El Mikrotimer Flying, que aprovecha la construcción integrada del Mikrograph 1/100ª, está equipado con engranajes cinéticamente independientes: uno a velocidad normal para el reloj (4Hz, 28.800 alternancias por hora y reserva de marcha de 42 horas), y otro a velocidad ultra-rápida para el cronógrafo (500 Hz, 3.600.000 alternancias por hora y reserva de marcha de 150 segundos). Al separar los engranajes del reloj y del cronógrafo se elimina el riesgo de que uno influya sobre el otro. Y lo que es más importante, se reduce la pérdida de energía, optimizando la precisión del órgano regulador del cronógrafo. Incluso con el cronógrafo en funcionamiento, se mantiene dentro de los parámetros COSC.
No hay sistema de rueda de volante, eliminando así cualquier tipo de errores isócronos que este elemento puede causar.
El espiral de alta frecuencia presenta una rigidez optimizada y una longitud reducida, proporcionando estabilidad estática y un dinamismo sumamente alto con dilatación limitada, reduciendo a la par los efectos de la gravedad y de los impactos, y aumentando la precisión isocrónica del latido gracias a su baja amplitud.
La transmisión dinámica áncora/volante (patente en trámite) genera un impulso de híper-velocidad que no se ve perturbado por el deslizamiento áncora/dientes, ya que el áncora rebota literalmente sobre el volante en lugar de deslizarse.
A diferencia de los sistemas de auto-arranque volante-espiral presentes habitualmente en los relojes, el Cronógrafo Concept Mikrotimer Flying 1000 utiliza un sistema de Lanzador-Eje-Freno (patente en trámite), controlado por una rueda de pilares y posibilitado por la mayor rigidez del espiral. “START” activa el lanzador, poniéndolo firmemente en contacto con el escape radial. «STOP» empuja radialmente al lanzador hacia el eje, deteniendo al instante el movimiento del espiral.
¿Y sobre su diseño?. Si el Mikrograph Carrera fué un guiño clásico, el Mikrotimer es todo lo contrario, muy moderno. La caja, que parece desarrollada a partir de la forma básica del Carrera, está construida en PVD y con asas de titanio. Además, su movimiento está tratado con rutenio negro en el interior. Personalmente me encanta este look negrísimo, salpicado por los detalles en verde lima como el de la aguja central. Eso sí, el “1000” situado a las doce tiene un tamaño a todas luces exagerado.
El Mikrotimer Flying 1000, sigue estando en fase de Concepto, aunque hay ciertas voces que anuncia su comercialización antes de que acabe este año. Esperemos que pronto sea realidad para así poder comprobar la fiabilidad de tan aparentemente delicado mecanismo.