Obviamente este tema se aparta de la Alta Relojería y de los contenidos habituales de Watch-Test, pero estoy convencido de que el inminente lanzamiento del iWatch de Apple revolucionará el sector de la relojería. En un reciente artículo sobre el SISTEM51 de Swatch ya plasmé mi visión de lo que puede suceder en un futuro cercano, y parece que esta noticia confirma alguna de mis predicciones.
TAG Heuer ha sido y es una de las marcas dominantes del segmento medio de la relojería mecánica, que como nos confirmaron sus responsables, ahora apunta a lo que podríamos denominar gama alta. Quizás este nuevo enfoque estratégico se deba a que ellos también sospechan el estropicio que puede causar el iWatch en el mercado. El fichaje de dicho ejecutivo por parte de Apple, lo ha confirmado personalmente Jean-Claude Biver, Presidente del grupo LVMH, en una entrevista televisiva en la CNBC. Biver no menciona su nombre, pero por el cargo que especifica se debe referir a Patrick Pruniaux.
Esta noticia parece confirmar que el futuro iWatch apuntará bastante más alto, desde el punto de vista cualitativo, que los actuales «smart watches» del mercado. También puede apuntar que Apple se plantee una distribución complementaria del iWatch a través de los canales típicos del sector relojero, porque de lo contrario no le veo demasiado sentido al fichaje.
En el editorial de la CNBC, también afirman que Apple quiere otorgar a su futuro iWatch el estatus de Swiss Made, algo que yo no tengo tan claro. Como ya conocéis los aficionados a la relojería, dicho estatus está muy regulado y además recientemente ha endurecido sus condiciones, exigiendo que un mayor porcentaje del trabajo que se efectúa en el proceso productivo y de montaje de un reloj se realice en Suiza.
A pesar de la marea de rumores sobre el iWatch, no he oído ninguna que se refiera a un acuerdo de fabricación con algún productor suizo por parte de Apple. Más bien contrariamente, sí parecen confirmados los rumores (lógicos) que dicha producción la realizará un proveedor asiático. Aunque nunca se sabe, porque Apple es especialista en la sumamente difícil misión de mantener bajo secreto las características reales de sus productos hasta el día del anuncio oficial, pero la coherencia dice que es más lógico un partner especialista en micro-electrónica que en micro-mecánica, que es el ámbito que lideran las empresas suizas del sector.
Pero cabe otra posibilidad. Dado que la normativa del Swiss Made se refiere al proceso de montaje y ensamblado del reloj, sería coherente que Apple hubiera encargado la producción de los elementos externos (caja y pulsera) a una empresa suiza. Si esto fuera cierto y además el ensamblado final se produjera en Suiza, muy probablemente bastaría para cumplir con la normativa Swiss Made. Aunque de ser así, el precio final del iWatch debería ser incluso mayor de lo que preveo.
Lo que deduzco de todos los datos y hechos que de momento se conocen, es que Apple no considera su futuro iWatch como un mero accesorio sino como un reloj por derecho propio, y si finalmente es así, ello sería una gran noticia.