. Se trata de un reloj con un diseño que siempre he admirado por lo imaginativo y rupturista de su concepto estético. Se podría decir que emula a un reloj inicialmente oval que ha sido torturado sin piedad, probablemente sometido a enormes presiones desde diversos ángulos.

Esta es una característica común a todos los los relojes de la colección Crash de producción regular que encontramos en el catálogo de Cartier. La diferencia que aporta el Crash Radieuse es que traslada este efecto a su esfera.

Desaparecen los número romanos que encontramos en la esfera del Crash «convencional» y en lugar de ello encontramos lo que se supone que eran tres óvalos que han sufrido la misma deformación que la caja. este mismo efecto lo encontramos en lo que se supone era el bisel de la caja, que parece haberse arrugado. En segundo plano, de forma muy diluida, también podemos apreciar unos números romanos que han perdido toda función de índice y cuya finalidad es complementar este diseño de auténtica locura.

El efecto resultante de todo este conjunto de locuras estilísticas es la de un reloj que parece destinado a ser un instrumento de hipnosis, ideal para los psicólogos fanáticos de Freud.

El Crash Radieuse es el único reloj de la colección Cartier Libre que equipa un movimiento mecánico, concretamente el calibre de carga manual 8970 MC. Su caja está realizada en oro amarillo y su producción se limitará a 50 unidades.

Finalmente, nos adentramos en el último de los relojes de la colección Cartier Libre; el Baignoire Infinie. Se trata de un reloj que perfectamente se podría encuadrar en cualquiera de llas dos categorías que he inventado para este artículo. Se trata de un reloj muy complejo de ensamblar pero también aporta un diseño que se sale de todo convencionalismo.

Lo primero que llama poderosamente la atención es su diminuta esfera, lo que le convierte en prácticamente ilegible, aunque repito esta no es la prioridad de Cartier al diseñarlo ni lo que buscarán sus futuras compradoras. El aspecto más significativo del diseño del Baignoire Infinie es su total integración en la pulsera que lo ceñirá a la muñeca de su propietaria.

Podríamos describir el Baignoire Infinie como un reloj de caja redonda que ha sido cortada en sus laterales siguiendo la linea de la pulsera. El centro lo ocupa la minúscula esfera rodeada en su perímetro por un círculo engastado con diamantes talla brillante.

De la esfera parten una especie de radiaciones formadas por un mosaico realizado a partir de multitud de piezas de nácar blanco, nácar de Tahití, espinelas negras y diamantes talla baguette. En la elaboración de este mosaico es donde reside la gran complejidad de realización de este Baignoire Infinie.

La conclusión es simple. La nueva, y muy limitada, colección Cartier Libre es todo un ejercicio de imaginación y originalidad. Todo ello acompañado de una gran complejidad de elaboración y montaje de sus componentes externos. En relojería, como en todo, se pueden discutir muchos liderazgos. En el campo del diseño rupturista y original es difícil discutir el de Cartier. La colección Cartier Libre es una muestra fehaciente de ello.