En 2011, Urwerk lanzó el revolucionario UR-110, una evolución de la tradicional visualización horaria mediante satélites orbitales que, además, adoptaba una nueva caja asimétrica. Diez años después, Felix Baumgartner y Martin Frei consideran que es el momento de dejar de fabricarlo, aunque antes nos dejan una pieza única, el UR-110 Baquelita, que será subastada con fines benéficos: la mayor parte del importe obtenido se destinará a la Cruz Roja Suiza.
La audacia y atrevimiento del UR-110 ha tenido un gran impacto a lo largo de los años, no solo ganándose la admiración del sector o el premio GPHG al mejor diseño en 2012, sino abriendo las puertas a una nueva generación de relojeros independientes con ideas tan rompedoras como novedosas. Durante esta década, hemos visto múltiples versiones que implementaban tanto materiales futuristas como los más retro (¡incluso madera!), pero esta «last version» aúna ambos extremos gracias a su bisel de baquelita y su caja de titanio. Creada en 1907, la baquelita fue uno de los primeros materiales de alta tecnología jamás desarrollados. De hecho, fue primera sustancia plástica totalmente sintética.
Sus propiedades fueron y siguen siendo múltiples y revolucionarias. Aislante y resistente al calor, estaba presente en todos los objetos cotidianos en ese momento, desde monturas de gafas hasta radios ”. Este pionero y resistente plástico termoendurecible estaba hecho de una combinación de fenol y formaldehído. También es un material con una rica historia en relojes, destacando su uso en los primeros biseles del Rolex GMT-Master. El bisel de este Urwerk no es menos llamativo, ya que añade una sensación sorprendentemente orgánica a su estética.
» En Urwerk no somos nostálgicos, pero quisiéramos celebrar el décimo aniversario de nuestra colección 110 con orgullo. Esta creación que ganó el trofeo al mejor diseño en el Grand Prix d’Horlogerie de Genève; que se enfrentó al mal en la muñeca de IronMan, el más rudo de los Superhéroes; que fue portada de las mayores revistas de relojería cuando se lanzó en 2011. Tenía que cumplir una última misión antes de escabullirse ”, anuncian los dos fundadores de la marca, Felix Baumgartner y Martin Frei.
Para ello han reconvertido un modelo semi-nuevo que has sido totalmente revisado, y al que se le ha implementado el masivo bisel de baquelita marrón de diseño fibroso. Por lo demás, conserva todos los atributos que lo han convertido en un reloj muy apreciado por los aficionados y coleccionistas: una gran caja asimétrica de titanio de 47 mm de ancho, 51 mm de alto y 16 mm de grosor, con un cristal de zafiro que se adapta a la compleja forma del reloj. Las indicaciones son típicas de Urwerk, con la característica complicación satelital con tres módulos giratorios de horas/minutos montados en engranajes planetarios y apuntando, en el lado derecho, a una arqueada escala de minutos. La esfera incluye un pequeño segundero, indicador de día/noche y indicador de cambio de aceite. Y, por supuesto, todas las indicaciones están resaltadas en verde neón.
Urwerk lo subastará en su propio sitio web a partir del 15 de octubre, y se cerrará dos días después a las 10:00 am (hora de Ginebra).