El Singer Track1 SKLT Edition introduce por primera vez una variante que va más allá de cuestiones estéticas en el impresionante reloj con el que esta marca suiza es estrenó hace tan solo cinco años. Su primer reloj fue el Singer Track1 Launch Edition, presentado en el 2017, al que han seguido diversas versiones que combinan distintos materiales de caja y tonalidades de esfera.
El Track 1 (artículo) de Singer se basa en el calibre AgenGraphe creado por Agenhor y con la conjunción de los conocimientos y habilidades de ambas sociedades se creó un reloj que revolucionó el mundo de los cronógrafos. Lo más trascendental es su inusual forma de indicarnos el tiempo y las mediciones del cronógrafo, que se apartan de todo lo considerado como convencional.
No obstante, este calibre y este reloj también aportan otra característica que se sale de toda norma; es un reloj de carga automática que oculta su masa oscilante. Con un concepto creativo de «mente abierta» los desarrolladores del Track1 se cuestionaron hasta lo más básico en relojería, entre ello la premisa de que la masa oscilante de un reloj automático debía montarse en el reverso del movimiento.
Este principio no tiene nada de malo, salvo cuando se trata de un reloj de cronógrafo de alto nivel ya que perjudica la contemplación de los componentes del movimiento, uno de los mayores deleites de los propietarios de este tipo de pieza relojera. Por ello precisamente, la mayoría de cronógrafos del máximo nivel son de carga manual. Esta disyuntiva entre la practicidad un mecanismo automático y la espectacularidad del movimiento de un cronógrafo manual desaparece si en lugar de montar la masa oscilante en el reverso del movimiento lo hacemos en su anverso.
Inevitablemente, si el movimiento equipa la masa oscilante en su anverso, esta queda oculta por la placa que conforma la base de la esfera. A la izquierda de la imagen superior podemos ver la edición London del Track1 con la simulación de su esfera cortada. En la parte derecha de dicha esfera podemos apreciar claramente las asas que conforman la masa oscilante y que normalmente jamás veremos.
A la derecha de la imagen comparativa vemos el nuevo Track1 SKLT Edition, cuyas siglas ya denotan que Singer lo califica como esqueleto. No lo hace en el sentido clásico de afinar los puentes al máximo sino de dejar a la vista lo máximo posible los componentes del movimiento. Con ello la masa oscilante deja de ser invisible y se muestra en su totalidad.
En el primer artículo que publicamos sobre el Track1 realizamos una breve introducción sobre los orígenes de la firma relojera Singer Reimagined. En ella vimos que desde sus fundadores han tenido y tienen mucha relación, tanto pasional como profesional, con el Porsche 911.
Si volvemos a la imagen comparativa vemos que Singer no ha modificado en absoluto el diseño de las aspas de la masa oscilante por el hecho de ser visible. En la imagen superior, podemos apreciar que casualmente, o no, es un diseño que sigue el de las llantas más icónicas del Porsche 911. Esta esqueletización y la consecuente ausencia de base opaca en su esfera ha requerido que la escala del cronógrafo se haya tenido que trasladar al cristal de zafiro.
Las características técnicas y prestaciones del Singer Track1 SKLT Edition son idénticas a las de los anteriores Track1. Solo remarcar que el metal elegido para su caja es el oro amarillo. Este espectacular cronógrafo se emitirá en formato de edición limitada, a tan solo 15 ejemplares. Su precio es de 90.000 CHF, al que habrá que aplicar la conversión del franco suizo a la divisa correspondiente del país donde se adquiere y sumarle los impuestos correspondientes al país del comprador.