Les Cabinotiers Armillary Tourbillon
Con el Armillary Tourbillon cambiamos totalmente del tercio que hemos visto hasta ahora en los Vacheron Constantin Les Cabinotiers de este 2019. Sigue ofreciendo una extremadamente compleja complicación pero deja la estética clásica y se adentra totalmente en la que casi podríamos calificar de vanguardista.
Su principal signo identitario es el enorme tourbillon tridimensional que se exhibe en la parte izquierda de la esfera. A ello se une un original e inédito sistema retrogrado de indicar las horas y los minutos a través de un índice de 180 grados que ocupa la parte derecha de la esfera.
Paradójicamente se trata del menso original o exclusivo de los 10 Cabinotiers que nos ha presentado Vacheron. Entre los Cabinotiers del año 2018, vimos el Armillary Tourbillon Snake, que básicamente se trata del mismo reloj con una caja de oro rosa profusamente grabada, lo que le otorgaba un aspecto mucho más clásico.
Vacheron Constantin Maître Cabinotier Retrograde Armillary Tourbillon (2016)
A su vez, este reloj derivaba del Maître Cabinotier Retrograde Armillary Tourbillon que vacheron presentó en el año 2016 y cuya estética se asemejaba mucho más al Cabinotiers Armillary Tourbillon que nos ocupa. Las únicas diferencias son el guilloché «Clous de Paris» que adorna le fondo de la esfera y el material de su caja de 45 mm. Vacheron solo menciona que se trata de titanio, pero es evidentemente que ha recibido un tratamiento PVD, DLC o una capa de cerámica, que es lo que le otorga el color negro.
El mecanismo es el mismo que los dos anteriores «Armillary Tourbillon». Se trata del calibre 1990, que oscila a una frecuencia de 18.000 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 65 horas.
Les Cabinotiers Regulator Perpetual Calendar Jewellery
Las variantes de tipos de complicaciones y combinaciones de ellas son muy elevadas en la relojería mecánica actual, pero las que se aúnan en este Regulator Perpetual Calendar Jewellery son una auténtica rareza. Esta peculiaridad la otorga el esquema de Regulador, que se incrementa al combinarla con la de Calendario Perpetuo.
Como todo Regulador, encontramos las agujas de horas y minutos ubicadas de forma independiente en ejes distintos. Para las indicaciones del calendario perpetuo, Vacheron Constantin ha recurrido a una formula mixta: fecha por aguja y el día de la semana y el mes por ventanilla. Este Cabinotiers no olvida la vertiente artística, que encontramos reflejada en el guilloché que adorna el fondo de la esfera y el engaste de diamantes de su bisel. No obstante, probablemente lo que más llame la atención es el inusual color burdeos que preside su esfera.
El calibre 2460 RQP que equipa este reloj es exclusivo ya que actualmente no lo encontramos en ningún guardatiempo del catálogo regular de Vacheron Constantin. Se trata de un movimiento de carga automática que oscila a 28.800 alternancias por hora y ofrece una reserva de marcha de 40 horas.
Les Cabinotiers Cloisonné enamel “The Caravel” 1950
El último de los Vacheron Constantin Cabinotiers de este 2019, el Cloisonné enamel “The Caravel” 1950, se aparta de todos los demás nueve relojes que hemos visto ya que su excepcionalidad se basa totalmente en apartados artísticos y estéticos. Por ello, podría perfectamente encuadrarse en la colección Métiers D’art de la misma Vacheron Constantin.
Por otro lado, también podría pertenecer a la colección «Historiques» ya que se trata de una reedición, o réplica, de un reloj del año 1950, de referencia 4308, que pertenece al departamento de patrimonio de Vacheron Constantin.
Las dos características estéticas que identifican este reloj se aprecian con facilidad. La primera son sus asas tipo «cuernos de vaca», un detalle estilístico que encontramos an algunos de los relojes históricos más emblemáticos de Vacheron Constantin.
La segunda y más importante característica del Les Cabinotiers Cloisonné enamel “The Caravel” 1950, es su esfera. En ella, los maestros artesanos del Atelier de Anita Porchet han reproducido el mismo motivo de la caravela que adorna la esfera de la referencia 4308 de 1950. El método para reproducir la caravela también es el mismo que en el reloj histórico; el esmalte cloisonné.
Como es perceptivo en cualquier reloj que otorga el protagonismo a la decoración de su esfera, las indicaciones que ofrece se reducen al mínimo. El objetivo es interferir al mínimo en el motivo que la decora, y así ocurre en este «The Caravel» ya que solo encontramos dos finas y discretas agujas que nos indican la hora y los minutos. El responsable mecánico es el calibre 4400, un movimiento de carga manual que oscila a 28.800 alternancias por hora y ofrece una generosa reserva de marcha de 65 horas.
